UN SUEÑO Y UNA MISIÓN

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"Soñar", a quién no le gusta imaginar un mundo o circunstancia diferente, un lugar en nuestras mentes en donde todos los deseos del corazón se hacen realidad; donde el único que manda es uno mismo.

Luhan amaba soñar cuando era pequeño; su inocente cabecita solía pensar que al ser el líder podría acabar con esa horrible guerra que destruía poco a poco el mundo que tanto amaba, pero ahora a sus dieciséis años /según edad humana/, esas creencias habían quedado olvidadas en lo más recóndito de su corazón.

"Un mundo mejor" le había dicho a su madre, quien solo reía y besaba su frente con amor "Sería mejor si ellos desaparecieran" susurraba ella en su oído, lo mismo cada noche, hasta que aquella idea había perforado sus huesos y se volvió parte de él.

Luhan ya no es un niño, hace mucho que dejó de serlo y aunque en ocasiones quería odiar esa esperanza que le brindaban los sueños, aun va a la cama cada noche esperando tener uno.

/PALACIO DE MARFIL/

-Joven Xiao, es hora de levantarse- decía su anciana nana, mientras abría las cortinas, dejando entrar la enceguecedora luz solar- Vamos mi niño, sus padres van a enfadarse

O talvez ya lo estaban...

-Solo cinco minutos más- susurró intentando ocultar su rostro entre las almohadas mullidas.

Alguien entró ruidosamente a su habitación, matando el poco silencio que aún reinaba; pisadas tan firmes, que Luhan por un momento pensó que todo se movia.

-Nada de eso- dijo el intruso jalando las sabanas de seda, provocando que todo cayera al frío piso de mármol- ¿ves lo fácil que es sacarlo de la cama?... mi querida nana, ya estás perdiendo tu don- molestó a la vieja mujer, mientras dejaba un suave beso en su mejilla

-Mi nana y mejor amigo, ¿Acaso no pueden al menos dejarme terminar mi sueño?- ambos negaron con la cabeza- Estaba a punto de besarlo...

-¿Besar a quién?- la suave y confundida voz de Sully, hizo poner en blanco los ojos del rubio a su costado

-¿A quién más? Sino a Junmyeon... Babea por él a todas horas, ¿Cómo es que no lo has notado?

-Cuando era pequeño babeaba hasta por la ensalada de fruta... como iba a saber que ahora babea por las personas- se burló

-Que gracioso- su voz teñida de ironía

Mientras Baekhyun y Sully inventaban teorías sobre cómo alguien tan sublime como Suho se fijó en el rebelde Han. El otro fingiendo molestia se apresuró a tomar un baño y a vestirse con uno de sus habituales trajes blancos.

Mientras el agua caía sobre su cuerpo suavemente y las puertas corredizas de cristal se apañaban con vapor, en su mente solo permanecía el corto y cálido sueño que había tenido esa noche, el cual lo llenaba de seguridad para la petición que le haría a sus padres esa misma mañana.

En realidad se trataba de un recuerdo, uno dulce... Uno que a su mente le encantaba proyectarlo, como una cinta antigua, cada noche en sus sueños.

ooo

Habían pasado trescientos sesenta y cinco días por su vida, pero ese exquisito sabor de boca se abstenía de dejarlo.

-¿Qué haces aquí?-el de ojos chocolate, lo ignoró- hace frío, sabes... no eres un demonio o algo así para producir abundante calor... te congelarás- aunque trató de ser divertido, sonó tosco, él enserio estaba exasperado de que nisiquiera haya volteado a verlo

El castaño sin prestar atención golpeó con su mano izquierda el césped, invitándolo a tomar asiento.

Luhan sacudió la cabeza, acomodó su gruesa bufanda y tomó asiento, cubriéndose del viento helado con sus alas.

ALAS /HunHan/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora