Capítulo X

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Los meses pasaron, al parecer todo estaba en paz, no pude asistir a la boda de mi hermana, por mi estado, ni si quiera puedo caminar.

Recibí una sola visita de mi madre Lady Galadriel, el bosque se llenó de alegría por su venida al reino, de hecho tuvo una ceremonia de bienvenida donde el rey quedó encantado con su amabilidad, y pareció olvidar los problemas.

Pero sigue existiendo ese resentimiento desde hace siglos, así que no exigo mucho de ambos, aunque el corazón de mi madre es puro, por lo que ya perdono aquel mal entendido.

Escribía una carta para ellos pero fue interrumpida por una conocida voz.

- Puedes pasar Albidia- sonreí al ver su rostro.

- El príncipe ordenó traerte el desayuno, y aproveché para visitar a mi amiga- colocó un charol lleno de frutas - Por cierto tienes que comer, dos semanas más y la familia crecerá.

- Tu boda se acerca, debes estar féliz- sentí unos pequeños golpes de mis criaturas.- Parece que estuvieran jugando todo el día.

- No creo poder casarme he visto como observa a la nueva doncella, es amor - sus ojos se aguardaron al decirlo.

- No lo creo, he visto su rostro al verte - aunque trataba de ser racional no tenía argumentos para mentir - Pero eres libre de tomar tu decisión, sólo se féliz querida amiga.

- Tu esposo está practicando con el ejercito supongo querrás ver - asentí- Tienes que cambiarte.

Un largo vestido gris, y una corona.

El ejercito se preparaba aún no sabia para que con exactitud, miré su postura al tirar una flecha y algunos se equivocaban.

Con mi mano cambie la dirección de la flecha haciendo que de en el blanco enseguida.

Thranduil capto mi presencia de inmediato, retirándose de la práctica junto a la guardia.

- Tienes que dejar que se equivoquen, cariño- beso mi mejilla.

- Has visto quién ha sido la autora- tome su mano y la diriji hacia mi vientre - Ellos están desesperados por conocerte.

Un dulce beso fue depositado en mi ocupado vientre, Thranduil seria un gran padre.

Al regresar tuve una entretenida conversación con el rey, quien sugería nombres para sus nietos.

- Me gustaría que se llamara Gilwëm o Nerena - móvi mi cabeza por los extraños nombres que surgían.

- Es bello Gilwëm, lo tomaré como sugerencia - reí.

De repente un dolor inmenso atravesó mi vientre.

- Esatas bien Aranna- tome el brazo del rey para levantarme - Guardias traigan a un elfo sanador rápido.

Senti como una extraña agua bajaba por mis piernas.

Mi visión se volvió borrosa y vi varias doncellas en mi habitación.

••••

Thranduil Pov

Un movimiento más y derribo al general de la guardia, ataque con la espada ganando la confrontación.

- Mi rey, es urgente- deje de atacar, una doncella de largos cabellos negros insistía en llamarme.

- Algo sucedió, si es mi padre decirle que estoy ocupado- negó varias veces.

- La princesa Aranna acaba de entrar en labor de parto- su noticia hizo que arrojara la espada y corriera hacia en castillo.

Un Gran SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora