Roba mi corazón

Capítulo 45: ¿Por fín?

Derek estuvo acudiendo a rehabilitación por una semana y se recuperó muy rápido. Ahora ya vuelve a ir a clases y se ha incorporado muy bien al temario. Me asombra su capacidad de entender las cosas tan rápido. A mí me lo pueden repetir ochenta veces que no me entero hasta que llego a mi casa y lo analizo sola. Hoy era viernes y mi hermano se iba de fiesta, mi madre trabajaba las 24h y mi padre pues nada, más viajes de negocios, eso quería decir que esta noche la pasaría a solas con Derek. En conclusión, me gustaban los viernes.

***

-¡______!- gritó Derek mi nombre- ¡______!

-¡QUEEEE!-grité desde la cocina.

-NO ME SALE EL EJERCICIOOOOO- volvió a gritar para que lo escuchara.

-YA SUBOOOO- le contesté alargando la O. Salí de la cocina camino al salón y estaba allí Derek, pero, no estaba haciendo la tarea- Derek, ¿Qué haces?

-Nada- contestó levantando los hombros- me aburro solo.

-¿Y la tarea?- dije cruzándome de brazos.

-Tengo todo el fin de semana- dijo alzando las cejas- no quieres aprovechar este viernes tan bonito.

-Está lloviendo- dije riendo.

-Yo no he dicho que tengamos que salir de casa- dijo levantándose y acercándose a mí para agarrarme de la cintura y plantarme un beso.

-Ohh- dije riendo- ¿entonces, señorito, que quieres hacer?

-Mmmmm- dijo poniendo sus manos en mis glúteos- ¿jugamos a un juego?

-¿A cuál?- dije levantando una ceja.

-Yo empiezo- dijo sonriendo y levantándome mientras besaba mis labios. Enroscó mis piernas en su cintura y comenzó a caminar.

-Pero que jue…- dije pero fue interrumpida.

-Shh- dijo poniendo sus labios sobre los míos otra vez- he dicho que yo empezaba.

Comenzó a subir las escaleras, aun sin soltarme, y entró en mi habitación. Me dejó en el suelo aun sin separar nuestros labios y me acorraló contra la pared.

-Te toca- dijo sonriendo.

-¿Pero a que se supone que jugamos?- dije confundida sin entender su juego.

-Déjate llevar y haz lo que quieras, lo que desees- me explicó- por ejemplo…- dijo y me besó- esto.

-Ohh entiendo- dije levantando una ceja- así que con esas tenemos. Pues juguemos.

Puse mis manos en su nuca y enrosqué mis dedos en su pelo. Estampé mis labios contra los suyos y jugué con su lengua causándole un gemido. Esto se estaba poniendo caliente y me gustaba. “Quieres hacer ya el amor con él, dilo claro que todos lo sabemos”. Mierda, no, vete, ahora no aparezcas maldita sea. “Lo que tu digas guapa”. Aggg mierda, siempre apareciendo en momentos inadecuados diciendo cosas inadecuadas. Ignoré  a mi estúpida conciencia y seguí con este juego.

-Veo que sabes contralar muy bien- dije chinchandole.

-Puedo hacer lo que quiera ahora mismo- dijo con una sonrisa traviesa.

-No es tu turno- dije retándolo- no puedes hacer nada.

-¿Y eso quien lo dice?- dijo riendo traviesamente- yo ahora puedo hacer esto perfectamente- dijo metiendo la mano por debajo de mi camisa.

-Entonces yo puedo hacer esto- dije besando sus labios y llevándolo poco a poco a la cama. Se sentó en el borde de esta y yo encima suyo- puedo hacer lo que quiera- dije ahora quitándole la camiseta lentamente volviendo a juntar sus labios con los míos para ir bajando poco a poco por su cuello. Él gimió de placer y lentamente se fue estirando en la cama. Acabé sentada encima de su “amigo” y me reí por lo bajo- puedo hacer todo esto y no pasará nada.

-Lo único que puede pasar es que notes algo raro- dijo riendo y haciendo que me estirara encima de él y me acercara para poder besar mis labios- estas encima de mí y Willy lo nota.

-¿Willy?- dije extrañada y confusa.

-Mi gran amigo Willy- sonrió triunfante.

-Uuuuu- dije riendo- eso tendremos que comprobarlo.

-Cuando quieras te lo presento- dijo poniéndose ahora encima de mí. A poco a poco fue desabrochando mi camisa. Besó mi cuello y noté como dejaba un chupetón en este. Me retorcí de placer cuando sus besos iban bajando poco a poco por todo mi cuerpo hasta llegar a mi pantalón, lo desabrochó y cuidadosamente me lo quitó para quedar los dos en ropa interior. Sus besos llegaron a mi feminidad haciendo que todo se humedeciera por su aliente caliente que chochaba contra ella. Quería que me hiciera suya ya.

-¿Quieres que pare?- me preguntó inseguro.

-No- dije excitada como nunca lo había estado- los dos queremos esto- dije y lo besé lo que hizo que se calmara. Willy ya estaba que no podía mas asé que le quité sus bóxers y yo lo poco que me quedaba de ropa interior. Estaba preparada para esto, y esta vez, sin nadie que pudiera fastidiar la noche.

-Te amo- dijo aún encima de mí. Volvió a besar mi cuello pasando por mis pechos hasta llegar al punto débil, esta vez lo besó sin nada que lo cubriera, me miró y puso una mano encima de mi feminidad, me besó- ¿estás preparada?- preguntó acariciándolo muy delicadamente. Asentí. Estaba preparada. Metió un dedo dentó de mí y solté un gemido de dolor pero a la vez placentero. Derek se asustó al principio- ¿estás bien?- preguntó preocupado por mi pequeño grito.

-Demasiado bien- dije besándolo. Metió dos dedos entro de mí y los movía lentamente para no lastimarme, esto era maravilloso- Derek, estoy más que preparada- le dije y el sonrió.

-¿A la de tres?- preguntó preocupado de hacerme daño.

-Cuando tú digas- dije sonriendo y besándolo para que se tranquilizara y disfrutara.

-Una…- dijo posicionándose entre mis piernas- dos… y…- se paró. Se oyó un portazo de la puerta principal.