Encuentro fortuito

Capitulo 7: Blaise

Cuando la guerra había acabado él se había mudado un tiempo a Italia, necesitaba respirar y alejarse del escenario de la masacre. Él nunca fue un mortifago, no tenia el brazo marcado y por lo tanto no fue juzgado, aun así se había quedado en Londres el tiempo suficiente como para estar presente en el juicio de los Malfoy.

No podía simplemente marcharse y dejar a Draco solo, no cuando él había sido y probablemente seria el único amigo real en su vida, diablos sonaba tan jodidamente Hufflepuff pero era la pura verdad.

Luego de que Draco y su familia se marcharan a Francia él paso un tiempo en Italia en un lugar tranquilo y lejos de todo, luego viajo un poco para despejarse y cuando decidió que era el momento de dejar de ser un ermitaño y contarle a su mejor amigo las grandes noticias viajo directamente a la mansión Malfoy en Paris.

Ese día se llevo una sorpresa inmensa. Fue un momento tan surrealista que por un segundo esperaba que Volemort entrara a la habitación bailando un tango con Dumbledore.

Pero por las barbas desgreñadas de Merlin que lo que vio no era algo de todos los días, incluso si sus hermosos ojos no lo hubieran visto lo pensaría imposible y contra todas las leyes del universo.

Draco Malfoy y Hermione Granger sentados muy juntos, bajo la sombra de un gran árbol del jardín, Draco con la espada recargada contra el tronco y ella sentada entre sus piernas recargándose en él leyendo el mismo libro, uno muggle por lo que la portada dejaba ver.

Parpadeo cuando sintió los ojos secos y se acerco lentamente a la pareja más improbable de la historia que sin embargo estaba frente a sus hermosos ojos. Vio los ojos grises de su amigo mirarlo para luego murmurar algo al oído de Granger, ella lo miro y le dedico una sonrisa tímida cuando no pudo contenerse más y grito.

"¡¿Granger?"

Escucho la risa de su amigo y por un segundo intento recordar la última vez que lo escucho reír así, tal vez en la navidad del primer año cuando Narsissa y Lucius le regalaron una nueva escoba y salio a volar al jardín…

"Si Blaise, es Hermione, pero en unos meses ya no será Granger sino Malfoy y lo sabrías si hubieras leído las malditas cartas que te mande… cada semana"

¡OH! Joder, ahora se sentía culpable por todos los pergaminos aun sellados que estaban en su mesa de noche en su mansión en Italia, vaya mierda de amigo que era con Draco, estaba por casarse y él ni enterado, pero esa rubia lo había mantenido demasiado distraído...

"Lo siento… soy una mierda de amigo…"

No era capaz de mirarlo a la cara, miraba fijamente sus finos zapatos, apenas los había comprado hacia una semana, probablemente lucirían mejor en marrón pero esa tonta dependienta no logro conseguirlos…

"Lo eres Blaise"

Demonios, hacia tiempo que no escuchaba a su amigo tan serio, probablemente estaba muy enojado, solo esperaba que lo perdonara…

"¡Draco no digas eso!"

"Hermione… es una mierda de amigo, casi me arrepiento de pedirle ser el padrino"

"Tiene razón Granger… soy un mal amigo no merezco ser el padrino… ¿Padrino? ¿Yo?"

"No Blaise le llamare a Nott o Goyle tal vez… ¡Claro que tu maldito idiota!"

Bueno al menos a pesar de ser una mierda de amigo aun era el padrino, jamás penso que llegaria el día en que su amigo se casara pero en fin si quería sentar cabeza él no estaba en posición de criticarlo pero si para organizar la mejor despedida de soltero que se hubiera hecho nunca…

"¿Cuándo es la boda?"

"Un mes"

"¡Joder la despedida de soltero! ¿Dónde conseguiré una buena desnudista? ¿El alcohol?"

Un miserable mes, solo tenia un mes para prepararlo todo, es que no sabían que las buenas, muy buenas desnudistas se contratan con anticipación… y un buen bar donde pasar el rato, tal vez vino de elfos o algunas bebidas muggles de esas que bebió la semana pasada cuando su rubia lo arrastro a un bar muggle.

"Ni lo pienses Zabini, nada de desnudistas o te juro que conocerás de cerca, muy de cerca mi varita"

"No la provoques Blaise, es la bruja mas brillante de nuestra época"

¿Sin desnudistas? ¡Granger estaba demente! No podía ser una despedida de soltero como Merlín manda sin chicas bailando semidesnudas para que el pobre idiota del novio viera que jamás podrá tocar a nadie mas que su esposa, y casándose con Granger si su amigo tocaba a otra bruja lo mas probable era que ella le hechizara las pelotas…

"Pero sin desnudista no es despedida de soltero Granger…"

"Zabini…"

Bueno él sabia cuando dejar de tentar a la suerte, ver a Granger sostener su varita era suficiente advertencia. Tendrían una simple y aburrida salida a un bar a beber hasta ver doble.

"Bien Granger como tu ordenes, No lo entiendo por que te casas con una bruja controladora como ella"

"Blaise… eres un idiota, es obvio, siempre eh tenido un lado masoquista"

Rió al ver la sonrisa de su amigo mientras Granger lo golpeaba en el muslo por el comentario, no Draco no era masoquista, solo un idiota enamorado.

"Draco, amigo, vaya manera de arruinarme el momento, yo que pensé que te sorprenderías cuando te dijera que voy a proponerle matrimonio a mi novia… y ahora me dices que te casas con Granger"

Lo pensó un poco, pero era mejor así, andarse con sutilezas no era su estilo, mejor soltar a bocajarro las noticias y ver como reaccionaban cuando les dijera el nombre de su hermosa, excéntrica y fantástica novia rubia con soñadores ojos azules.

"Blaise… ¿Te casas?"

Sonrío, una sonrisa amplia como un gato ante un plato de nata, saboreando sus palabras y esperando ansioso la reacción de su amigo y Granger.

"Si, me caso con Luna… Luna Lovegood"

¡Por las barbas de Merlín! Justo esa reacción esperaba, Draco con los ojos y la boca abiertos y Granger incrédula había dejado caer el libro al suelo mientras lo miraba como si estuviera loco. Pero si ellos estaban por casarse ¿Qué había de raro en que él se enamorara de Luna una tarde soleada en Italia mientras ella le explicaba que eran los duendecillos de Lux que había visto sobre su hombro?