Capítulo 22

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"En el bosque"

La ojiverde conducía la bici sin rumbo estaba molesta, confundida, jodida con sigo misma, no podía dejar de pensar en su hermosa asistente, cada árbol le recordaba a la morena, que locura, pero es que cuando te enamoras de una persona sin que tu no lo quieras te la imaginas en cosas que no tienen ni sentido, estaba perdiendo el control de su vida,  estaba perdiendo en el juego, estaba cegada por un tonto hecho.

¡Mierda!, para joder, para.- Le reclamo a la bici como si ella tuviera la culpa, se estrello contra un árbol.- Joder, porque a mi.- Golpeo a la bici.- No puede ser, solo... solo quería dar una vuelta, y ahora estoy perdida.- Reclamo molesta, tenia el cabello alborotado, recostó el rostro entre sus brazos, quería llorar, quiera gritar, quería desahogarse, el lugar quedo en un silencio.

Escucho tambores, no sabia de donde provenía, levanto el rostro y miro por todo el lugar, miro a su alrededor.- ¿Que es eso?, ¿que es eso?.- Pregunto asustada, miro hacia el frente, de donde creía que provenía aquel ruido, camino aun montada en la bici sigilosamente, diviso una fogata y una anciana con una vestimenta rara, llamado poncho vaquero, con una aguila en la parte trasera.

Mientras hacia movimientos y sonidos raros, Lauren dejo la bici en un árbol, camino con sigilo, pero las piedras eran muy resbalosas, su patino en una ellas, haciendo que sus pies resbalaran, se sujeto de un árbol, hacia mucho ruido, la abuela oraba a un dios, pero hablaba en otro idioma, la ojiverde frunció el ceño.

Deus, gratias ago tibi, quia felicitas filiae meae (Dios, gracias por la felicidad de mi hija) .- La ojiverde trato de entender.- Ven a mi Lauren Jauregui de New York.- La ojiverde se asusto y se sostuvo fuertemente del árbol, la anciana tenia sus brazos cruzados en su rostro.- ¿Lauren?.- Susurro la joven para si misma, aun tenia en ceño fruncido.

Soy yo la abuela Merd.- Retiro los brazos de su rostro.- ¡Oh!.- Contesto sonriente la joven y asombrada.- Ven, veo que eres curiosa.- Hizo señas con las manos.- Ven le daré gracias a la madre tierra y a dios.- Sonrió.- No, en realidad no soy tan curiosa, solo iré.- Hizo señas la manos

Mira todo esto.- Señalo el lugar con ambas manos.- La madre tierra y Dios nos proporciono todo esto, así como los unió a ti y Camila, para que puedan estar juntas y ser felices.- Lauren borro la sonrisa de su rostro y su mirada se trastorno triste.- Hay que dar gracias y rogar que sean abundantemente fértiles.- La ojiverde hizo una mueca.- Ven conmigo, hagamos un baile de celebración.- Quisiera agradecer desde aquí.- Señalo el lugar con una de sus manos, la otra aun se sostenía del árbol.

La abuela tomo un polvo especial y los aventó hacia el fuego.- Insisto.- El fuego aumento, asustando a la joven.- Si, creo que tiene razón iré hacia aya.- Señalo el lugar de la abuela, bajo con cuidado.- Sigue y aprende.- Comento la señora Mercedes estirando sus brazos y haciendo movimientos raros, mientras hablaba en otro idioma.- Vamos Lauren siente la música.- La ojiverde copiaba los movimientos.- Vamos Lauren siente el ritmo del tambor.

Ambas, cruzaron los brazos a la altura de roso.- Ahora tu.- ¿Yo que?.- Pregunto confundida.- Ahora tu canta.- ¿Canto que?.- Aun seguía de brazos cruzados.- Lo que se te ocurra, así se hace.

Pero no me se ninguna.- La abuela se acerco a ella.- Canta hacia a los arboles, usa las bocales, L, A, O, U, O, U.- La ojiverde siguió a la abuela.- Si, si, si.- La abuela se detuvo y la miro.- Al universo.- Camino al rededor de la fogata.- La venta, la venta, la pared, este baile me da sed, y a las piojosas.Mas fuerte.- Comento la abuela sonriendo.- LA VENTA, LA VENTANA, LA PARED, ESTE BAILE ME DA SED, Y A LAS PIOJOSAS.- Movía las manos de un lado  a otro, brincando en un pie y girando.

"En la casa de la castaña".

Vamos Kaki, quielo seguil jugando.- Hizo un hermoso puchero.- Mi vida, quiero seguir jugando contigo pero tengo un asunto que arreglar y voy a ir a la cuidad.- La pequeña estiro los brazos, la castaña la tomo.- ¿Entonces puedo il contigo?.- Unió sus pequeños dedos indice haciendo otro leve puchero, la castaña sonrió y dio un leve pico en la nariz de la pequeña.- Esta bien pero ve a cambiarte por algo mas cómodo, la chica bajo rápidamente de los brazos de la chica y corrió hacia su habitación.

Camila se sentó en el sofá, encendió la tv y miro cada canal, hasta que la detuvo en una de caricaturas.- ¿No crees que ya estas un poco grande para ver eso?.- Camila la miro e hizo un puchero.-Mamá, aun soy joven.- La madre sonrió y jalo su mejilla.- Lo has dicho, joven, pero no una niña.- La castaña repitió el acto de su madre.- En cada joven y adulto hay un niño dentro.

La madre de la joven solamente negó.- ¿A donde iras?.- Miro ahora la pantalla de la televisión.- Llevare a Lolo por su nuevo celular, y comprare algunas cosas.- La madre la joven la miro de nuevo.- Genial, yo también saldré con tu abuela, iremos de compras y un regalo para la pequeña Sofi.- La castaña la miro y alzo su ceja.- ¿Porque?.

Sofi a ganado el campeonato de arco la semana pasada.- La castaña sonrió y se tapo la boca con asombro.- Eso es genial, ¿porque no me dijeron nada?.- Ahora se cruzo de brazos y se hizo la indignada.- Bueno, ella creía que no valía la pena, pero yo creo que si y estoy segura de que esta feliz por ello.

Oh!, claro que hay que festejarlo, pero mejor yo le hago la sorpresa, quier pasar un tiempo con mi hermosa y pequeña herma.- La madre de la joven asintió.- Bueno, pero nada de estarse mojando, ¿entendido?.- La castaña cruzo los dedos en la parte trasera.- Entendido.

Kaki ya estoy lista.- La pequeña llevaba un mayon negro, rasgado de las orillas de la pantorrilla, una polera blanca, unos adidas blancas como la joven, y una gorra rosa.

Pero mírate que hermosa.- Beso la mejilla de la pequeña.- Es que me quelia vel como tu, Kaki, asi de helmosa.- La castaña sonrió, y le hizo unas leves cosquillas en el estomago.- Cangurin, tu eres hermosa en todos los sentidos, cualquiera estaría a tu pies, pero ahorita te quiero para mi sola.- Comenzó a picar levemente su mejilla.- Si, ja ja ja, ya entendí Kaki.

Bueno vamonos, que es un día largo.- Ambas se despidieron de su madre, tomaron un saco y caminaron hacia donde creyeron que estaría la ojiverde.

La propuesta. (Camren g¡p) [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora