Capítulo 10

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Chanyeol estaba nervioso, no es que fuera un mal mentiroso, para nada pero el hecho de tener que engañar a Luhan mientras le hace pensar que al que engaña es a Sehun, bueno, eso enredaría a cualquiera. A pesar de eso lo logro, el omega no sospechaba nada, incluso parecía contento de engañar al otro Alfa...si tan sólo supiera.

- Tenemos que apresurarnos, el lugar dónde los venados habitan esta algo apartado pero el pueblo también así que andando- dijo Luhan. Chanyeol asintió queriendo decir que en realidad tenían mucho tiempo.

Luhan fue el que condujo al pueblo, Chanyeol había querido ser él quien manejara ya que le encantaba y hace tiempo que no lo hace pero el omega le dijo que si algo le pasaba a la amada camioneta de Sehun sería su culpa y no la del Alfa lo que evitaría que se le echará encima y pelearan. Llegaron al pueblo veinte minutos después y tardaron otros diez en encontrar la tienda. Era muy pequeña, por fuera se veía descuidada, las paredes estaban descarapeladas, la puerta rechinaba y el cartel que decía Sex Shop estaba a nada de caerse, por un momento pensaron que quizá no había sido la mejor idea pero cambiaron de opinión al entrar, todo estaba mucho más cuidado adentro, los estantes estaban limpios, las paredes bien pintadas y una amable señora que los atendió con la mejores de las actitudes.

- Bienvenidos, ¿Buscan algo en específico? – pregunto la señora con una sonrisa. Debía tener unos treinta o cuarenta años, tenía el cabello rojizo y rosado, hacía juego con las paredes. Luhan miro a Chanyeol en busca de ayuda, él en serio no sabía nada de aquello y el Alfa pudo notarlo.

- Necesitaremos lubricante, mucho, ¿Podría mostrarme las marcas?- la señora asintió entusiasmada, no debía tener muchos clientes y ver nuevas caras la hizo feliz.

- Por supuesto, sígame- respondió la mujer. El Alfa se giró a ver al omega que jugaba nervioso con sus dedos, aquel no era su elemento.-

- Yo me encargo del lubricante, tu puedes ir a los estantes y ver que te gusta, me uniré a ti cuando termine.

- ¿Cómo sabes de lubricantes?- el Alfa no respondió sólo le guiño el ojo y por algún motivo eso dijo más que mil palabras.

Luhan respiro hondo y se puso en marcha. Camino por los pequeños pasillos, para ser un lugar tan pequeño había una gran variedad de juguetes sexuales, desde esposas, dildos, hitachis, plugs anales, hasta cosas más masoquistas como látigos, máscaras, algunos disfraces, fustas y esa cosa que usaban para tapar sus bocas con una gran bola en medio. Curioseo un poco más tomando lo que le parecía interesante y algo básico, tomo, dejo, tomo, dejo hasta que al final estuvo de acuerdo en que llevar: Un dildo color azul, un vibrador con aspecto a un pene real, dos plugs anales uno de base de diamante y el un poco más pequeño de color beige, y un dildo largo que parecía salchicha incluso era del mismo color de una. Se acercó al Alfa cuando termino, Chanyeol sostenía en sus manos dos botellas grandes de lubricante, el omega pensó que quizá era demasiado pero prefirió no decir nada, Yeol era el experto ahí aunque bueno él no era exactamente una paloma virginal.

- ¿Listo, Lu?- preguntó Chanyeol, el omega asintió.

- Sí, creo que con esto bastara- respondió a la par que miraba los objetos en sus brazos. Debía decir que estaba muy sonrojado, lo había estado desde que llego, ir a ese lugar con Yeol no le molestaba en absoluto pero si se sentía bastante tímido, el saber que el Alfa sabía lo que él haría con esos objetos, era vergonzoso.

- Perfecto, vamos a pagar.

Luhan se sentía muy satisfecho con lo que había comprado, estaba seguro que había comprado lo correcto, nunca había usado ese tipo de juguetes pero había una primera vez para todo, sin embargo, otra parte de él se sentía asustado, hace años que no pasa su celo solo, si era sincero Sehun sabía lo que hacía, era simplemente mágico cuando lo tocaba, el modo como lo hacía era...Ufff. Ahora que sabía que ellos eran compañeros podía entender porque su cuerpo reaccionaba de esa manera cuando el otro lo tocaba y porque el pensamiento de tener a alguien más tocándolo le parecía poco atractivo, incluso repelente, era esa la razón por la que no quiso pedirle a Chanyeol que lo ayudara con su celo como una vez lo hizo con Sehun. Se sentía un idiota, su lobo le había mandado de miles de señales, prácticamente le gritó "Sehun es tu compañero" pero él fue un estúpido y simplemente no se dio cuenta, admitía que se sentía traicionado, engañado y utilizado, es decir, ellos habían tenido sexo una gran cantidad de veces ¿Cómo Sehun nunca tuvo la urgencia de marcarlo? ¿De morderlo? ¿Cómo? Era ilógico, o Sehun tenía una voluntad de hierro o no lo quería, pensar que era la segunda opción hacia que su corazón se hundiera y su lobo se pusiera inquieto. Suspiró con tristeza, quizá no era lo suficientemente bueno para Sehun y por eso había usado su esterilidad como excusa para no anudarse con él. Sacudió la cabeza para espantar esos pensamientos, no quería volver a llorar, menos frente a Chanyeol, no actuaría como un lobito dolido y abandonado, era mejor que eso y lo demostraría.

Malas Decisiones -HunHan-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora