Narra María
Una semana sin hablarnos. ¿Qué debo hacer? ¿Qué es lo correcto? Ya no le e contado nada a Lucas, mis amigas no me escuchan del todo, y la verdad no se que cosa sería mejor de hacer.
Me quedé sentada en mi lugar, leyendo un libro, mientras todos disfrutaban los 15 minutos de receso que teníamos en cada clase. Preferí quedarme leyendo, aunque bueno realmente leí poco pues estoy pensando en que hacer. ¿Y si mejor ya no hago nada? ¿Debería dejar que las cosas fluyeran por si solas?
Suspiré, deje el libro debajo de mi banca, para luego pararme e ir a enfrentar lo que no e parado de pensar.
—James... ¿Podemos hablar?
—Esto... Claro—noté en su voz algo de nervios
Caminamos por el pasillo para alejarnos un poco de los demás. Revisé mi reloj, nos faltaban 7 minutos para entrar a otra clase.
—No hablamos, y esto es raro, quisiera que las cosas volvieran a ser como antes, pero a la vez me dan unos grandes nervios, la verdad no se que hacer—lo miré a los ojos—perdón James
—No pasa nada, todo esta bien, yo también solo quisiera que todo volviera a estar igual, que habláramos como antes, olvida todo lo dicho ¿está bien?
Podía aceptar eso, pero tampoco quiero dañarlo sabiendo que es lo que siente por mi, espero deje pasar ese sentimiento para que no salga lastimado. Miré una de sus manos pues se notaba roja, la vi más detalladamente y vi distintas marcas en ella, pequeñas cicatrices ¿que le pasó?
—¿Qué te pasó en esa mano?
—¿Qué cosa? Yo no tengo nada..
—Si, mira—señalé su mano
—Yo no tengo nada en serio—dijo y se marchó.
Suspiré, ¿qué le pasó? ¿Qué hizo? Esas marcas no son tan usuales, y no parece que fue un accidente.
~~~
Faltaban dos clases, al parecer hoy era junta de los maestros, y estas 2 últimas horas nos pondrían una película. Camine al auditorio, cargando mi mochila. Me senté junto con mis amigas, pero a mi lado derecho había un asiento vacío. Siempre me sentaba con Lucas pero la verdad no se dónde estará en estos momentos. Observaba llegar a las personas, vi a James llegar, estaba solo y no sabía a dónde ir.
—¡James! Aquí hay un asiento... Digo por si quieres sentarte
El solo asintió dejó su mochila en el suelo para sentarse. El silencio era incómodo, nadie decía nada, saqué mis notas y una pluma para escribir un mensaje a Alexa, la cual estaba a mi lado.
Esto se está volviendo un poco incómodo, no se que hacer, vi que tenía unas marcas en su mano y no me quizo decir el porqué. Él sigue actuando extraño y yo la verdad quisiera que todo fuera comlo antes pero no se que hacer. ¡Ayuda!
Hice una pequeña flor y se la di a mi amiga, para que James no sospechara nada.
—¿Y qué cuentas? —traté de sacarle conversación
—No pues nada
—¿Crees que se tarden en poner la película?
-No lo se, solo se que ya me quiero ir—forzó una sonrisa
—¿Por qué? —pregunté extrañada.
Alexa tica mi hombro, por lo que volteo, me mira con compasión por la nota que le di, le hago una seña de que luego hablamos mejor.
—Es doloroso que alguien no te corresponda—abrí los ojos como platos
—James... Este... ¿Hoy llevamos mucha tarea?—traté de cambiar de tema
—No lo se, yo la verdad no quiero hacer nada, solo quiero llegar a casa y seguir encajandome la pluma para olvidar este gran dolor que siento de que no me correspondas—sus ojos se abrieron demasiado y se tapó la boca—No es cierto, no hagas caso a lo que acabo de decir—miró a otro lado, pero yo ya no podía dejar pasar eso
-Dime la verdad, mirame a los ojos
—No, olvida todo
—Solo dejame mirarte, por favor, quiero ayudarte
—Si, me encaje la pluma porque te amo y quiero que estés conmigo, pero eso es imposible.
Reino el silencio en el auditorio, la película comenzó y yo no sabía que hacer.
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Solo Dejame Mirarte
Teen Fiction-Solo dejame mirarte-le dijo la chica de forma desafiante -¿Por qué? -Necesito saber si dices la verdad Altibajos, inestabilidad pero un amor sincero pero con muchos obstáculos