Por un heredero

el juicio , pte II

"Vive, como si fueras a morir mañana. Aprende, como si fueras a vivir para siempre" . -Mahatma Gandhi

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Tomaron asiento en primera fila , la mujer ya estaba allí en un especie de corral con barrotes .
Lizzie vió de refilón que en uno de sus tobillos llevaba una gruesa cadena con un grillete y que la rodeaban tres celadoras.
Buscó mirarla para encontrar una respuesta en los ojos de la escoria , alguna mueca de expresión arrepentida, pero no , por lo poco que observó nada de eso sucedía sino que por el contrario , veía en ellos los de un ser peligroso .

Ella estaba irreconocible , su atuendo era gris y andrajoso , la custodiaba una mujer muy alta y corpulenta que hacían dos cuerpos en un solo físico , el cabello negro lo llevaba envuelto en una cofia negra y era tan seria como espectral , se le notaba el disgusto riguroso en el trato y mucha contrariedad hacia ella.
Como un segundero del reloj , se ecuchaban los golpes secos  , cuando pegaba con una fusta pequeña sobre una mano y , una gran argolla que traía en el cinto hacían sonar las llaves.
La mirada de fiereza de la mujer era como la de un cuervo vigilante a sus movimientos .

La reclusa , varias veces levantó la vista , vió con disgusto a los Darcy sentados muy juntos y era totalmente intolerable porque sus deseos finalmente habían sido abortados.
A las diez en punto se hizo silencio  ante la llegada de su señoría el presidente de la Junta Lord Clarke y otros dos hombres que le acompañaban .

Lizzie , pidió a Darcy por la niña y fue así que intercambiaron de brazos a sus bebés .

-¿mi amor estas nerviosa?—le preguntó preocupado .

-no ,no, no , estoy bien —le mintió...
El Conde Adams dialogaba con un hombre y su esposa lloraba a moco tendido como una Magdalena al ver a su hija en esas condiciones , la rea estaba inmutable , a veces tironeaba de manera agresiva ante su celosas custodias ...

-William, recuerda que van a decir cualquier cosa, no escuches , no hables, tampoco le des importancia , todo serán falsedades , yo sabré que decir cuando llegue el momento ...

Leyeron finalmente los cargos del Fiscal y era tiempo de escuchar a la acusada .

El juez, como buen tino e imparcialidad no perdía de vista ningún detalle , vió y estudió en primer lugar a la familia Darcy, no sólo por lo que representaban en imágen con sus dos hijos en los regazos , sino que también a los parientes directos y amigos ilustres  de alto rango que los
acompañaban esa mañana .
Llamaron a la acusada que casi fue empujada por la mujer robusta con mal trato.
Se sentó allí y fue interrogada primero por el representante de la víctima  , luego por su abogados, finalmente por la Fiscalía .

La mujer con descaro hacia el papel de una pobre víctima de una infamia , lloraba , reía después hablaba con cinismo y decía no recordar cuando recibía preguntas difíciles de responder.