Mi Historia

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Lucy P.O.V

Ha pasado mucho tiempo desde que tome decisión, ¿Cuánto habrá pasado? ¿Días, semanas, meses? No, fue exactamente hace dos años, dos años en el que tome esta decisión, dos años desde que abandone el gremio ¿Por qué? Simplemente porque ya no pertenecía ahí, ya no era mi hogar, es más, ellos me habían dado la espalda mucho antes de que me fuera y pensar que alguna vez fue mi familia, mis amigos, todo ellos me dejaron atrás para seguir adelante, todo fue por esa perra de cabello blanco, todo fue por ella, aún recuerdo lo que paso…

HACE DOS AÑOS ATRÁS

Estaba muy desastroso en Fairy Tail, siempre con sus peleas sin sentido, pero eso era lo que distinguía al gremio, aparte de nunca perder las fuerzas de ganar y siempre ver por sus amigos, estaba ahí, sola en la barra, no tenía ganar de hacer nada, es más, tenía esa misma sensación desde hacer días, únicamente Mira-chan me preguntaba que me pasaba, yo solo le contestaba que no tenía nada con una sonrisa, vaya sonrisa tan falsa, no quería preocuparla ni nada por el estilo, a lo lejos veo dos figuras que entran al gremio, desde ahí mi día empezó de mal en peor, está el, aquel muchacho de cabello rosado con su bufanda, tan blanca como su sonrisa, aquel mago del que estaba enamorada, se veía tan feliz…

-Natsu- Susurre su nombre y de inmediato mi corazón empezó a retumbar con gran fuerza y velocidad, en verdad lo amaba, de todos modos, fue el primero que me conoció, el que me llevo al gremio por primera vez, el que siempre se preocupaba por mí. Pero todo eso se convirtió en pasado, el ya no me hablaba, ya no me dirigía ni una sola mirada, él estaba con ella, su "amiga de la infancia" su preciada Lisanna, no puede evitar sentirme molesta y triste al mismo tiempo, me molestaba que ella estuviera con Natsu todo el tiempo, es aceptable, ya que ella volvió de "Entre los muertos" y Natsu quería reponer ese tiempo con ella, pero ya era común verlos juntos, riéndose, conversando, demonios hasta se iban de misión JUNTOS, con Gray y Erza, entonces entendí que solo era un remplazo, incluso me habían sacado del equipo según ellos, para que descansara, si claro, sabían que yo era débil a comparación de esa, lo peor ocurrió ese día.

-Ya Natsu ¿Por qué no se los quieres decir? No pasa nada créeme- Dijo la pequeña albina quien seguía aferrándose al brazo de Natsu, los había escuchado, varios pensamientos pasaron por mi mente, temía que ocurriera eso y para mi desgracia, ocurrió.

-Está bien Lisanna, se los diré ¡Oigan! ¿Podrían prestarme su atención todos?- Grito Natsu, llamando la atención, el gremio se congelo de repente, todos parecía que estaban atentos al Dragón Slayer.

-¿Por qué debería hacerlo flamita?- Pregunto muy arrogante Gray, Natsu de inmediato quería empezar una pelea, otra vez.

-¿Qué dijiste, cerebro de Hielo?

-¡Lo que oíste, aliento de chile!

-¡Atrévete exhibicionista!

-Ya Gray, Natsu trata de ser serio por una vez en su vida.- Dijo Lisanna separando a los dos, yo solo veía que sería algo normal en ellos.

-Vale, pero lo hare solo por Lisanna- Dijo el mago de hielo ya más tranquilo, pero no se dio cuenta que se había desnudado otra vez, después de eso, Natsu volvió a tener postura para hacer su anuncio, ahí seria la gota que derramo el vaso.

-¡Lisanna y yo ya somos novios!- ese anuncio, ese estúpido anuncio había destruido mi corazón, el gremio se puso feliz de inmediato y se acercaron a felicitar a la pareja, todos menos yo, yo trataba de asimilarlo, yo me enamore perdidamente de él y el muy tonto no se dio cuenta ni siquiera se lo preguntaba y después vino esto, no quería llorar, ganas no me faltaron, pero eso me haría más débil, mientras todos estaban distraídos, me fui del gremio, sin mirar atrás, corrí a mi apartamento, estaba destrozada, estaba viviendo mi peor pesadilla, ya no tenía el consuelo de mi madre o el de mi padre, mis amigos me habían dejado atrás y ahora la persona que amo esta con otra, era oficial, estaba sola, al llegar, me encerré, cerré la ventana, no quería visitas de nadie, solo quería llorar, no quería saber de nadie, solo quería morirme, ya no quería vivir en este mundo, estuve a punto de hacer algo estúpido esa ves, fui a la cocina y saque un cuchillo y sin pensarlo, me corte el brazo, la sangre salía a chorros, así acabaría con mi dolor, después me desmaye.

Ya no soy lo que eraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora