Restart | #1 Niall Horan

27: segunda parte.

Las cosas se tornaron serias cuando llegamos al patio central.

El lugar era lo suficientemente amplio como para que toda la multitud que había estuvieran en formación; de un lado los soldados y del otro los que trabajaban con Monarquía.

Los chicos y yo nos movilizamos a nuestro lugar correspondiente, el lugar estaba lleno de murmullos que en un par de minutos cesaron cuando el líder de Monarquía hizo aparición. Se sitúo en una tarima mostrándose imponente, con la barbilla en alto observó todo su panorama y procedió a hablar.

—Hoy, cerca de las tres y cuatro de la madrugada, alguien logró colarse al área norte de las instituciones, las cuales están prohibidas el acceso determinadamente a cualquier persona que no sea un guardia, científico o mi persona —Kellius tomó un momento para serenarse cuando se da cuenta de que en cada palabra que pronuncia su voz va subiendo de tono. Pero el líder de Monarquía no estaba dispuesto a mostrar su enojo y frustración con lo sucedido, teniendo en cuenta que tiene cerca de unas doscientas personas frente a él—. Según el informe que me llegó minutos luego de lo ocurrido, nos dimos cuenta que la persona que se coló a esa área en específico, que contiene conocimientos de cosas importantes; es un soldado de Monarquía. Se desconoce la identidad y género de esa persona, pero cuando sepamos quién es él o la traidora sufrirá las consecuencias —sus palabras son fuertes y claras, mostrando que habla enserio—. Por eso, queda determinadamente prohibido que alguien salga de las instalaciones y que a partir de las siete de la noche alguien esté fuera de los dormitorios. Eso es todo, pueden retirarse.

Las personas comienzan a dispersarse una vez que Kellius abandona el lugar.

Dejó salir el aire contenido en un suspiro y veo a los chicos.

—¿Ahora qué haremos? —pregunto en un murmullo.

—No podemos hablar aquí —espeta Niall mirando a su alrededor—. Vamos a los dormitorios porque si seguimos aquí levantaremos sospechas.

—Tenemos a dos guardias observándonos —informa Rust—Larguémonos de aquí. Rápido.

Los tres emprendemos nuestro camino a los dormitorios. En el camino nadie habla ya que si algún oído indiscreto llega a escuchar estaríamos en graves problemas.

Mientras sigo a los chicos por detrás, noto que en cada lugar al que vamos hay cerca de cuatro guardias y casi en cada esquina del pasillo hay cámaras.

—Esto es grave —habla Rust cuando cierra con pestillo la puerta del dormitorio—. Ellos tarde o temprano darán contigo, Logan, y eso conllevará a nosotros.

—Tenemos que escapar.

—¿Qué? —gruñe Niall— ¿Escapar? ¿Cómo carajos escaparemos si este lugar está literalmente infestado de guardias buscándote, buscándonos? ¡Y todo por tu maldita curiosidad! —acusa— Tu fuiste quien dijo que los tres éramos un equipo, Logan. Y los malditos equipos hacen las cosas juntas, si tan solo... ¡Si tan solo hubieras acudido a nosotros antes de hacer esta mierda no nos estarían buscándonos ahora, Logan! ¡Eres una terca!

—¡¿Quieres callarte?! —estalló y no dudó en acercármele y encararlo— ¡Se que es mi culpa, lo admito! ¡Sé que la cague en grande, pero tú actúas como si no lo supiera, Niall! ¡Desde que te conozco siempre estas atacándome y ya me tienes harta! ¡Harta! —golpeo con mi dedo su pecho con fuerza— ¡Ya déjame en paz por un maldita vez!