One Shots

Remember Me

Saco la llave, sus manos temblaban, su respiración nerviosa lo llevo a ver al único que lo acompañaba esa noche.

La mirada llena de infinito susto le indico que no era el único.

- Es demasiado tarde - lo escucho decir - Tienes que prometerme que no me olvidaras - pidió con su voz rota.

Quiso decirle que no, que jamás lo olvidaría, que así pasara lo que tuviera que pasar su recuerdo permanecería latente en cada respiración que tuviera, pero simplemente su voz no salida.

- Recuerda ... que te amo - aquello lo tomo por sorpresa, estaba claro que sentía algo por él, es más, que, si tenía que darle un nombre a eso sin dudarlo podría compararlo con el amor, pero escucharlo de labios del castaño era algo que no daba crédito.

Ni siquiera tuvo tiempo de responder, no cuando fue arrastrado fuera del jeep aparcado frente el Instituto donde horas antes le llamo a él, específicamente a él porque no necesitaba, pero ahora lo tomaban en sus brazos y lo apartaban de su lado como un pequeño juguete.

- ¡Stiles! - grito al verlo salir y la puerta cerrarse de golpe, salió a toda velocidad de la camioneta y aproximarse a donde un par de hombre sin rostro cabalgaban caballos, ¿Qué demonios eran?

Lo vio forcejear, su mirada entro en pánico al ver como apuntaban con su arma al humano, este solo se detuvo, sus ojos avellana enfocándolo mientras sonreía.

- Recuerda que te amo - la pistola se acciono junto a una luz intensa que al desaparecer se llevó con ella todos a su alrededor dejando solo una intensa neblina.

Stiles había desaparecido.

[...]

Había pasado un mes, un terrible mes, uno en el que solo imágenes, pequeños fragmentos de un chico de piel clara y ojos peculiares llegaba a su cabeza tan frecuentemente que en sus sueños podía jurar que lo llamaba.

Acudió a Deaton luego del 5 día, pero nunca tuvo una respuesta certera, sabia de su nombre, Stiles era lo que escuchaba como un profundo grito, su voz llamándolo y el respondiéndole.

¿Pero cómo recordar algo que no viviste?

Incluso Scott trato de ayudarlo, pero nunca fue suficiente para saber a qué se referían esos sueños, al menos no hasta uno en especial llamo su atención.

El en el patio de su casa, entrenaban después de clase, estaban todos, pero justo en el fondo debajo de un árbol una silueta oscura estaba frente a Lydia, ¿Quién era y porque no lo había notado antes?

Quiso acercarse, pero algo lo retenía apartado, llamo a su alrededor, pero nadie lo escuchaba, lucho, pero no se defendía.

Saco a relucir sus ojos intensos azul y amplio su campo de visión, aun así, esa silueta no le parecía conocida.

"Siempre serás un lobo amargado"

Escucho a su lado, nadie se encontraba, de repente todos desaparecieron excepto aquella silueta.

"Aunque trates de negarlo te he salvado tu peludo trasero más veces de las que quieras aceptar"

¿Salvado?

"No hay nadie que me interesa más de lo que tú me importas, aunque sé que nada sucederá"

¿De qué se estaba perdiendo?

"No tengo miedo de decir estas palabras, contigo estoy a salvo"

Desesperado por saber de quien se trataba venció aquella inercia y como si lo hubieran abofeteado lo recordó.