Los últimos Targaryen

897 25 0
                                    

Daenerys salió del castillo decidida, con la mirada fija y Jon la siguió rápidamente dejando a Melisandre sola en el umbral de la puerta.

Jon intentaba alcanzar a la reina dragón cuando de repente volteó su cuerpo hacia la mujer roja y dijo:
-¿Cómo pretendemos ayudar en la Gran Guerra si no vamos a llegar a tiempo? – Se enfadó.

-No me habéis pedido ayuda- contestó con un tono sereno, tan tranquilo que no parecía que el Norte fuera a desaparecer del mapa en cuestión de días.

Daenerys al escuchar esta conversación cambió su rumbo repentinamente hacia Jon. La luz del sol desapareció del paisaje una fuerte neblina blanca cayó sobre los héroes.

-Vienen a por ellos.- Dijo Melisandre refiriéndose a los dragones- los quieren para ellos, y si no están del bando del fuego, no pueden estar de ningún bando.

La Madre de Dragones la miró con frialdad y sin dedicarle una palabra apretó el brazo de Jon y le indicó con un ademán que fuera con ella hacia los dragones. Sin decirse ni una palabra las manos de lord Nieve ya estaban acariciando a Rhaegal para posteriormente acompañar a su reina hacia el fin del mundo. Daenerys ya estaba subida en Drogon y con un gesto de indiferencia hacia Melisandre comenzó el vuelo.

-¡Dany!- Gritó Jon al ver que Rhaegal también iniciaba el vuelo para seguir a su madre. Estaba aterrado, sus manos estaban tan aferradas al dragón que si seguía mucho tiempo así, pronto se quedaría sin circulación en los dedos.

Tyrion observó la escena y tras él Jorah y Varys que bajaban de dos barcos se quedaron perplejos al ver a Jon subido en un dragón.

-Siempre he escuchado las grandes historias sobre dragones que se alzaban sobre el norte, siempre deseé uno también.- Se calló de repente.

Jorah lo miró para con cara de sorpresa al ver que se callaba repentinamente. Cuando por fin los dragones habían desaparecido entre las nubes Tyrion prosiguió:

-...pero nunca imaginé que cualquier hombre tendría ganada la lealtad de uno de ellos, de uno de los últimos dragones... su historia será corta al igual que el legado de la última Targaryen si esta misión sale mal.

Mientras Tyrion conversaba Melisandre se había acercado a ellos. Varys fue el primero en notar su presencia.

-Eres una mujer que trae consigo un sentimiento de terror.- Dijo Varys sin siquiera mirarla.- Como vos no exteriorizáis esos sentimientos nos los contagiáis a nosotros.

Melisandre sonrió y cuando ya obtuvo la atención de Jorah , Tyrion dijo:

-El plan ya está en marcha, las sacerdotisas de mi misma orden llegarán al Lago Largo a la puesta de sol, antes de que la larga noche invada las tierras del invierno.

Los inmaculados desembarcaron y se colocaron en posición de marcha. A cargo de ellos estaba Gusano Gris quien buscaba nervioso a Tyrion.

Pero no tuvo que esperar mucho Tyrion estaba casi a su lado.

-Lleva a tus ejércitos hacia Invernalia, Melisandre os guiará, no podéis pasar por el hogar de los Amber, estos ahora están en el bando de la muerte.- Agachó la cabeza- Con suerte a nuestra reina aún le quedarán sus dos hijos cuando todo acabe.

-¿Quién dijo que esto acabaría?- Dijo Melisandre desde detrás.

Gusano Gris le dedicó una brusca mirada de odio e indicó a los demás inmaculados que le siguieran rumbo a la batalla.

Tyrion pensaba que seguramente sería la última marcha del ejército de su reina, el ejército de la mujer por la que tanto había hecho. Él veía algo en ella, algo que no veía en los demás, pero en el fondo sabía que no volvería a verla. En ese momento pudo vislumbrar como una llama sobresalía entre los inmaculados, era Melisandre, usaba su poder del dios de luz para indicar el camino, la horda de inmaculados se difuminó entre la niebla hasta desaparecer casi al completo, dejando una sensación de intranquilidad que les comía por dentro, en ese momento supieron que no estaban solos.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 23, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El Sueño de Jon NieveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora