La propuesta. (Camren g¡p) [En edición]

Capítulo 13

El festín había acabado, ambas chicas estaban cansadas, la ojiverde tenia todo el rato en brazos a la pequeña morena, esta no la soltaba por nada, y a la ojiverde le encantaba, nunca se había sentido tan feliz, esa pequeña le roba unas cuantas sonrisas, la castaña ayudaba de vez en cuando a su madre, también por ratos cargaba a la pequeña morena, después de un gran rato, la pequeña durmió en brazos de la joven editora-empresaria, la castaña la tomo en sus brazos y la llevo a su habitación, la ojiverde la siguió, le ayudo abrir la puerta y entraron en el.

Es hermoso la habitación.- Comento la ojiverde acomodando las cosas del cama.

Si, lo es, ella misma hizo la decoración, me dio cada detalle.- La castaña acomodo a su joven hermana, la tapo, y miro a la ojiverde.- Ella es muy inteligente, siempre consigue lo que quiera, le gusta ser libre y pensar de forma correcta.

Eso es lo que veo, se parece a ti, pero ella es mas simpática y hermosa.- La castaña la miro por unos cuantos segundos, después dirigió su mirada a la pequeña hermana, y le dio un peque beso en la frete.

Gracias, pero créeme que nunca deberías hacerla enojar, hacerme enojar a mi, ella es muy complicada.- Comento, le abrió la puerta, esta también le dio en pequeño beso.- Descansa princesita.- La pequeña sonrió.- Lolo.- Susurro, la ojiverde sonrió, camino con la castaña, esta cerro levemente.

Le has agradado, nunca se apresuro a poner un apodo, el mio tardo casi un mes, y el tuyo lo compuso en unos cuantos segundos.- Comento con una sonrisa y caminaron hacia la abuela.

Supongo, que debo sentirme especial.- Comento con una sonrisa también.

Claro que si, ella nunca suele encariñarse con alguien, nunca se haba liberado tanto contigo.- Pararon el paso y ambas chicas llamaron la atención de la mujer.- Es momento de descansar abuela, creo que debo irme a mi cuarto, llevare a mi prometida a otro cuarto.

La abuela la detuvo.- No, claro que no, ven aquí, camina, vamos Lauren.

Ambas chicas se miraron y caminaron, tras la abuela, la madre de la castaña se unió a ellas, caminaron por un pasillo donde había varios cuartos, una tenia la iniciales S & A , en otro M. C., en otro C. C., y una habitación que no tenia ninguna inicial, pero decía prohibido el paso, y en letras pequeña decía, solo gente importante, la ojiverde miro a la castaña, pero esta solo veía a su abuela, y hacia donde se dirigió.

LLegaron a un hermoso cuarto, la cama era matrimonial, tenia una decoración hermosa, tenia un estilo antiguo pero hermoso, la ojiverde miro el cuarto a detalle, tenia una vista increíble hacia el pequeño mar, podía observar todo en esa ventana.- Bueno, ¿que tal?, ¿que te parece?.- Pregunto la abuela, la castaña solo caminaba de un lado a otro.

Wow!, es hermosa la habitación, la cama se ve cómoda, y la decoración es encantadora, entonces ¿donde dormirá Camila?.- Miro a la madre y abuela de la joven.

Hay linda, no nos hacemos ilusiones de que no duerman en la misma cama, así es que.- Señalo la cama y sonrió.- Dormirán juntas.- Comento la madre.

La ojiverde miro a Camila y esta solo se acerco a su lado.- Que bien, nos acurrucamos mejor, ¿verdad mi vida?.- La castaña si alegría contesto.- Si, nos encanta hacer eso.

De un momento un bola de pelos, de colo blanco llego corriendo y ladrando a la ojiverde, esta se espado, e intento asustarlo con las piernas.- Oh que horror, ¿que es eso?, ¿que es eso?, ¿¿que es?!.- La castaña se agacho y lo tomo entre sus manos.- Oh mi vida.- Comento.

Lobito, compórtate bien.- Comento la madre de la joven.- ¿De quien?.- Pregunto la castaña acariciándolo.- De Sof, lo siento Lauren, es que lo rescatamos de la calle, y lo están entrenando.

Era un hermoso Husky siberiano cachorro, con ojos de color azul, una azul fuerte como el mar, con una mancha gris alrededor de sus ojos, tenia una orejas hermosas, puntiagudas.

Por favor no lo dejen afuera, que se las águilas se lo llevaran.- Comento la señora Mercedes con una voz seria.

No, no le hagas caso, la abuela solo miente.- Comento la castaña, mientras el pequeño Lobito le lameaba el mentón, y esta le acariciaba el lomo, la madre de la castaña camino hacia un hermoso armario de color café oscuro.- Por cierto aquí hay toallas, y de todo extra por si lo necesitan.- Abrió con cuidado el armario, el perro quiso brincar a brazos de la ojiverde y esta se asusto.

Y si les da frió esta noche usen esta.- La castaña la miro atenta.- Tiene poderes especiales.- Le entrego el cobertor a la castaña y la señora Mercedes tomo a Lobito, la ojiverde junto ambas manos.- Oh muy bien!, ¿cuales poderes especiales?.- La ojiverde tomo el cobertor para verificar la estura.- Es la fabrica de bebes.- La ojiverde la doblo por la mitad y se le entrego a la castaña nuevamente.- Muy bien, si ¡, entonces, ten mucho cuidado con esto.- La castaña lo tomo, y lo avento a la cama.- No lo pongas en la cama.- Comento la ojiverde en susurro, pero ya era tarde.

Bien sera mejor ir a dormir, fue un día largo y una linda velada.- Comento la señora Sinuhe, con una sonrisa picara.- Que duerman bien.- Se despidió.- Descanse.- Comentaron ambas jóvenes.

Descansen.- Comento en doble sentido la abuela, mientras caminaba hacia la puerta.-Que descanses abuela.- Despidió la castaña.- Buena noche.- Comento la ojiverde, caminando hacia la cama.- Descanse.- Volvió a su lugar tras escuchar a la abuela.- Gracias abuela, descansa, buena noche, que duermas bien.- Comentaron ambas, la abuela cerro la puerta.

La castaña tomo unos cobertores y los acomodo en el piso.- Dormiré a bajo, tu duerma en la cama si quieres, me cambiare aquí, tu cámbiate en el baño.

Bien.- La ojiverde tomo sus cosas y camino al baño y cerro la puerta.

La castaña había optado por un Jogger algodón cintura elástica de color gris, una polera de algodón de color blanco, se dejo el cabello suelto, se acomodo en la cama improvisada en el piso y se acostó.- Así que no has venido en un tiempo.- Pregunto la ojiverde desde el baño.- No he tenido muchas vacaciones, en estos cinco años.

Deja de quejarte.- Comento con sarcasmo la editora-empresaria, la castaña solo bufo.. Mmm, no mires si.

La castaña solo miraba el techo.- No lo haré.- Comento colocando sus manos en su abdomen.- ¿Tienes lo ojos cerrados?.- Pregunto de nuevo la ojiverde asomando su cabeza por la puerta.- No veo nada.- Respondió la castaña.- ¿Segura?.- Ataco la joven.- Muy segura.- Comento la joven acostada en el suelo.

La ojiverde se acomodo mejor y corrió hacia la cama, la castaña se lo la veía con una sonrisa, la ojiverde tomo el cobertor y se tapo.- ¿Esa es la pijama que decidiste traer Alaska?.- Pregunto la castaña.- Ah!, si , porque se suponía que debía estar en un hotel, y sola, ¿recuerdas?.- Pregunto con cierta ironía la ojiverde, esta solo lleva una pijama de top de tirantes y short, color negro.

¿Que tal si te duermes?.- Ataco la castaña.- Si.- Obedeció la ojiverde.- Gracias.- Agradeció Camila.

La ojiverde trato de acomodarse en aquella, cómoda cama, pero la luz del atardecer molestaba sus ojos, se coloco en medio de la cama, pero no funciono, coloco su cabeza en la cabecera, tampoco funciono, esta causando un molesto ruido.- Bien.- Tomo su cabello he hizo un nudo.- Creo que no dormiré bien, con el atardecer entrando así.- Comento, cruzándose de brazos.

La castaña, tomo un pequeño control remoto, he hizo que cerraran las cortinas, la ojiverde agradeció, después de eso el cuarto quedo en un silencio, pero no era incomodo, la castaña no podía cerrar los ojos, al igual que la joven pelinegra, ambas miraban al techo, la castaña giro a la derecha acomodándose un poco mejor, ambas cerraron los ojos y dejaron que el silencio y el cansancio los venciera, ambos cayeron en brazos de Morfeo.