Mi profesor (Tom Holland y tu) T.3

Vestidos y Trajes

-No me gusta- dije dándole vestido a Nikki.- no me queda bien, la cintura me queda extraña y el escote es chico- me quejé.

-______ es el cuarto vestido que te probas- me retó- te guste o no tenes que elegir uno- se cruzó de brazos.

-Nikki tiene razón ______- dijo mamá.

-Ahora se ponen de acuerdo- rodeé los ojos.

-Te guste o no tenes que usar un vestido- iba a hablar- y no, nada de trajes- levantó un dedo para hacerme callar.

-Ufa- me quejé.

-Ufa se fue, ahora- aplaudió- Nikki, podrías ir a buscar algún vestido?- ella asintió.

Hace dos semanas les dijimos a nuestros padres que nos íbamos a casar en 3 meses. Tom se encargaba de la luna de miel, y de sus cosas y yo del salón y mis cosas.

Pero pareciera que va a ser la boda de nuestras madres, que nuestra. Ya que, cada cosa que decíamos o hacíamos, ellas nos decían que no y se encargaban.

-Un vestido más. SOLAMENTE UNO- grité.

-Uno más y no jodemos más- sonrió satisfecha. Hasta ahora me probé, uno de sirena, una túnica, más que un vestido, un traje y ahora un vestido de color negro, el cual amé; pero como siempre ellas decían que no, y no entendía. Antes las mujeres se podían casar de negro.

-Encontré uno- canturreó Nikki y una señora atrás de ella venía sonriendo con un vestido, enorme.

-No voy a usar eso- las miré sorprendidas a las dos. Era un vestido tipo cenicienta color blanco, con cuello de corazón de mangas cortas, con encaje y cosas que claramente escuchaba en la tele, ya que, NO SE NADA DE VESTIDOS.

-No quiero escuchar nada de reproches, dale- gritó mamá, yo rodeé los ojos. La señora que llevaba el vestido me acompañó al probador sonriendo, falsamente, por que, con todo lo que dije antes no podría estar con cara de culo.

Ella me ayudó a ponérmelo con cuidado de no romper nada, yo era media bruta y con mi humor de mierda era capaz de romperlo, o dejarlo por ahí.

-Y?- dijo Nikki del otro lado.

-Ya salgo- dije con dificultad.

-Lista- dijo la señora- estas hermosa ______- sonrió.

-Gracias- hice una sonrisa forzada.- podemos salir?- ella asintió y me dejó pasar.

-Es hermoso- sonrieron las dos.- vení- mamá se acercó y me dio la mano para poder caminar. Me acercó al espejo. Maldición, tenían razón. Era hermoso, demasiado hermoso, para ser verdad.

-Es perfecto- dijo Nikki.

-Te gusta?- las dos me miraron esperanzadas, miré una vez más el vestido, y a ellas. Aunque me costaba aceptarlo, amaba éste vestido, era perfecto y me encantaba.

-Si, me gusta- las tres gritaron "por fin", yo las miré mal.- me puedo cambiar?- ellas asintieron.

Ojalá Tom la esté pasando mejor que yo.

Narra Tom:

-No me puedo mover- me di la vuelta con dificultad.

-Entonces necesitamos otro- dijo Sam.

-Pero si está bien- protestó Paddy. Hasta él estaba cansado de ésto.

-Todos necesitamos trajes- dijo papá, todos rodamos los ojos irritados.

-Pero estamos aburridos- dije.

-Yo no- sonrió Harrison.

-Nadie te preguntó moco- respondió Paddy. Harrison le golpeó el hombro.