Take me home

Devil

Wei Wuxian resopló, esperó unos momentos y volvió a moverse, primero su hombro derecho, luego el izquierdo, alternando las rodillas para luego caer pesadamente, con la respiración acelerada. Se estaba moviendo muy despacio, pero tenía la esperanza de que, cuando llegara a la roca más allá, pudiera ayudarse de ella para cortar las ataduras que ese maldito cambiaformas camaleón le había puesto.

Había sido de verdad idiota, tan empeñado en encontrar a Lan Wangji en medio del bosque que ni siquiera había notado al otro cambiaformas que lo seguía, si, muy, muy estúpido. No recordaba mucho después de eso, sin embargo, el despertar en una cueva, atado de pies y de manos, no era para nada una experiencia agradable.

Sin embargo, había tenido la buena suerte de que su secuestrador no se encontraba en esos momentos, por lo tanto, podía aprovechar para escapar. Así pues, no se rindió en sus esfuerzos por arrastrarse por el piso hasta llegar a la roca. Solo entonces pudo incorporarse y usar el borde de esta para cortar las ataduras de sus manos, todo un alivio dado que habían empezado a acalambrarse.

Una vez libre de todas sus ataduras, se apresuró a salir de la cueva, antes, había escuchado el rugido de un león y de un dragón. Solo conocía dos cambiaformas así, bueno, a uno solo lo había visto de pasada, sin embargo, el otro no solía dejar libre a su bestia, según lo que le dijo Lan Wangji, por lo tanto, algo importante debía de estar pasando.

Se echó entonces a correr, debía de volver cuanto antes.

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Xiao XingChen retrocedió, esa voz, ese aroma, era el camaleón.... Xue Yang.

-¿Me extrañaste dulzura?- preguntó el hombre con un escalofriante tono amable, casi dulce.

El jaguar no respondió, retrocedió un paso más, no había esperado encontrarse cara a cara con el origen de sus pesadillas. No sabía que hacer, su mente estaba en blanco, su cuerpo entero paralizado, ya ni siquiera era capaz de huir.

-Bueno, me alegra ver que no eres lo suficientemente estúpido como para intentar huir- comentó Xue Yang, acercándose un paso más -por fin te tengo donde te quería mi dulce Xiao XingChen-

El jaguar se estremeció al escuchar esas palabras -N-no ganarás nada- por fin pudo forzar unas palabras fuera de su garganta, en un vano intento de convencer a Xue Yang de dejarlo ir.

-Oh, al contrario cariño, estoy seguro de que ganaré mucho- contestó el hombre acercándose sin borrar la sonrisa de su rostro -lo que es más, ese pequeño truco tuyo de antes me lo ha confirmado- llevó su mano al rostro del jaguar en una sutil caricia que hizo a Xiao XingChen estremecer -vas a darme todo lo que quiero y mucho más- 

El jaguar se sintió aterrado con tan solo un toque así que se esforzó en hacer reaccionar su cuerpo, retrocediendo tan de golpe que cayó al suelo, eso solo provocó la risa de Xue Yang.

-Tan lindo, tierno e indefenso- murmuró el hombre con deleite mientras lamía sus labios con un toque de lascivia -voy a disfrutar jugar contigo nuevamente-

-Tu no harás nada de eso- 

Ante esas palabras el camaleón se sobresaltó un poco y se dio la vuelta, solo para encontrarse con cierto hombre al que ya había tenido el gusto de enfrentar. Se rió a carcajadas.

-Como si tu pudieras impedirlo, Lan Wangji- 

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Lan Sizhui se sobresaltó cuando A-Qing salió de la casa gritando por su padre, apenas tuvo tiempo para cambiar y acercarse a la chica, impidiendo que saliera corriendo hacia el bosque para buscar al jaguar blanco, no era seguro.