*Érika*
Después del día "productivo" de hoy, castigada y no estudiando mucho, decidí ir a la fiesta que organizaba Logan en su casa (como siempre). Sí, ya lo sé, Logan es un poco cretino y mujeriego, pero necesitaba desconectar de todo, sobretodo de Will. Y aquí estoy, en la fiesta con Andrea a las doce de la noche y bebiendo como si no hubiera un mañana. Me acuerdo de las fiestas a las que íbamos en mi otro instituto, por ejemplo, en una de ellas rompieron los cristales del salón de la casa de una de clase y los vecinos llamaron a la policía. Muchos de ellos pasaron la noche en los calabozos y al día siguiente sus padres fueron a por ellos no sin antes llevarse una buena bronca. Eso eran unas fiestas de locura.-¡Érika! Desconecta y pásatelo bien por una noche- me grita Andrea por encima del volumen de la música.
-Voy a por más bebida- le señalo el vaso.
Intento hacerme hueco entre toda la gente aglutinada en sesenta metros cuadrados hasta la cocina. La verdad que no me sorprende el estado en el que se encuentra: vasos de plástico tirados, botellas de alcohol por la encimera y por el suelo, bebidas tiradas... Cojo una botella de ron Barceló y otra de Coca-cola para hacer la mezcla.
La puerta principal se abre y llegan los chicos del equipo de Will con garrafones de cerveza pero, uno de ellos me resultaba muy familiar. Tiene el pelo negro como el carbón, más o menos de la misma altura que Will y moreno de piel, haciendo que resalten sus ojos azules. Me quedo parada observándole hasta que su mirada coincide con la mía, sonríe y camina hacia mí.
-Como cambias de estar sin arreglar recién levantada a encontrarte así de guapa vestida- se ríe- aunque sin ropa creo que estarías mejor.
-Y tú con un puñetazo en la cara estarías más guapo, asqueroso- le tiro la bebida por encima, cayendo esta sobre su cara y apelmazando su pelo.
-No creo que esa sea la forma adecuada de tratar a tu cuñado, ¿no crees?- se limpia un poco la cara.
-Ah sí, ya me acuerdo de ti- cruzo los brazos- eres el hermano de Will.
-Veo que eres lista y no solo una cara bonita- la bebida le pega la camisa azul claro que llevaba al cuerpo, mostrando sus perfecto abdominales- mi hermanito te ha dejado sola en esta fiesta, que feo de su parte.
-¿Por qué no te das una vuelta por la fiesta?- Anna me agarra del brazo y me pone detrás de ella- seguro que encuentras algo con lo que entretenerte- le sonríe falsamente.
James mira con asco a Anna y se va en dirección al jardín trasero.
-Hace mucho que no veo a una chica decirle eso a James Brown- se pone delante de mí- ¿estás bien?
-Sí tranquila- miro a mi alrededor.
-Si estás buscando a Will, no ha venido- coge una botella de una de las mesas y bebe un cuarto de la botella- ¡vamos a divertirnos que la noche es joven!- grita por encima de la música y toda la gente sigue el grito.
Busco a Andrea por la pista hasta que la encuentro bailando con Alan demasiado pegados el uno al otro. Toso un poco fuerte mientras me entra la risa, se separan pero Alan no le quita la mirada de encima.
-¿Te importa que te robe un momento a Andrea?- pregunto a Alan.
-Yo voy a saludar a unos amigos, luego nos vemos- sonríe.
-¿Y bien? ¿Qué pasa entre vosotros?- saco mi lado cotilla a la luz.
-Nada- aún estando en una fiesta, veo como se ruboriza- sólo estábamos bailando.
-Ya ya- Anna y yo nos miramos a la vez y reímos.
Cada minuto que pasaba, parecía que llegaba más y más gente. Son, más o menos, las tres de la mañana y he perdido la cuenta de las copas que llevo encima. Estoy en ese punto en el cual, por una parte, sé lo que pasa a mi alrededor, pero por otra, no controlo ni mi cuerpo ni mis actos.
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¿A quién tienes miedo?
Teen FictionÉrika tiene una vida normal de adolescente: estudios, fiestas... Pero todo cambiará cuando llegue William Brown, un chico de ojos verdes endemoniadamente sexy que moverá todos los pilares de la aburrida viva de Érika y es que... ¿Quién no se puede r...