SILENCIO / HopeV

Felicidad

Recargado en la pared junto al gran espejo a su lado, abrazando sus piernas mientras apoya el mentón en sus rodillas... Esta vez, no dejando de sonreír porque él está bien. Mostrando esa sonrisa cuadrada tan brillante llena de felicidad, esa que adorna su rostro cada vez que lo ve a él, lleno de vida, feliz, disfrutando hacer lo que más ama.

Sus ojos no dejándolo de mirar con asombro, con admiración, a pesar de haberlo visto ya hace miles de veces por las tardes en aquel lugar que a cierta hora estaba solitario, sólo habitado por ambos.

Lo miraba como si fuera lo más hermoso que haya visto en su vida, una obra de arte que le provoca sentimientos, sensaciones agradables en todo su ser. No perdiéndose de algún detalle que a cualquier otro le puede pasar desapercibido, pero que él aprecia, adora, y ama demasiado.

El chico frente a él haciendo movimientos suaves esta vez, dejándose llevar por la música que a ambos les hacía sentir en un ambiente tranquilo, en paz, reconfortante. Olvidándose de todo ahí afuera.

La música paró, por la ventana podía percibirse que la noche se acercaba.

—Hobi, enserio —Habló divertido mientras se ponía de pie —No te cansas —Se dirigió al mayor, que se acostó en el suelo con respiración agitada en cuanto paró la música.

—No TaeHyung-ah, hazme el favor, mejor trae agua para tu Hyung —Sus ojos se cerraban, tratando de regular su respiración y sintiendo el corazón latirle con fuerza.

—Siéntate —Obedeció y bebió de la botella que le dio —¿Ya descansaste un poco aunque sea? —Habló sentándose frente a él.

—Sí Tae —Soltó una risita por lo bajo —No soy tan mayor que tú niño, ¿Me crees viejo o qué? —El menor se echó a reír.

—Eres un fósil —Recibió una mirada amenazante —Okey okey, no es cierto —Presionó sus labios para no reír —Sólo, creo que deberías tomar más descansos —El mayor le miró directamente a los ojos en silencio, al parecer analizando lo dicho.

Pero que al menor le hizo pensar y sentir cosas en especial que no debería.

—Está bien, sí, lo haré —Asintió varias veces.

—Genial —Sonrió nerviosamente poniéndose de pie actuando inquieto simulando buscar algo en su mochila, tratando de calmar esos latidos de su corazón sabiendo que le sería imposible controlarlos él mismo.

"¡Cálmate ya! ¡Tengo miedo de que pueda escucharte!"

—Oh

—¿Qué pasa Hyung?

—Está comenzando a llover —Se fue a su lado, mirando como las gotas comenzaban a escurrirse por el cristal de la ventana.

—Y está anocheciendo más...

—Oh vamos —Pasó un brazo por detrás de sus hombros acercándole —Ya vi tu cara de miedo y preocupación

El menor miraba al suelo, le tenía tan cerca que optó por no verle, no quería hacer una locura o perderse en él quedando como un bobo y exponiendo sus sentimientos. Nadie, mucho menos él debía saberlo.

—TaeTae ve lo divertido a esto —Sonrió buscando su mirada y al no conseguirlo miró a través de la ventana —Podremos mojarnos bajo la lluvia, jugar y llegar tarde a casa. Y no te preocupes porque la noche ya llega... Iremos juntos, después de todo somos vecinos —Soltó una risita haciendo sonreír al menor.

—El cielo se ve muy tenebroso... Mira esas nubes

—Espero que no vengan acompañadas de truenos, quiero disfrutar de esta lluvia en paz —Se quedó mirando hacia afuera... Sin darse cuenta de que su mejor amigo estaba perdido en él. No dejándolo de admirar.

—S-si... —Susurró.

—Si no te voy a caer —Habló de repente regresándolo a ver, y haciéndole reaccionar.

—¿Eh?

—Si esto viene acompañado de truenos, me vas a ver en tu habitación Kim

—¿Y qué hay del oso que te regalé? —Desconcertado y creyendo que bromeaba habló dejando al mayor apenado que bajó la mirada al instante —Se supone que deberías abrazarle...

—Es que... No puedo dormir luego, y él no tiene la capacidad de hacerme sentir tan tranquilo y en paz como tú TaeHyung-ah

Sentía que en ese momento se iba, se derretía por dentro al escucharle decir esas palabras. Y nervioso, tartamudeando, como pudo respondió.

—Puedes ir cuando quieras... No importa si no hay truenos, incluso si no está lloviendo Hyung... —El mayor le dedicó una hermosa sonrisa y le fue a abrazar tomándolo desprevenido.

"Incluso si llegas a sentir mi corazón latiendo fuertemente por ti, no te alejes por favor"

—¡Mi Dongsaeng es tan tierno y lindo! —Se separó de él presionando levemente sus mejillas con ambas manos.

"Basta, que me arden las mejillas ¡Qué calor!"

—¡Hyung! —Alejé sus manos y ya libre fui por mi mochila —Ya vámonos