MIDGARD: Comienzos Inciertos

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Hola, soy Leona, nací aquí en tierras escandinavas, sinceramente no sé porqué hablo conmigo misma, parezco una completa idiota, aunque me mantiene cuerda, bueno... Esta historia comienza en una tranquila casita, vivía con Padre y Madre, una vida tranquila, envidiable la verdad, una pequeña pero feliz familia, pero, vivía... Aquella tarde gris, donde todo mi mundo se desbarató, una delgada línea de felicidad la cual fue arrebatada vilmente de mi lado, al mismo tiempo que dejó una marca que hasta día de hoy perdura dentro de mí, lo recuerdo como si fuese ayer... Padre volvía de cazar junto con Madre, que lo traía sobre su hombro y Padre medio desvanecido aferraba el cuerno de la bestia que llevaba arrastrando, una gran animal, que le produjo aquel monstruo, un golpe seco en las costillas, venía sangrando, con los colmillos encajados en su costado izquierdo y con la poca fuerza que tenía logró zafar el canino de su cuerpo, por su parte Madre lo dejó en cama, y más rápido que un rayo, corrió en busca de hierbas curativas para tratar su herida... Cuando eso ocurrió yo tenía 6 años, Padre siempre estuvo con una gran sonrisa, hasta el momento de su deceso, era arrogante, creía que los dioses tenían envidia de él, yo al ser niña creí eso, aunque en teoría era cierto, con Madre afuera y yo siendo pequeña como para defenderme, sentí la puerta, le dije a Padre un poco más estable que antes, recuerdo sus palabras: "Ve, debes esconderte y no salgas por nada", asentí y corrí rápidamente debajo de mi cama al observar expectante a lo que sucede, al principio me llene de ilusión, Baldr, el Dios apareció ante Padre, parecía un buen augurio, parecía... Pero mis esperanzas se hicieron añicos al oír a la divinidad decir: «Gracias a ti, estoy así, por tu culpa, tú convenciste a Freya de hacerme esto, le provocaste miedo y por ¡TÚ CULPA, NO PUEDO SENTIR, NI MORIR, NI NADA! pero si te mato, Odín me devolverá todo lo que TÚ me arrebataste.» Como si fuera un maldito acto de magia barato, Madre entró un poco antes de que la deidad decidiera atacar a Padre,  ella se abalanzó contra Baldr y se escucho un estruendo, como si de un terremoto se tratase, nuestra casa comenzó a desplomarse, me golpeó en la cabeza... Me rompió la cabeza, me desmayé al cabo de unos minutos de los cuales no recuerdo nada, al parecer él no me encontró o sí lo hizo me perdonó la vida, en fin... Al cabo de una hora aproximadamente a juzgar por el sol y el gran agujero sobre el techo de la casa me ayudaba a determinarlo a pesar de mi corta edad, vi a Madre... Todavía recuerdo como la vi, en aquella esquina con la cabeza fuera de su cuerpo, específicamente en sus piernas, con sus manos puestas sobre ella y una sonrisa casi demoníaca marcada en su rostro como si disfrutase como terminó su vida y Padre, fue el más afectado, Baldr no lo mató solo lo dejó con las piernas rotas, y su herida abierta y desangrándose pero de una manera tan perfecta que logró que durara horas sufriendo, yo al levantarme lo ayudé, el me pidió su hacha de guerra y su casco de batalla, con los cuales consiguió muchas victorias, después de llevárselos me dijo con su último aliento: «Ahora son tuyos, busca tu verdadero camino pequeña, reparte justicia a todos los que la necesiten, se fuerte, nos veremos otra vez algún día en el Val halla te esperaré mi pequeña viajera del Alba» al siguiente instante él falleció, cerré sus ojos y me resigné a recaer a mis pensamientos...

