Henry miraba el suelo pensativo. Era difícil distinguir el día de la noche, lo que le complicaba contra los días en aquella isla. Las historias no mentían cuando decían que Nunca Jamás era el lugar donde el tiempo se detenía. Lo único que podía hacer era esperar, esperar a su familia, a que llegaran por él.
Quería confiar en ellos. O más bien, confiaba en ellos. Sabía que su familia haría todo lo posible por rescatarlo. Pero las circunstancias eran las que lo hacían dudar. ¿Cómo iban a dar con él? ¿Podrían vencer a Pan? Cada vez eran menos las esperanzas que tenía de ser rescatado. Tal vez jamás lo encontrarían, quizás al final él también era un niño perdido.
Un niño perdido.
-Henry-el chico sintió una ligera punzada en su costado. Volteó a ver quién lo llamaba y se encontró a Devían mirándolo fríamente.
-¿Qué necesitas Devian?-preguntó Henry sin ánimos, en estos momentos quería permanecer solo.
-Tengo un mensaje para ti-le dijo el chico con voz monótona.
-No quiero escuchar nada de lo que Pan tenga que decir.
-Es de tu familia.
Al escuchar aquellas palabras, Henry se paralizó. Elevó la mirada con temor y confusión.
-¿M-mi mi familia?
-Sí, de ellos-respondió Devian sin cambiar su expresión frívola. Henry negó con la cabeza.
-No te creo nada...¡estás mintiendo!-gritó Henry parándose del tronco donde estaba sentado.
-No claro que no, Henry, toma-Devian intentóo entregarle la mitad de un espejo de bolsillo que Regina la había entregado. Henry reaccionó inmediatamente con enojo y tomó el espejo para después lanzarlo contra un árbol. El espejo cayó roto al suelo.
-No es gracioso. ¡No jueges con esas cosas! ¡Mi familia ya no va a venir!- gritó Henry enfurecido y al borde de las lágrimas llamando la atención de los demás en el campamento. Respiró tres veces con agitación y caminó hasta el otro lado del campamento, dándole la espalda a los demás chicos que lo observaban. Algunos de ellos comprendiendo por lo que el chico estaba pasando.
(...)
-¡Maldición!-exclamó Regina mientras sostenía el corazón de Devian en sus manos.
Emma suspiró derrotada. Su plan para contactar a Henry no había funcionado. Su hijo ya había perdido toda esperanza, con más razón debían apurarse y encontrarlo. Campanita las observaba con un poco de pena, ella no era madre, pero podía imaginarse la deseperación de una cuando su hijo le era arrebatado, y más por alguien como Peter Pan. Cualquier plan que tuviera para Henry no era bueno...nada bueno.
-Campanita, llévanos hasta el campamento. Ya viste, Henry nos necesita ahora-le exigió Regina al hada, quién la miró sorpendida por su tono demandante.
-No podemos ir ahora, entiendo cómo se sienten, pero no tenemos un plan-respondió ella con un poco de temor.
-Además faltan David y Garfio-agregó Blancanieves.
Regina bufó claramente molesta. Estaba enojada, y se sentía imponente. Jamás en la vida le había sucedido algo así. Siempre, como la reina malvada, había conseguido lo que quería. Pero Pan, no solamente se lo había arrebatado, sino que jugaba con ella y le impedía recuperar a Henry.
Emma caminaba de un lado a otro, desesperada y pensativa. Tenía que pensar en algo rápido. Algún plan que pudiera demostrarle mínimo a Henry que ellos estaban ahí de verdad, que habían ido a rescatarlo.
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Destiny
FanfictionEl tiempo se agota... Melania está muriendo y con ella su esperanza. Ella sabe que no hay forma de que pueda salvarse, sin embargo, Pan tiene la forma de salvar a su reina. Pero él no puede decírselo, pues conoce a Melania y sabe que ella se negaría...