Cada día al terminar las clases José y yo íbamos al motel nos hicimos amigos del recepcionista al principio él se ponía en plan de ya no permitirnos la entrada pues éramos menores de edad, pero con el tiempo se acostumbró con nuestra presencia, el recepcionista se llama John tenía diecisiete años y trabaja ahí porque ayudaba para poder ayudar a su padre nos hicimos buenos amigos los tres a pesar de la diferencia de edad.
Hoy fui a verlo fui sola ya que José tenía que asistir a un evento o algo así me dijo la verdad creo que me está poniendo el cuerno con la linda Susana su compañera de estudio y no lo culpaba la chica era realmente hermosa.
—Hola John, ¿Qué tal?
—¡Ey! Hola Selene, ¿Qué te trae por aquí sola?, hoy no habrá acción con tu lindo chico.
—No, pero seguro él está teniendo algo de acción con su linda compañera.
—Y, ¿No esta celosa porque esté con alguien más?
—De hecho, estoy feliz de que experimente placer con alguien más que no sea yo.
Él pareció sorprenderse por mi confesión, pero no mentía en absoluto pues si José estaba con ella yo podría buscar a alguien más y él no tendría por qué reclamarme algo por lo tanto no le reclamare nada es más estoy pensando muchas cosas que se puedan hacer los tres.
—Selene a veces dudo si en verdad tendrás catorce años hablas y te comportas como alguien mucho mayor incluso algunas personas mayores no hablan como lo haces tú, ni piensan las locuras que piensas tú.
—Es que no soy cualquier persona y no me baso en la opinión de las personas pues cuando haces eso te prives de hacer muchas cosas y ello quiero hacerlo todo.
A John le pareció grandioso lo que dije me le quedé viendo mucho pues él era un chico muy guapo y carismático para nada virgen, cabe recalcar, por un momento pensé en tocarlo, sacar su pene y meterlo a mi boca y como no tengo filtros en esta.
—John estarías con una menor de edad.
—Vaya, Selene que te ha pasado que no eres una niña normal de catorce, la respuesta es sí de hecho ya lo he hecho antes.
— ¿Estarías conmigo? — Fui directa, no podía evitarlo.
—Selene eres muy hermosa y tu cuerpo se ve muy exquisito para ser tan joven pero no, por el simple hecho de que te hiciste mi amiga y José también lo es no puedo fallarle así a él.
-—Los amigos también se besan John, Los amigos también se tocan- dije acercándome a él y tocando sus hombros de una forma coqueta.
—Selene tranquila si, enserio no es correcto.
—Claro que no lo es, pues por qué crees que la gente lo ve mal y por eso te privas y no te dejas llevar por el deseo.
—Selene — dijo en un jadeo cuando toqué su pene y lo apreté un poco.
—Está bien tú ganas te dejo — y liberé su pene, pero vi que quería oponerse, aun así, no dijo nada, además no pienso rogarle prefiero que él me rogué a mí.
—Oye Selene yo...
—Tranquilo John no pasa nada — iba a seguir hablando cuando me entro una llamada era de José. — Discúlpame, Hola cariño dime, ok, ahorita llego.
—Debo de irme John nos veremos mañana, me acerqué a él y le di un beso en la comisura de sus labios.
Llegue a casa de José pues me llamo diciendo que estaba solo y así estaría unos días por lo tanto podría ir a visitarlo, pero cuando llegue se encontraba sin camisa y me hizo entrar a la carrera y una vez dentro la pasión y el deseo nos llevó al cielo pero esta vez de una forma que para los dos era nueva pues compartimos nuestros cuerpos, pude sentir su falo entrando y saliendo de mí y bien si es cierto que la sensación es algo incomoda, sangras y por algunos momentos no sientes nada, pero cuando te liberas de la incomodidad el placer se queda me sorprendió el hecho de que él se encontrará preparado tenía preservativos en su cuarto de hecho los tenía en una caja de zapatos.
Cuando él alcanzó su liberación, si yo no pude llegar, pero el estar masturbándonos un tiempo le enseño que partes tocar o que hacer para que yo pueda tener un orgasmo, se acercó y me abrazo quedamos desnudos en la cama tocando nuestros cuerpos.
—Estabas listo para esto. — No pude pasarlo por alto, en verdad me sorprendió que estuviera listo.
—Bueno fui al hospital si tendremos una vida sexualmente activa debemos cuidarnos, me dijeron que el condón es una buena opción, aunque no es cien por ciento efectivo, he pensado que sería bueno llevarte al ginecólogo para que todo esté en orden, cuidare de ti en esa parte porque es muy importante hacerlo.
—Está bien me parece perfecto, me encanta tu modo de pensar José, ahora quiero saber.
—El que quieres saber.
—Te acostastes con Susana verdad, dime la besaste como me besas a mí, tocaste su cuerpo como me tocas a mí.
—Si la bese, pero no toque su cuerpo, yo lo siento, pero no puedo mentirte, no a ti porque además de ser mi pareja tu eres mi mejor amiga Selene.
—Está bien no pasa nada no tengo ningún problema con que estés con otras chavas siempre y cuando no te molestes si yo estoy con otros chavos.
—Es enserio o solo estás probando.
—Tonto, no necesito probarte pues sé que puedo confiar en ti José eres mi único amigo el que me conoce realmente, eres quien conoce mi manera de pensar y aun así me aceptas y te mantienes a mi lado para las otras personas nosotros somos unos niños buenos que no hacen nada malo, que sacan buenas notas y se comportan decentemente, dime porque me molestaría que fueras tan sincero conmigo, porque me enojaría que estuvieras con otras chavas.
—Eres sin duda sorprendente Selene y claro que nuestra amistad o relación o lo que sea que tengamos será sincera siempre, pues cuando las demás personas nos den la espalda tu y yo nos brindaremos el apoyo necesario.
—Es un trato. Dije viéndolo a los ojos.
—Es un trato — Me dijo el dándome un beso para sellar el pacto.
Luego de eso él y yo volvimos a tener sexo y adentrarnos en lo maravilloso de este pecado. "La conciencia no es más que la obra del prejuicio recibido por la educación, hasta tal punto que todo lo que se le prohíbe al niño le causa remordimientos en cuanto lo viola, y conserva esos remordimientos hasta que el prejuicio vencido le haya demostrado que no existía ningún mal real en la cosa prohibida." – Marques de Sade.
Y así pasó el tiempo, los días se convirtieron en meses, los mese en años y cuando menos acordamos José y yo habíamos alcanzado la mayoría de edad la universidad nos esperaba y sabíamos que juntos la convertiríamos en nuestro infierno, nuestra promesa nunca se rompió éramos grandes amigos al año de nuestra relación decidimos terminarla pues no queríamos etiquetas para poder disfrutar de la vida eso fue un acuerdo mutuo pero eso no significaba que no la pasábamos bien de hecho muchas veces teníamos encuentro sexuales hasta llegamos a hacer un trio más de una vez que puedo decir, descubrimos de lo inmoral a una edad temprana y desde entonces no hemos dado marcha atrás y esperaba nunca hacerlo.
Espero les guste y que los cambios se noten.
Hasta Pronto.
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INMORAL +18
ChickLitLujuria, Soberbia y Envidia Ten mucho cuidado conmigo porque lo que quiero siempre lo obtengo.