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flaco que edad tenes que jugas esa poronga? —dijo monzón alzando la cabeza y extendiendo el brazo con el dichoso objeto en mano, matias no dudó en tomarlo y salir de la aplicacion para luego apagarlo y guardarlo en su bolsillo, acto seguido volvío su atencíon al mas chico tendiendole la mano para ayudarlo a levantarse.— mauro no me gustó que hicieras eso. —el mencionado sonrio apenado con las mejillas un tanto coloradas mientras tomaba sus manos en lo que se levantaba.— perdón, no lo vuelvo a hacer, y para que veas que estoy arrepentido te invito al circo a vos y a tus amigos. —no sabia el porque habia dicho eso, pero de alguna manera quería compensar lo que habia hecho.—

bueno dale, pero antes, anda a cocinar y luego me mostras el traje que usas. —el menor asintio caminando fuera del pequeño lugar dirigiendose hacia la cocina.

narra lit.

matias y yo ya estabamos comiendo, hice unas milanesas de pollo, al final su compañia resultó siendo mas agradable de lo que pensé.

mau, ya no quiero. —rapidamente lleve mi vista hacia el opuesto, un par de risas salieron de mi boca al verlo con salsa en la comisura de sus labios.—
como vas a querer mas si te lo embarraste todo en la cara. —dije riendo suavemente, alcanzando un par de servilletas para pasarselas.—
que queres que haga si cocinas re bien boludo. —aquel comentario habia hecho que mis cachetes tomaran color mientras asentía.—
soy chef profesional, yo cocino para los pibes antes de cada acto porque según ellos, mi comida es tan buena que se les pasan los nervios. —de mi parte casi ni habia tocado la comida, toda mi atencion estaba plasmada en cada acto que hacia el mayor.—









de vez en cuando vamo a cambiat d formato, ñie.

bufónvich; lit x ecko.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora