Jamás tus labios besarán con tanta libertad,
esa que te dan los míos cuando estamos juntos,
esa que te da la certeza de mi amor,
esa que tienen los amantes perpetuos en días efímeros como el de hoy.
Tan dulce gozo se difumina,
Tan cruel historia se escribe
Tan triste futuro se proclama
Desde tus labios que,
presos del error que cometieron,
Ya no volverán a probar los míos.
En horas insulsas recordarás mi piel,
En días vacíos,
desearás volver a probar mi miel,
Pero solo harás brotar mi hiel
De la fuente inagotable de mi placer
Oh dulce veneno que brota por ti
Mana y se desborda
Dejando atrás el recuerdo de tu voz
Desde la triste mañana
Del día que dejaste de ser mi amor
