bufónvich; lit x ecko.

08.

matias se encontraba en su cama, con la mirada pérdida en el techo y ambas manos descansando sobre su pecho, y algunas incesantes lágrimas caer de sus ojos. la puerta se abrió, mostrando a un khea preocupado.— che, ¿que pasa? —pregunto, adentrándose en la habitación, al final cerrando la puerta para llegar a la orilla de la cama y sentarse en esta, aun esperando respuesta alguna.— me siento vacío. —dijo con un nudo en la garganta, no le dolía, sabía que las cosas terminarían siendo así, sin embargo había algo que no podía explicar, tenia la necesidad de volver a sentir a mauro entre sus brazos, a pesar de haberlo tocado solamente una vez, quería sentirlo de nuevo. ivo pudo descubrir que pensaba en alguien, el problema era que no sabia en quien.— eu, tengo el número de joa, si quieres le llamo y hacemos una juntada con él y sus amigos. —al escuchar eso, ecko sonrió ampliamente y se sentó en su puesto, en sus ojos destellando una chispa que su amigo pudo percibir y al instante saber de quien hablaba.— ¿posta? —pregunto aun incredulo, serue sonrió y asintió, le alegraba ver bien a su casi hermano.—