Ahora 10 años después, viajo en busca de alguna pista para realizar el último deseo de Padre, desde que "el incidente" pasara, me crié sola, yo creo fue alguna especie de ayuda divina, porque no entiendo como alguien tan pequeña e indefensa puede sobrevivir a tales situaciones con tan poca experiencia... Pero de eso no vamos a hablar ahora, estoy en Oslo, una gran ciudad, en la cual dicen que hay todo tipo de traductores, brujos, y cosas místicas, cuando tuve la edad para comprender el mundo que me rodeada, revise con detenimiento la herencia de Padre, el hacha era majestuosa, bellísima, no tenía ningún grabado extraño, la apodé "Fenrir" y el casco poseía runas, que Madre me estaba antes "eso" aunque no alcanzó a enseñarme todo lo que debía, distinguí el nombre Jörmundgandr, supuse que tenía que ver con mi destino,  pero ¿Por qué la Serpiente del Mundo? ¿Qué tiene que ver? bueno al menos tengo un rumbo, no estoy como antes ahora sé que hacer, debería hablar con algún brujo o bruja, aunque mi odio hacia los Æsir es muy grande, pero sé que los Vanir, no están con ellos, rezarles a ellos, ¡NO! mi orgullo no me lo permite, mi promesa no me lo permite, pero si voy a ir a los templos a buscar indicios de algo...

Fui  a muchos templos, hasta llegar al de Freya, al entrar había una anciana un tanto peculiar, me hablo con una voz extremadamente grave, como si de un demonio se tratase, «Leona, ¿Eres tú?» me sorprendió que supiera mi nombre, no recuerdo llevar un gafete que diga mi nombre, la seguí asintiendo como respuesta, replicó la septuagenaria: «Te esperaba, tu Padre era Loptr, ¿Eres la Viajera del Alba?»... Al oírlo reaccioné de una manera demasiado exaltada, y le dije: ¿Cómo lo sabe? «Yo lo sé, desde hace mucho y sé  por qué Baldr fue a tu casa ese día» respondió... Las revelaciones me abruman, son muchas cosas que procesar, y exclamé: «Por favor dígame por qué»... «Con la condición de que debes cumplir tu rol en el fin de los dioses» advirtió... Espera que tengo que ver con el Ragnarok, solo soy una adolescente que tuvo que madurar mucho antes de lo normal, en fin necesito saberlo... Cumpliré mi labor, al segundo que terminé de hablar, la viejecita dijo con voz suave y calmada esta vez:«Te buscaba a ti, bajo la premisa de devolver sus sentidos, todos sabían, te apodaba Yavhé, la destructora de todos los dioses, no solo de este panteón sino de todos»... Vaya es demasiado fuerte, al parecer soy una destructora de Dioses, pero no creo la verdad, pero... Ellos asesinaron a mi familia... Comencé a llorar, ella secó mis lágrimas y me calmó: «Ten, sé de tu promesa de Justicia, si la realizas debes viajar por todos los reinos»... Me dio una llave, que debo usar para viajar... Justo después la anciana se despidió y se esfumó...

Volví a Oslo, sin saber donde estaba la entrada a el puente, recordé que mi casco decía "Jörmundgandr" podría buscarlo aunque creo que solo es un mito, realmente después del "incidente" no debería dudarlo... Vagué por Midgard hasta llegar al "Lago de los Nueve Reinos", al entrar vi una estatua de Tyr y unas runas que pude distinguir "Desarmado, Tu alma será pura para luchar" era un acertijo, puse a Fenrir en agua poco profunda por el miedo de perderlo... Pero funcionó el nivel del agua bajo de manera abismal, y salió el reptil, gigantesco, gracias a él, el templo de Tyr estaba bajo el lago, Jörmundgandr emergió y me habló en la lengua nórdica, que por desgracia no alcancé a aprender, le dije, como pude que necesitaba respuestas, pudo comprender mi problema y habló en una lengua que pude entender... Le leí el casco y replicó: «Tú eres la causante del final, mi propósito al fin se cumplirá» también me dijo que en el templo estaba la puerta a los mundos, pero tengo temor, ¿qué tal si fracaso?... La escritura de la puerta dice algo que no puede digerir, pero reaccioné al  leer Bifrost al final, recordé que así se llama el puente, yo tengo el poder de repartir justicia... Al fin, ¡Padre defenderé mi promesa! ... Mi destino detrás de esa puerta... El templo se abrió al usar la llave, mi misión, mi honor, mi destino... Aquí comenzará mi travesía...recorreré mi camino, salvaré a  todos de la tiranía de los Dioses...Yo, La Viajera del Alba.

La viajera del Alba: A través de YggdrasilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora