-Chapitre onze-

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Se encontraban en la puerta principal del castillo y Diane sentía los nervios a flor de piel, ya con sus maletas hechas junto a su nueva amiga hada, y sus padres junto con su hermana mayor. Matrona ya estaba informada sobre lo que estaba ocurriendo y del porque su hermana se iba tan pronto, aunque al principio no lo aceptó, sus padres le insistieron de que era lo correcto, que tenía que hacerlo por proteger a alguien, a lo cual la fuerte mujer derramó algunas lágrimas porque iba a extrañar demasiado a Diane, la vida en el castillo no sería lo mismo sin ella.

Matrona se acercó por última vez a su hermana para decirle lo siguiente:

-Siempre serás mi hermana menor aunque estés lejos de casa, sentiré nostalgia cuando pase por tu cuarto y no lo encuentre con la luz encendida al saber que te la pasabas con un buen libro, o bailando como loca por tu habitación, esto lo sabía porque te escuchaba hacer bastante ruido a la ve que cantabas alegremente. Diane, cuídate mucho, espero algún día volver a verte, o procura visitarnos de vez n cuando, tampoco estaría mal-Matrona suelta una risita-Bueno, pues que te vaya bien en tu viaje, y que por fin se te haga ese sueño dorado por el que siempre has suspirado-La rubia le guiña un ojo provocando un pequeño rubor en la castaña.

-Hermana yo también te extrañaré demasiado, también extrañaré esos días cuando pasábamos juntas en tu alcoba o en la mía contándonos historias o, aún recuerdo, por tus intentos de que aprendiera alguna llave de las que sabes hacer-A Diane se le quiebra la voz tras decir esto último- Siempre estarás en mi memoria, así como ustedes, padres míos, los llevaré siempre aquí conmigo-La castaña se apunta asimismo con su dedo índice en el lado del corazón resaltando sus palabras-Los quiero mucho, a todos.

-Y nosotros a ti-Dicen sus padres y su hermana, para proceder a darle un último abrazo en conjunto, soltando algunas lágrimas.

Todo esto fue presenciado por Elaine, con ver esta escena ya hasta sentía ganas enormes de volver con su hermano y abrazarlo o de ver a Ban, ¡lo extrañaba tanto! Ya quería verlos a todos allá y también saber que pasó en su ausencia. El hada sabía, también, de antemano que su hermano no se iba a quedar de brazos cruzados y le exigiría una buena explicación del porque se ausentó, a tal grado de ir al pueblo humano. Valla sorpresa que se llevará al enterarse de lo que traerá consigo.

Momentos después se ve a la familia Megadozer finalizar su abrazo, y con lágrimas en los ojos, se despiden de las chicas deseándole buena suerte en su camino al Bosque del Rey Hada.

-¿Estas lista Diane?

Esta se limpia las lágrimas con el dorso de su mano y asiente.

-Más que nunca

-Muy bien, entonces vayamos-Ambas suben a una carroza, dejando todo el equipaje en la parte de atrás, y así se dirigen hacia su próximo destino.

Diane siente las emociones a flor de piel se siente un tanto nerviosa y es que no ssabe como será la reacción de aquel misterioso rey, no lo conoce de nada, aunque Elaine le dijo que era de buen corazón, aun no se fiaba del todo y con esto nuevas dudas surgían en su cabeza, tales como:

¿Y si no gusta de ella? ¿Y si no le gusta a ella? ¿Y si no puede hacer bien su trabajo? ¿Y si...?

Sus pensamientos fueron interrumpidos por un hada de cabellos cenizos.

-Diane, puedo leer tu corazón, sé que tienes muchas dudas e inseguridades con respecto a cómo se comportara mi hermano contigo, pero te prometo que no te hará nada y estoy cien por ciento segura de que lo dejarás maravillado, solo espera y verás, no es malo, solo que un poco inseguro si-Consuela Elaine, tratando de transmitirle con sus palabras que no pasará nada malo por allá.

Rey HadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora