El Partido.

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Poco después de que las vacaciones finalizarán y Remus y Sirius dieran unas cuantas visitas más por las Tres Escobas. James y Peter volvieron y se pusieron a contarles sus aventuras de Navidad en la sala común. Los otros dos se callaron como perras, pues no era plan de decir que se habían emborrachado a diario.

-Pues sí, mis primos son unos pesados, mira que son re-pijos ...-se quejó James.

- Los míos están todo el rato pegándome, es una pesadez.

-Yo también te pegaría si fuera tu primo.

Peter rodó los ojos por el comentario del de gafas y los otros tres se rieron por lo bajo.

-Quizás deberíais dejar las cosas que habéis traído en la habitación -propuso Remus.

-Sí mamá- contestó divertido James.

Tanto Peter como James cogieron sus pequeñas mochilas, con cosas traídas de casa o ropa de vuelta y se dirigieron a las habitaciones cada cual con sus respectivo compañero de cuarto. Dentro del  de Sirius y James el primero caminaba de un lado a otro con nerviosismo, mientras James colocaba sus cosas hasta que este se hartó y decidió preguntar.

-¿Qué?

Sirius giró la cabeza hacia él, confundido.

-¿Qué de qué? -dio un bufido.

- Pues que que narices te pasa, está claro que algo quieres decir.

- No, que va ¿por qué lo dices?.

- Pues, teniendo en cuenta que llevo en esta habitación seis años consecutivos contigo, me considero capaz de leer tus ticks.

Sirius se sentó en la cama y llevo la mano a sus cuello, revolviéndose  el pelo.

- Bueno, ¿recuerdas que os comenté que me gustaba alguien?

-Sí, sigue.

Sirius se llevó las manos a las rodillas con nerviosismo.

-Me-e gus-ta R-remus.

-Sí. Espera... ESPERA ¿¡QUÉ!?

Sirius se sentó en la cama y miró al suelo apenado por la reacción de su amigo.

-No pienso repetírtelo.

James suspiró y se sentó a su lado.

- ¿Justo Remus?  La chica con la que fuiste al baile estaba muy buena...- el de pelo largo le lanzó una mirada asesina.

-  Vale vale.  Lo capto. Canuto,  si sales con él te van a caer palos por todos lados, yo solo digo.

- Ya ya, pero, ¿qué más da?

-¡¿Qué que más  da?! Imagínate que os vais a vivir juntos, ¡A lo mejor te mata! -Sirius le mira mal.

- Eso ha sido especialmente insensible por tu parte y ,decir eso, es mucho hablando de ti Cornamenta.

-Tienes razón, me he pasado un poco... Si quieres te presento a una amiga de Lily...

-¡James!  ¿Puedes dejar de decir estupideces y darme consejo como un buen amigo? - negó con pesadumbre- ya me estoy arrepintiendo de habértelo dicho...

-Okay,  si eso es lo que quieres te daré un consejo. Creo que no deberías intentar nada con Remus, primero, porque ya sabes como es , seguro que te da calabazas y segundo, porque por mucho que te duela la gente está empezando a sospechar y a hablar mal de él.

-Somos sus amigos y nadie se ha metido con nosotros por mucho que sospechen de Rems.

-Una cosa es ser su amigo y otra daros mimos por los pasillos -Sirius se levanta.

Como quieras || Wolfstar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora