VANAHEIM: El Sol no Siempre es un Buen Presagio

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La voz que habitaba mi cabeza era constante pero no molesta, sinceramente me ayudaba a sobrellevar la pena que existe en mi corazón, marcando el curso hacia la tierra Vanir, hogar de la difunta Freya, giré la llave, deslicé las torres de Vanaheim y me dirigí hacia allí con el Mjölnir en mis manos mirándolo como si fuese el cuerpo de él, no recuerdo mucho de eso porque la verdad es que lloré mucho y creo que me dormí, pero, da igual, al arribar en Vanaheim los árboles y lo verde predominaban ese estilo campestre tan bello que me trae múltiples recuerdos, buenos y malos, de mi infancia, de Padre y Madre, aunque sabiendo que Angrboda está viva he tenido mucha relación con Madre ni me sentí bien cuando me enteré de eso, me era indiferente para ser sincera pero no estamos para hablar de eso, continúe mi camino por los senderos de Vanaheim y los habitantes al parecer no conocían mi pasado me atendieron muy bien incluso me hice amiga uno Jern Pjivinic pero por qué era más fácil le decía J.P, él me recibió en su casa fue hospitalario y todo lo demás, admiraba a Freya, me hablaba maravillas de ella por otro lado le decía que ella me ayudó a llegar a la cámara de los reinos, en el templo de Tyr, él al oírlo se interesó de sobremanera algo muy extraño por ende comencé a actuar un poco más suspicaz que de costumbre pero no creo que lo tuviera notar, estuve ahí una semana o así y cuando me fui, bueno un poco antes le propuse si quería acompañarme puesto que vivía solo y me ayudaría bastante como guía mientras que a él le servirá para conocer a los grandes Vanir, él aceptó sin dudar la propuesta, empacó sus cosas en un modesto bolso hecho de tela de un color café rojizo, seguido de eso nos encaminamos hacia el centro de Vanaheim, la Gran Capital.

Entre los hermosos paisajes en lo que nos desplazamos no tenían desperdicio era un gran y armonioso ecosistema lleno de flora  y fauna única en los mundos, jabalís dorados, ciervos multicolores todo lo imaginable estaba ahí, pero, nuestra misión es encontrar a Njördr, el Vanir superior, explicarle lo que pasó y hacer las paces con los Vanir, sin embargo, al llegar a la entrada mi pequeño amiguito me detuvo preguntándome «Antes de entrar ¿Porque necesitar hacer las paces?» al oírlo me lo pensé, si decirlo o no, pero decidí que sí, graso error, le dije: "Porque Freya murió por mí culpa y yo mismo maté va Skadi, por eso" J.P comenzó a reír, su voz cambió, se hizo más alto y entre risas me dijo «Eso quería oír, lo admitiste, soy Freyr, Dios del Sol Naciente y ahora pagarás por asesinar a mi familia» se concentró recitando al parecer una súplica de perdón y de la nada apareció del cielo la summarbrander, la espada del verano, la cual peleaba sola ya era un problema, además que sí él no se rinde debo hacer lo que siempre hago y no quiero porque tendría que ir a matar a Njördr para evitar que me persiga en Asgard. Nos miramos fijamente, a quien primero fue lo consideré un amigo y ahora estamos aquí, la iniciativa fue por su parte su espada voló contra mí, me defendí exitosamente y no sé qué pasó por mí mente pero la lanza de Skadi se creó en mis manos, por ende, en ese mismo instante sentí más hostilidad por su parte, ahora se veía de verdad enojado mientras su espada se batía a duelo contra la lanza de escarcha que estaba usando tomé a Sköll cuando estuve lo suficientemente cerca con la fiereza que la caracteriza logró tocar al Vanir y está volvió a ser humana «Hola, Tanto tiempo, ¿no?, Vaya, Hola Freyr ¿Qué tal?... Espera ¿Están luchando? » refunfuñando me dijo al oído « Él me agrada ¿Podrías no matarlo?» le dije que si no era necesario no lo haría, ella entretuvo a la summarbrander mientras Freyr y yo luchábamos mano a mano, bueno ni tan mano a mano más bien eran puños y hechizos comencé con un gancho izquierdo que conecté pero el me dio un golpe seco en las costillas cayendo al piso lo vi preparando un conjuro así que me adelante, "Teiwaz, la Runa de la Guerra, Gebo, la Runa de la Generosidad, Eiwhaz, la Runa de la Defensa y Mannus, la Runa del Mundo, Triunfo del Defensor Cósmico" Haría se elevó junto al árbol donde lo deje, al estar  en una gran altura lanzó un rayo que dificultó los movimientos de Freyr similar al dragón de Niflheim pero no sirvió porque se libró fácilmente con un conjuro Vanir que no conocía «Te he seguido desde que Freya murió conozco todos tus trucos no podrás ganar» al mismo tiempo que hablaba me golpeaba cada vez con más fuerza no era como si me sintiese bien quizás tenía razón, pero, recordé que tenía el conocimiento de Mimir, nunca lo uso no me gusta me hace sentir rara, me las ingenie para conjurar un hechizo nuevo que me ayude está vez y luego de indagar mucho el conocimiento del Dios del Pozo me guío a la luz: "Nauthis, la Runa del Aprendizaje, Kano, la Runa del Conocimiento, Laguz, la Runa de la Muerte y Sowelu, la Runa del Sol, ahora "La Caída de Ícaro", Unas alas tomaron a Freyr y progresivamente lo acercaban al sol mientras estás se consumían con el calor emitido por el Sol, pero este no le hacía daño a Freyr porque el era el Dios del Sol Naciente pero la caída si lo hizo dejando un Freyr malherido pero vivo, Sköll de la impresión se le acercó, él en un momento de desesperación llevó a summarbrander al vientre de Sköll atravesándola, me sentí mal por Sköll por dos razones, primero ella no quería dañarlo y segundo tendré que romper mi promesa hacia ella, "Deja a mi sobrina desgraciado, Isa, la Runa del Hielo, Jera, la Runa de la Abundancia, Laguz, la Runa de la Muerte, Berkana, la Runa del Crecimiento, Inguz, la Runa de la Fertilidad, Ewhaz, la Runa del Paso ¡Me las vas a pagar! ¡LOTO DE LA MUERTE !", Y con un corazón lleno de odio ataqué al Vanir con toda mi furia, cuando me pierna alcanzó su cara, él se elevó, unas agujas de color escarlata rebanaron su cuerpo y luego se fue congelando con forma de una flor de loto, lo que me pareció extraño es que el hielo debería ser rojo, pero, luego de terminarse la flor se tornó negra y se consumió en el aire, como si de evaporación se tratara, quizás si influyen los  sentimientos en las runas, con la sangre que tenía Sköll en su cuerpo, la sangre Vanir, traje a Hati y este le salvó la vida por los pelos, pero ahora el mango de la guadaña tiene un minúsculo agujero como símbolo de que está malherida pero aún vive.

Por mi parte después de descansar y transportar el loto a un claro que había cerca, me despedí de Freyr diciéndole: "Por un momento, solo un momento, creí que podíamos ser grandes amigos" acto seguido puse a la summarbrander a los pies del loto mientras me alejaba rio arriba para entrar por la otra entrada a la ciudad, donde el único de los cuatro grandes Vanir vive sin saber más de lo que su hijo sabía y nunca me dio la oportunidad de decirle que a Freya no la maté yo, sino que lo hizo Baldr y yo podría decirse que he vengado su muerte asesinando al Æsir pero ya es tarde para disculparse, debo encontrar un lugar donde vean a Sköll antes de que empeore, después de todas esas preguntas hacia mí misma y conclusiones, todo eso, llegué a la entrada sur, puse mi primer pie dentro de su Capital y al parecer la lucha con Freyr no fue algo suave puesto que había un muchedumbre con picos y antorchas que me buscaba, al menos pasaba desapercibida o eso creo...

La viajera del Alba: A través de YggdrasilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora