Todo se hallaba a oscuras.
Nuestro grupo yacía durmiendo plácidamente, a excepción de uno de ellos. Apesar de haber intentado una y otra vez de poder tomar un descanso, InuYasha solo había conseguido que sus desagradables síntomas le atormentaran en lo que quedaba de esa noche.
Sus amigos disfrutaban de una merecida ciesta, en cambio él se hallaba en vela- lamentándose por la llegada de sus más odiadas fases que su parte demoníaca le obsequiaba cada ciertos meses.Llegando la mañana sus ojos irritados y rojizos de tanto lagrimeo inconsciente
-debido a los constantes temblores y dolores en distintas zonas de su cuerpo- se posaba atenta en la puerta deslizante frente a él, a la espera de que aquel que se hallaba llamándole para desayunar se rindiera y le dejara sufrir en paz.
Y así fue, después de unos largos minutos de hable y hable sin recibir respuesta, Sango se había decidido por dejar de insistir.Y así pasaron las horas.
Al haber llegado el almuerzo nuevamente se habían presentado otros dos. Esta vez Shippo y Aome que prometían darle como merecido almuerzo tres razones grandes de aquella deliciosa comida ninja.
pero, como tal había sospechado y dicho Sango hace unas horas por la mañana: Él en su condición no probará bocado alguno. Y se estaban cumpliendo, InuYasha si que está pasando por un mal momento.––¡De verdad, Sango!
InuYasha no dijo nada luego de decirle que le daríamos unas raciones más de comida si salía––Shippo informó en tono alarmado a la exterminadora que lo cargaba.
––Ni siquiera dijo un tan solo 'no', no respondió nada. No dijo nada––
Aome habló esta vez mirando por el rabillo de su ojo la entrada del pasillo que daba a la habitación donde InuYasha había decidido resguardarse.
La sacerdotisa sonó preocupada y extrañada, desconocía por lo que pasaba su amado. Lo que Sango había comentado el día anterior y esa misma mañana no era suficiente información para ella.––Si sigue así perderá energía, puede llegar a enfermarse también, apesar de que sea medio bestia––
Miroku se unió en tono serio mientras el terminaba su ración de sopa instantánea. Sango lo miro, era cierto. Aome suspiró con pesadez, aún más preocupada.
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《En Celo》[KogInu|Yaoi]
FanfictionLa época de reproducción de monstruos y demonios llegó, y con ello la época de celo en las distintas especies sobrenaturales de la antigua Japón. InuYasha y su grupo se hallaban aún en busca de Naraku y de los fragmentos de la poderosa Perla de Shi...