TIEMPO

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Faltaban exactamente seis meses para que el suceso tan importante ocurra.

"La luna teñida de sangre", para los humanos solo era un fenómeno astrológico ~hermoso~, sin importancia; los ángeles, por otro lado solo podían reflexionar sin poder hacer nada; pero para los demonios, ese acontecimiento los llenaba de más poder del que ya poseían.

¿Tiempo? Si, definitivamente eso era lo que querían y necesitaban. Uno para tener más oportunidad de perfeccionar su plan de ataque.

El otro para tranquilizar esos nervios de no elegir bien y decepcionar a todos.

"Decepción" definitivamente eso era lo que a ambos les asustaba más.

/FORTALEZA DE PIEDRA/

-¿Qué pasa si nadie logra captar mi atención?- un susurro casi inaudible se escapó de su garganta, pero su acompañante lo escuchó a la perfección

-Sehun, claro que alguno te va a gustar- su padre posó la mano sobre su hombro- he seleccionado lo mejor de lo mejor para ti

-Lo sé... pero dudo mucho que un simple humano llene mis expectativas es... es patético- resopló el pelinegro

-Sé que es extraño... pero desde que la vi por primera vez entendí que no encontraría ser más perfecto en ningún lado- su hijo miró a la dirección que veía su padre y pudo observar atreves de la ventana a su madre, con su largo cabello negro recogido en un elegante moño y con aquel vestido blanco que tanto le gustaba

-Mamá es genial- afirmó

-Bueno de todos modos tienes la opción de dejarle el lugar a alguien más y si es posible... a mi una que otra opción- soltó una carcajada al ver la expresión de su hijo

-Como si pudiera

-Juro que ese mal carácter lo heredaste de ella... Esa niña seria- soltó dolido, provocando una pequeña risita a su hijo

Kyuhyun amaba aquella sutil y pequeña sonrisa, a veces cuando la veía pensaba en lo errado que estuvo el universo al hacerlo demonio, puesto que su corazón era demasiado cálido y puro, como el de un ángel ~pero siempre se molestaba consigo mismo, al comparar con lo último~. 

A diferencia de él y todos allí ~ojos rojos~, su hijo poseía los ojos negros y profundos ~como los de Seohyun, su madre~ y el amaba eso.

/PALACIO DE MARFIL/

El tiempo previsto había llegado antes de lo deseado. Seis meses de entrenamiento arduo con los mejores profesores de estrategia y pelea. Más de ciento ochenta días, sin ver a aquel adorable ángel que tanto le gustaba; pero ahora que solo faltan cuarenta y ocho horas para partir, eso era lo que menos le preocupaba.

-Todo saldrá bien, Lu... yo estaré ahí para cuidarte la espalda, como siempre lo he hecho- lo consoló su mejor amigo, mientras pasaba un brazo sobre sus hombros

-El amanecer es hermoso desde aquí... me pregunto cuanto tardaré en verlo otra vez...- susurró cansado, mirando al horizonte

-El amanecer seguirá aquí para cuando regreses... vamos eres Xiao Luhan, el ángel rebelde que pone al paraíso de cabeza- ambos rieron un poco

-¿Tan malo soy?- negó con la cabeza

-Ellos quieren un cucufato... muy diferente

-Lo lograré... regresaré con su cabeza entre mis manos... y se lo regalaré a Suho, al pedir su mano

-Que romántico- rodó los ojos divertido- Por cierto, Yixing también irá... ya sabes él supera a todos aquí, cuando se trata de estrategia...

-Quien lo diría es tan... tan distraído

-Lo sé- ambos ángeles rieron, dejando de lado el extraño futuro que avecinaba, dejándose bañar por los colores rojizos y amarillos, del alba.

ALAS /HunHan/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora