-Jamás la vendí
-Tu papá me dijo que la habías vuelto a comprar
-Él no lo sabe -Liam me miró y suspiró para después acercarse a mí y pasar su brazo por mis hombros -Tal vez tenía algún tipo de vínculo y no la pude vender. Sólo la renté y después les vendí algunos de los muebles que tenía, suponiendo que ese vínculo poco a poco iba a desaparecer si empezaba con eso, además de que a la familia les encantaba nuestro buen gusto
-¿Y luego?
-Bueno, eran una pareja, yo jamás tuve trato directo con ellos, siempre fue John y otra chica del equipo. La pareja quedó embarazada y se mudaron a un lugar más grande
-Y con algunos muebles nuevos
-Se lo propusieron a John y él habló conmigo, y pues, de inmediato acepté, así que en ese caso, creo que te debo una comisión
-No me debes nada -Lo miré y negué
-Los muebles también eran tuyos
-Realmente no y lo sabes bien
-Después podemos hablar de eso
-Liam, todo un hombre de negocios
-Tal vez ese pueda ser mi destino
-No lo creo -Recargaba mi cabeza cerca de su hombro -No abandones por lo que has trabajado tanto, sería una tontería
-¿Qué harás tú?
-Puedes contratarme -Reí al igual que Liam -Soy buena haciendo contratos, mi mamá me ha enseñado bastante bien
-Claro
-¿Por qué no? -Lo miré y no hubo respuesta sólo un gesto -Para mí no suena tan mal hacerlo por nuestra cuenta. Podemos conseguir las cosas nosotros
-Para mí sí suena como una locura
-Creo que es mejor dormir, te está haciendo daño estar despierta tan tarde
-No es tarde, sólo piensa que no debes de dejar le luchar por eso
-Siento que esas puertas se están cerrando, así que no quiero quedar como tonto
-Vamos a abrirlas, Liam
-No -Liam hizo un movimiento para levantarse del sillón y después tomar los platos de la mesa para llevarlos a la cocina
-¿Esa va a ser tu respuesta definitiva?
-Demasiado trabajo por hacer con sólo dos personas al mando
-Podemos reclutar gente
-Deja de hacer eso -Dijo a lo lejos
-Gerardo sabe de todas esas cosas de negocios, números, contratos, y...
-Ahora somos tres personas, suena fantástico
...........
Había despertado más temprano para poder trabajar en mi renuncia formal. Quería que fuera corta, precisa y sin tanto drama, simplemente diciendo la verdad de por qué ya no podía estar ahí
-Liam, tengo que ir a mi casa para bañarme y después ir a dejar la renuncia, si quieres puedo volver más al rato
-Te acompaño, sólo dame unos minutos para bañarme
-No importa, Liam. Voy yo sola, puedes dormir otro rato si quieres
-Dame 5 minutos, voy por mi ropa y me baño en tu casa -Abrió sus ojos lentamente -No me vayas a dejar aquí
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Secreto: El lado oscuro del amor (Liam Payne)
FanfictionTodo tiene un principio. Todo tiene un final