-No te estás volviendo loca no?- la pregunta hizo sobresaltarme pero reconocí al instante de quién provenía la voz
-Demonios Enid, casi haces que me caiga del techo
-Quien diría que la asombrosa Sarah Waker se asustaría por una indefensa niña- Enid se burlaba de mí mientras ingresaba por la ventana al techo de mi casa, donde estaba recostada viendo las estrellas
-Sarah Waker?- pregunte algo confundida por el erróneo intento de su parte por adivinar mi apellido -seguí participando- intente ocultar mi risa mientras ella se acostaba a mi lado, al cabo de unos segundos mi curiosidad no aguantó más y la pregunta del millón salió a la luz-Qué sabes acerca de la gente nueva que entró? Deanna me pidió que la cuidara si algo malo pasaba, pero crees que son capaces de crear disturbios?
-No lo se, son muy cautelosos, siempre andan juntos, creo que es parte del no acostumbrarse, a nosotras nos llevó semanas lograrlo y siempre decís que a veces se te sigue haciendo raro, no confiaría en ellos en un instante, y menos de ese chico- la voz de Enid en la última frase cambió completamente como si algo malo respecto a él pasara
-Que chico? alguien te está molestando?- Mi instinto de hermana mayor salía al instante cuando ella me contaba cosas asi
-No me molesta, sabes que me puedo cuidar muy bien sola, pero me mira como si ya nos conocieramos, ayer me siguió hasta afuera, por suerte lo pude alejar, hice exactamente lo que me enseñaste
-Está bien pero tenes que cuidarte, verificar siempre que salis, y si pasa algo venís directamente a mi, de acuerdo?
-De acuerdo
-Ahora, anda a dormir que ya es tarde.
-Solo con la condición, de que mañana salgas conmigo, estar encerrada 3 días seguido sin ver la luz del sol no te va a hacer bien, no sos un vampiro- se rió por su referencia al igual que yo, y con eso, cerramos el trato.Después de que Enid se fuera, estaba por entrar cuando noto que a unas casas a mi izquierda se encuentra Deanna hablando con alguien, las luces de la casa son las únicas que siguen prendidas, entendí entonces que los forasteros no se encontraban tan lejos de mí, no pude distinguir bien la persona con quien hablaba la jefa pero estaba segura de que pronto los conocería. La mañana siguiente Enid estaba esperándome fuera de mi casa, apenas bajaba el último escalón cuando vi a Deanna correr gritando hacia la puerta, salí detrás de ella seguida por Enid, nos mantuvimos a una distancia prudente, por lo que se veía Aidan y eric estaban teniendo una discusión con los nuevos, quienes todavía no podía ver bien, uno de ellos derribó de un golpe a Aidan, simultáneamente otro se tiro encima de Eric, Deanna grito que se terminara la pelea pero nadie la escuchaba, me avalance sobre el que se tiró contra Eric para separarlo cuando uno de sus amigos llegó para ayudarme, una mujer amenazó a Aidan con volver a derribarlo si seguía la pelea, me reí por dentro y después el amigo del hombre al que yo estaba sosteniendo dijo su nombre para que se calmara, pero no solo provocó eso, si no que también logró que yo me apartara lentamente para ver con más claridad de quién se trataba, mi cuerpo trastabilló un poco para atrás al entenderlo, pero la discusión seguía y nadie me estaba prestando atención, entonces aterrada por lo que estaba pasando y sin entenderlo muy bien, me escape de la situación, para tranquilizarme detrás de una casa. Acaso esto estaba pasando? o quizás me estaba volviendo loca? debía estar volviendome loca, era imposible que Daryl, mi Daryl estuviese ahí, después de tantos meses buscandolo, no podía haber simplemente caído en mis manos, y los demás eran los demás? creo que vi a Glenn durante la discusión, fue él quien le pegó a Aidan? pero glenn nunca le pegó a nadie, sin duda era la voz de Rick la que produjo esas palabras, esa voz áspera con su tono particular, pronunciando ''Daryl'', estaba confundida, mi corazón acelerado y mi respiración entrecortada, intente calmarme al inhalar contando hasta 4, mantenerlo por 2, exhalar contando hasta 6, cuando él pasó por mitad de la calle a mi lado, me levanté despacio manteniendo mi mirada fija en las alas de su chaleco, apoyada contra la pared de la casa, respire hondo y dije su nombre, logrando que se de vuelta, tardó dos microsegundos en saber de donde lo llamaban pero reacciono igual que yo al verme, nos quedamos mirándonos desde lejos sin pensar que el otro fuese real o que estuviese ahí, mis ojos lo inspeccionaron de arriba a abajo, buscando fallas, buscando algo que me dijera que me negara lo que estaba pensando, él hacía lo mismo, pero era él, tenía el pelo más largo y estaba un poco sucio pero era mi Daryl, di un paso más cerca con mucha cautela y Daryl se sobresaltó, estaba desconfiando-Soy Sarah, por favor deci que te acordas de mi- lo segundo lo dije muy por lo bajo, más para mi que para él, pero de igual forma me lo contestó-Acordarme de vos? te estoy buscando desde que nos separamos en la prisión- dejó su ballesta a un lado y corrió a abrazarme, me pegue lo más que pude a su cuerpo mientras él me levantaba por los aires y daba dos vueltas para después hacerme aterrizar en la tierra de nuevo, las lágrimas de felicidad caían sobre mi cara y sabía que le estaba pasando lo mismo, de la emoción mis piernas cedieron y terminamos abrazados con él sentado en el piso y yo sentada arriba de él, solo se alejo unos cuantos centímetros para correrme el pelo de la cara y mirarme directamente a los ojos -Te extrañe demaciado mi amor- esas mágicas palabras se escuchaban perfectas bajo los efectos de su voz ronca-Yo también amor mío- respondí de la manera más dulce que pude, automáticamente nos fundimos en un beso largo, de eso en los que recuerdas que se sentía chocar tus labios con los de tu amante, de esos que son una declaración de amor jurada, un pacto, donde no solo prometiamos jamas volver a separarnos, sino también prometiamos siempre amarnos y cuidarnos -Amor, necesitás un baño- ambos reímos, debido a mi broma, y carajo, escucharlo reír era la octava maravilla del mundo.