Te tengo una sorpresa, nos juntamos en el parque a las 6, no te demores
Y tal como había pedido el azabache, nuestra protagonista se encontraba puntualmente en el lugar organizado por su novio, odiaba estar con faldas en ese momento pues gracias al viento era difícil hacer que este se mantuviera en su lugar y no mostrara más de lo debido.
Unos brazos tomaron su cintura, dejando un suave beso en su mejilla y sintió el olor a la colonia varonil que tanto le gustaba.
— Hola Dabi —sonrió la chica a lo que el mayor escondió su cabeza en la curvatura del cuello de la fémina.
— Hola.
— ¿Cuál es mi sorpresa? —cuestionó levantando su brazo para alcanzar la cabellera negra del villano y acariciarla.
— Cierto —suspiró mientras se alejaba de la chica— sígueme.
Las manos parcheadas del chico tomaron las manos suaves de la chica, sacándole una sonrisa, hace tiempo que no sentía el tacto suave y gentil del villano.
Caminaron por bastantes calles, hasta llegar al lado peligroso de la ciudad, la chica se extrañó pero lo siguió sin reclamar. Dabi se detuvo en seco mirando una casa a unos metros más adelante.
— Encontré la solución a nuestros problemas...
❗️
— ¡Dabi no! —gritó desde el fondo de su garganta cuando vió como golpeaba al bicolor.— ¡Basta!
— ¿No es este nuestro problema? ¿La razón por la que peleamos?
— ¡No! ¡La razón es totalmente diferente! —soltó llorando a mares, queriendo golpearlo, pero ¿cómo iba a hacerlo si él la había amarrado para ver toda la sorpresa?
— ¿¡Entonces cuál es!? —contraatacó el azabache pensando que tenía la pelea verbal ganada.
— ¡Tú y la maldita rubia de Himiko Toga! No soy yo ni mis amigos el problema de la relación. Eres tú y tu estúpida "Novia" —su cabeza se agachó llorando mientras veía a su amigo tirado en el suelo, sangrando, esperaba que sólo estuviese inconsciente y nada más.
— ¿El problema soy yo? ¡Yo no soy quien anda detrás de un maldito viejo y de un bastardo como él! —el chico se acercó a la chica tomando su mentón con una delicadeza tan inquietante que erizó cada vello de su cuerpo.— ¿Ves cómo está tu "Amigo"? Todo esto es tu culpa.
— N-No lo es.
— Oh cariño, la culpa siempre ha sido tuya, por no saber controlar tus hormonas y a quien perteneces...
La chica miró la bicolor tendido en el piso, diciendo una y mil oraciones en su cabeza, deseando que él no estuviera muerto.
Maldita sea, esto estaba listo desde hace un mes aproximadamente, pero había olvidado publicarlo JAJAJAJAJA, escribí como 5 veces este capítulo y con diferentes finales, me quede con este. ¡Perdonen la demora!
ESTÁS LEYENDO
Violentometro ✨Dabi✨
Fanfiction》y aquel demonio vestido de ángel comenzó adesenmascararse《 Sé original Sé como José