Despertó algo desorientada, había tomado solo una lata de cerveza y aquello había sido suficiente para que se quedara dormida en cuestión de segundos. Estiró sus brazos y choco con algo, volteo su rostro hacia ese lado y recordó a Heechul, este dormía plácidamente a su lado. Se sentó sobre la cama cubriéndose con la sabana. Fue entonces cuando su celular sonó, que recordó unas cuantas cosas.
— ¡Carajo!—se levantó de prisa al recordar la alarma que ella misma había puesto—no puede ser...
Salto de la cama y comenzó a recoger su ropa que estaba tendida sobre el piso. Se supone que hoy era domingo y no trabajaba, pero ella vivía con Donghae. La imagen que ella le había vendido a el era el de una pobre chica solitaria que estaba sola en el mundo, no tenía familiares ni nada, en parte aquello era la absoluta verdad, sin embargo no podía decirle que debes en cuando se ausentaba solo para venir a ver a Heechul ya costarse con él, aquello obviamente él no podía saberlo, de lo contrario todo se iría al demonio.
Termino de vestirse y abandono la casa de Heechul a toda prisa. Le resultó imposible conseguir un taxi, no tuvo más remedio que tomar un autobús que la llevara lo más cerca posible del vecindario donde vivía Donghae. El guardia de la entrada ya la conocía, en cuanto la vio levanto la valla permitiéndole el paso. A medida que caminaba hasta la casa de Donghae rogaba para sus adentro que el aun no hubiera vuelto de aquella reunión con su mejor amigo, quien había vuelto al país luego de dos años de haber vivido afuera de Corea.
Abrió la puerta con cuidado cuando dio unos pasos siendo cautelosa alguien la sorprendió.
— Bienvenida—cerró sus ojos maldiciendo en su interior, Donghae ya había vuelto a casa. Este bajaba las escaleras mientras sonreía saludándola—
— Donghae...—dijo algo incomoda quitándose su abrigo. Como de costumbre él se acercó a ella ayudándola—te desocupaste tan pronto...
— Solo fue una cena de bienvenida, Eunhyuk aún no tiene planeado irse...
— Valla, que bien...
— ¿Saliste a pasear?—pregunto viendo que iba muy bien vestida. Ella se encogió de hombros mostrándose desinteresada—
— Digamos que solo quería estrenar este hermoso vestido—dijo sonriendo como si aquello fuera vergonzoso—fui a mirar algunas vidrieras, tienes suerte de vivir cerca de tantos centros comerciales... mirar ropa, zapatos y carteras me llena el alma...
— ¿Compraste algo?—señalo con su barbilla hacia la pequeña bolsa que ella cargaba en sus manos—
— Es para ti—exclamo exponiendo el paquete frente a los ojos de el—
— ¿Para mí?—pregunto asombrado a medida que en sus labios se dibujaba una tonta sonrisa llena de esperanza—¿Qué es?—tomo la bolsa comenzando a husmear—
— Nada interesante. Son chocolates rellenos de dulce de fresa. Son mis favoritos. Según tu dieta se te permite comer dulces de manera moderada...
— Valla... ¿te diste tiempo de leer mi dieta?—(TN) ____ se encogió de hombros como si no hubiese hecho gran cosa—
— Era mi deber...
— (TN) _____, debiste pedirme dinero si pensabas ir al centro comercial...
— Oh, Donghae claro que no...—sacudió su cabeza como si aquello le hubiera desagradado—mira la hora que es...—Donghae miro hacia el reloj sin saber que podría ser—es hora de tu medicina... iré por ella, ahora regreso...
En cuanto la vio marcharse, se lamentó por haber sido tan bruto, en intento desesperado porque ella lo viera como algo más, usaba las peores estrategias y como resultaba solo obtenía que ella se sintiera incomoda hacia él.
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NO DEBISTE ENAMORARTE DE MÍ (con Donghae)
RomanceEl lo tiene todo... dinero, poder fama pero... una sombra oscurece sus días. Un dolor que lo ha atosigado durante toda su vida... Una mujer bella, solitaria y astuta sin nada que perder... se cruzara en su camino... sin saber que jamás debió posar s...