Capítulo 17

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Era de noche y los niños perdidos se encontraban durmiendo. Después de aquella danza habían terminado muy cansados, de modo que cuando la música dejó de sonar uno por uno se marchó para descansar en sus respectivas cabañas.

Karan observaba el techo sin poder dormir. Toda esa euforia que había sentido durante la fogata se había marchado, detestaba aquella sensación. Cuando escuchaba la música se sentía tan vivo, feliz, sin nada que le importara o le preocupara. Sin embargo, cuando la música se detenía todo aquello se esfumaba, dejándolo sólo con aquellos pensamientos que venían atormetándolo por un tiempo.

Se levantó de la cama y salió de su cabaña en silencio, con sumo cuidado para no despertar a sus compañeros que sí podían disfrutar del descanso que les otorgaba el sueño. La fogata estaba apagada y el campamento parecía desierto con aquel silencio, pero para su sorpresa no era el único despierto a esas horas.

Caminó y se sentó al lado de Pan sin decir palabra alguna. El líder del lugar lo miró de reojó pero no se quejó ni dijo nada acerca de estar despierto a esas horas. Aquello logró desconcertar un poco a Karan, ya que estaba acostumbrado a escuchar los regaños de Pan cuando alguien rompía las reglas o simplemente no hacía lo que debía hacer.

En toda su estadía en Nunca Jamás, el chico no había presenciado aquella faceta de su lider en ningún momento. Pan se veía agotado, preocupado y decaído. No había rastro de su actitud altanera, imponente y amenazante. Solo había un joven en su lugar, que al igual que él no podía dormir debido a la situación de Melania.

-No ha regresado-soltó Pan en voz baja.

-Quizás necesita un tiempo a solas...es demasiado para ella, aparentar con los niños perdidos y luego tener que lidiar con nosotros sobreprotegiéndola, un respiro no está mal-respondió Karan de la misma manera. Pan asintió y después de ello hubo un largo silencio entre ambos.

A diferencia de Karan, Peter sabía en realidad dónde estaba Melania. Ella ya sabía lo que él iba a hacer.

-Me va a odiar por lo que voy a hacer...pero es la única forma-tomó aire intentando que su voz no se quebrara-No quiero que muera.

-No va a morir, no pode-no vamos a premitirlo-aseguró Karan tomandó su hombro y mirándolo con fuerza.

Karan sonrió para sus adentros-Después de todo, tú eres Peter Pan, y Peter Pan nunca falla.

Al escuchar aquellas palabras Pan finalmente se giró para verlo y con una sonrisa palmeó el hombro de Karan. Al menos iba a asegurarse de que Melania no odiara a su hermano, solo tenía que culparlo a él. Se levantó y señalo con la cabeza la cabaña del chico.

-Es mejor que vayas a descansar, mañana tenemos un día muy importante.

Sin más que decir, Pan se marchó dejándolo sólo nuevamente, pero después de aquella pequeña charla, Karan se sintió más tranquilo y al regresar a su cabaña, esta vez sí pudo dormir.

(...)

El plan en realidad era muy sencillo. Tan sencillo que, Emma no podía creer que en realidad funcionara sin importar las veces que Garfio le dijera que confiara en Melania. Pero Emma no estaba segura, Melania podía ser la reina de esa isla demoniáca, mas no parecía estar del todo bien, se veía muy cansada y cada vez la veía más pálida. Algo iba a terminar saliendo mal.

Melania era quien iba a hacer la mayor parte del trabajo, ellos solo se encargarían de tomar a Henry y a los niños perdidos, llevarlos al barco de Garfio y con ayuda de la sombra de Pan, saldrían de la Isla.

Claro, también estaba el hecho de que uno de sus tripulantes debía ser Pan. Cuando Melania había mencionado aquello, inmediatamente recibió quejas y negaciones por parte de todos en el campamento. ¿Cómo iban a llevarse con ellos al culpable del secuestro de Henry? Sin duda aquella petición era demasiado. Pero si en realidad ellos recuperaban a Henry gracias a Melania, tendrían que hacerlo, ese era el trato.

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