Capítulo 9

4.2K 520 145
                                    

Juegos que terminaron convirtiéndose en placeres prohibidos, placeres que terminaron convirtiéndose en libertad, libertad qué terminó convirtiéndose en una jaula llena de pecado.

Dios aún tenía una carta bajo la manga, carta que le haría ganar la apuesta. Pero estaba jugando en contra de Hades...

El castañito estaba envuelto en una manta, sentía su cuerpo adolorido. La mano del pelinegro se deslizó por su cuerpo desnudó provocando que su piel se erizará y su cuerpo respondiera con jadeos.
Ladeó su cuello dándole acceso al pelinegro de llenar el lugar de hermosos hematomas de diferentes tamaños.

— Te ves hermoso por las mañanas.— susurro dulcemente en su oído. Tae sonrió avergonzado.
— Te sonrojaste, ¿cierto?—
El pelinegro besó su hombro descubierto.
— No.
— Gatito.
— ¿A quien le dices gatito?— el castaño se giró con un puchero. JungKook sonrió.
— Las cosas nunca te salen bien. ¿Se supone que estas enojado e indignado por tu apodo?
— Claro que si, soy un adulto, y tú me estás diciendo gatito.— hizo un puchero sumamente adorable, el pelinegro besó toda su cara para terminar besando sus labios sin segundas intenciones.
— Eres muy joven.
— ¿Eres mayor que yo?— pregunto incrédulo.
— Mucho mayor que tú.
— Seguramente un año o dos—
"Unos millones de años mayor que tú" pensó

— Oye JungKook, ¿escuchaste a unos gatos en la azotea teniendo relaciones? Vaya se escuchaban mucho, diría que eran más gemidos humanos.—NamJoon aprecio en la sala semidesnudo, tan sólo con una toalla en la cadera.

"Ay, este cabrón ya vino a cagarla."

NamJoon abrió los ojos como platos al ver a TaeHyung y JungKook en el sillón cubiertos por una manta negra de seda, obviamente desnudos.

— Lo siento, en serio lo siento.— se disculpó con el rostro completamente rojo.

"JungKook va a patearme el trasero"

— Tienes toda la razón NamJoon.— sonrió, el moreno trago saliva.

— Ese hijo de perra, me duele todo el maldito cuerpo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Ese hijo de perra, me duele todo el maldito cuerpo.— se quejó HoSeok reincorporándose de la cama.

— HoSeok cuida tu vocabulario.— le regaño Dios.

— ¿Que haces aquí?

— Nada, sólo quería ver cómo estabas después de la pedota que te metió JungKook. Ay ese chamaco, uno vez fui a una peda con él. Nambreeeee llegue hasta el culo al cielo.— se hecho a reír.

— Me tuve que tomar una taza de té y reposar por dos días.— suspiro.

— Te traje un poco de ese té. Tienes que seguir cuidando de Taehyung.

Sacó de quien sabe donde un termo que estaba decorado con dinosaurios y se lo dio. HoSeok lo miró extrañado.

— Los dinosaurios eran bonitos.— susurro.

— Tómalo todo y te sentirás muchísimo mejor.— le dio una sonrisa cálida.

HoSeok tomó un sorbo del té, su sabor era dulce, olía bien, tenía un color rojo, tomó hasta la última gota. Dos minutos después no sentía ninguna consecuencia por su noche pasadita de copas. Le dio el termo a Dios y este se despido deseándole suerte con TaeHyung.

Dios nunca era demasiado bueno, le gusta jugar pero no perder.

2 días más tarde

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

2 días más tarde....

— ¿Quieres que te vaya a dejar a tu casa o prefieres quedarte conmigo?

— Quiero quedarme contigo pero el imbecil de HoSeok esta buscándome.

Vaya, que había cambiado mucho en esos dos días.
JungKook se la paso alagando la belleza del castaño y todo lo que él hiciera o dijera.Y TaeHyung se lo creyó todo, se sentía más bonito, especial e importante que cualquiera otro.
~Soberbia.

— Eres un pequeño gatito travieso.— se acercó y lo abrazó por la espalda.

— Puedo sentir tu miembro en mi trasero.
— Esa es la idea.
— Eres un pervertido.
— Te encanto de esa forma.— dijo restregando más su miembro en las nalgas del castaño.

El timbre sonó de forma desesperada.

TaeHyung se acercó a la puerta y la abrió. HoSeok estaba impaciente y la cólera en su cara se lograba ver a miles de kilómetros.

TaeHyung suspiró cansado.

— ¿Qué mierda quieres?, ¿cuidarme? Lamento decirte que lo que tenía que pasar ya pasó.— sonrió victorioso.

Los ojos de HoSeok tenían un ligero color rojo en ellos.

— Nos vamos.— tomó la mano de TaeHyung y lo arrastró hasta su auto.

— No iré a ningún lado. — contestó intentando soltarse del agarre del pelirrojo fracasado.

— HoSeok, mírame.— JungKook apareció sosteniendo la mano libre de HoSeok.

Observó el peculiar color en los ojos de HoSeok, que para los humanos eran invisible.

Una poción de amor, HoSeok esta enamorado de TaeHyung.

Dios había caído tan bajo, incluso rompió sus propias malditas reglas por una apuesta. Pero no, la poción no era su carta secreta, esa era aún más compleja. Dios también podía ser un hijo de perra.

— Guerra quieres, guerra tendrás.— susurro Hades que estaba en el infierno viendo todo.

Pero nadie era tan hijo de perra como Hades.

Esto se esta descontrolado xdxdxd

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Esto se esta descontrolado xdxdxd

Teorías amix :v

EDIT: Ay HADES te amoooooo

Te haré pecar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora