21.

1.5K 69 1
                                    

Parecía una noche esplendida a su lado.
Risas y chistes en cada oración
Deliciosa comida y buenos momentos
Incluso me cantó alguna canción.
Su voz era tan suave sin dejar de ser grave y masculina. Sus manos eran un as en la guitarra. Conocía la letra de memoria y la cantaba como si un poema fuera. Uno para mí.
- ¿Cargas con una guitarra siempre?-
- No, sabía que esta noche la necesitaría, es por eso que la tenía. - -¿Es tuya?- Asiente - Tienes una voz hermosa y tocas la guitarra con habilidad. La letra me gustó mucho. -
- Gracias amor, desde que la letra vino a mi cabeza supe que quería compartirla contigo. -
- Es muy dulce de tu parte, gracias. -
Me sentía en casa aún estado lejos de ella, me sentía muy feliz y plena. Desearía que así fuera siempre. Sin concesiones del horror ni precipicios de muerte y peligro.
Los apodos y besos espontáneos en mi mejilla harían olvidar el orgullo hasta a la persona más dura. Caricias en mis brazos y apretones en mis piernas.
Me sentía bien con él y solo con él. No con su "otro yo". Además, no estaba segura si buscaba algo libre o no eran necesarias palabras y términos para él pero para mí lo era. Quería tener todo en claro.
- Harry, no pretendo presionar ni nada por el estilo. Es solo que quería hablar de algo contigo.-
- Dime, ¿Hay algo que pueda hacer por ti? -
- No es ningún favor. Quiero hablar contigo de algo - Pauso para tomar aire - ¿Qué somos? -
Su semblante cambia por uno serio. No sé si lo insulté o arruiné su noche, no puedo leer nada en su rostro. No muestra ni una pizca de sentimiento alguno y no está tocándome como normalmente lo hace. Está alejado tanto física como sentimentalnente.
- Siendo sinceros no esperaba esto. -
Un doloroso silencio invade el lugar. Puedo escuchar como una parte de mi se rompe y mi cabeza me reprocha ser un objetivo tan fácil.
Me cuesta un gran esfuerzo pero formulo unas palabras.
- Oh, creo que será mejor que te tomes tú tiempo para averiguarlo. -
Lo digo con tristeza y enojo hacía él y hacia ambos. Tristeza por no ser correspondida y enojo a mi misma por abrirme tan rápido.
- No es como tú lo piensas amor. No temo al compromiso ni soy hombre de muchas mujeres. Es que me di cuenta que nunca había considerado lo más importante. -
- ¿Qué es eso? -
- Eres una humana. -
Lo odié. Odié como me menospreció por ser normal. Por no ser una mutación de la naturaleza como él.
Quería arrancarme mi propia piel ahí mismo. Soy poca cosa para su gusto. Lo odié por ilusionarme y después escupirme con delicadeza en el rostro que soy débil y, seguramente, no suficiente para su gusto.
- Vete. -
- Amor no es así. No es como crees. -
Lágrimas empapan mi cara y sollozos que no puedo ocultar mucho.
- No quiero explicaciones. Se cómo es. Es tan fácil decirme la verdad Harry. Dime qué no soy suficiente. Que nunca podré correr junto a ti, nunca podré cazar contigo, ni pelear con nadie, proteger a nadie, entender tu devoción a la madre ni sabré que es estar en un clan con seres como tú. No quieres renunciar a eso. Sabes que si formalizas algo conmigo, en unos años te arrepentirás o estarás tras otra mujer. Ocultándo su amorío. Lo sé. -
Me observó llorar y hablar sin interrumpir. Escuchó todo y puso toda su atención en mí. Esperó hasta que me detuve e inhaló.
- Todo lo que has dicho es tan falso en tantas maneras. Nunca. No a ti. -
- ¿Entonces de qué se trata? ¿Necesitas asesinar a alguien para estar conmigo? ¿Tenemos que hacer un ritual con sangre para vernos? ¿Crees que es fácil para mí verte? Con todos tus secretos y planes. No sé ni porqué estoy enojada. Debes estar haciéndome un favor. -
- Tu vida. Es todo lo bueno de ti que no me permite estar contigo. Toda tu belleza y pureza. Al principio habría hecho todo por estar en tu cama pero me di cuenta que eres mucho mejor que eso. No solo eres una belleza natural, eres un alma tan amable y dulce. Amarte me es imposible. Por eso no me siento bien estando contigo. Las circunstancias que rodean mi vida tarde o temprano te llevarán a la desgracia. Tu vida no está a salvo conmigo. Y sé que me tienes miedo, que me observas con pavor las veces que me he convertido frente a ti. Y también sé que si pudieras cambiarme, lo harías. Más no me molesta. -
Estoy atónita por su revelación.
¿Será que por esta razón se alejó de mi por días?
- ¿Entonces? ¿Es esto el adiós?-
- No amor, estoy diciendo que quiero estar contigo, pero primero necesito que lo pienses. Que estés segura que afrontarás lo que pueda pasar. Que seas tú la que lo desea. Te pido que recuerdes la noche que llegué muriendo en el cobertizo. Eso puede volver a pasar, no sabemos cuántas veces, ni sabemos si estés a tiempo para salvarme. -
Esperanza y miedo bailan en mi estómago una danza violenta. Quiero vomitar y llorar. Correr y abrazarlo.
- Me iré amor, piensa las cosas. Cuando hayas meditado lo suficiente, cualquier hora llama y vendré. -
Besa mi mano y se adelanta a la puerta por si solo.
- Muchas gracias por tu tiempo y amabilidad. Pasa una buena noche amor. -
Ni siquiera lo veo después de que de levantara del comedor. No pude verlo.
Estoy tan llena de todo para reaccionar; sé qué es lo correcto y por qué debería sentirme tranquila, pero sé qué es lo que yo quiero. Quiero a un hombre que es bestia por igual. No puedo cambiarlo. Es egoísta y caprochoso de mi parte querer cambiarlo, no amarlo por quien es.

Hasta ahora... El silencio nunca ha sido tan cruel.

Bajo los Ojos de la Luna  •|ℋarry Styles|•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora