Capitulo 9

649 62 29
                                    

Notas del capítulo:

No sé si debería agregar advertencias porque las tags fueron sólo el borrador, pero hay un "ataque" en este capítulo.



Kirishima se sentía bien. Se sentía muy bien, realmente bien. El calor se desparrama por su estómago y hace cosquillear las plantas de sus pies. Sigue soñando. Sabe que sí, porque Bakugou está ahí, flotando sobre él, desnudo y hermoso, y ya no está lastimado por la bala.

Está tocando sus muslos, sus caderas, y jugando con sus bolas, los ásperos dedos deslizandose por la piel sensible de Krishima. Suspira al sentir una mano sobre él, bombeando lento. Se relaja y lentamente rueda la cadera sobre la callosa mano, abriendo sus piernas. Ronronea cuando algunos dedos presionan su agujero, burlones y gentiles, rozando el músculo.

Dedos resbaladizos se deslizan dentro, y Kirishima jadea, balanceando sus caderas, la mano a su alrededor aprieta más insistente. Siente que se vendrá pronto, el calor incendiandolo por dentro. Respira pesado. Cree que dijo el nombre de Bakugou.

Intenta introducir los dedos más profundo, y lo hace, se mueven en forma de tijeras y frotan su prostata, Kirishima lo ama, pero le gusta la verga de Bakugou aún más. Gime, y se oye así mismo.

La mano a su alrededor y los dedos dentro suyo se sienten demasiado reales.

Sus ojos se abren abruptamente cuando siente algo húmedo y caliente en su cuello, la lengua de Bakugou haciéndose camino hacia su oreja.

—Oh... —dice Kirishima, pero la mano de Bakugou bombeando sobre la cabeza de su miembro sensible, y sus dedos girando dentro de él, le hacen temblar las piernas. Sus palabras se transforman en un gemido que le hace tirar la cabeza hacia atrás, rodando sus caderas al sentir acercarse el orgasmo. Se viene en la mano de Bakugou, con el placer viajando por su cuerpo. Jadea, sintiendo cómo el sudor comienza a enfriarse sobre su cuerpo.

—Oh, por Dios —jadea Kirshima. Se siente mareado, exhausto, increíblemente relajado. No está seguro si se vino tan placenteramente en su vida, incluso con el pene de Bakugou dentro de él.

Bakugou se está secando la mano en la camiseta que Kirishima usa para dormir. Este se la quita y la lanza al suelo. Bakugou lo mira, con ojos repletos de lujuria, pero su cuerpo reteniendolo.

Kirishima quiere sacarlo también. Quiere besar y lamer con su boca el cuerpo completo, succionar su alma contaminada por la polla y hacerle venir fuerte y profundo en su garganta—no creía estar reteniendose de tener sexo hasta que comenzó a soñar, aunque no puede recordar cuándo fue que su sueño terminó y comenzó el toqueteo de Bakugou.

—No puedo —dice Bakugou, su voz es perezosa—. Estoy duro y mi puta cabeza está dando vueltas.

—Oh —dice Kirishima. Supuso demasiado, pero—. Entonces, ¿por qué...?

—Estabas haciendo ruidos en sueños —dice Bakugou, sus mejillas aún siguen teñidas de rosa—. Gimiendo y follando con mi puta pierna.

—O-oh —dice Kirishima, avergonzado. Espera que esté exagerando.

—Sabía que eres una puta, pero eres demasiado cachondo, rogando se cogido incluso en sueños.

—Capitán... —se queja a medias Kirishima, subiendose la ropa interior, moviéndose extraño. Se lanza nuevamente dentro de las sábanas con un suspiro.

—Sí, justo así —dice Bakugou, con voz baja y cerca. Kirishima sonríe cansadamente, empujandolo gentilmente.

—Gracias, Capitán —dice, volviendo a dormirse. Luego agrega quieto, con un pequeño rubor en sus mejillas, invisibles por la oscuridad—. Te recompensaré. 

The Lost Continent [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora