Miro anonada a la chica frente a mi sin creerme que la tenga frente a frente. Todavía recuerdo cuando Anet me habló de ella hace algunos días, sobre algo que había descubierto antes de ser elegida.Pasó mi estado de desconcierto cuando escucho gritos y la voz de Iván hablar. Ella está frente a mí en posición de batalla y rápidamente copio su acción.
— Esta será una pelea limpia, señoritas —comienza a decir el pelirrojo—. Las reglas son nada de empujones, tirones de cabello, mordidas, hay que evitar los ladridos de Greger si queremos seguir con esto —guiña un ojo cómplice—. Muy bien, no hagamos a la multitud esperar, la primera en caer pierde. Tres, dos, uno... ¡Vamos!
Cierro mis puños y tomó la posición de guardia corta, que consiste en levantar mis brazos a la altura de mi rostro tapando mi pecho, cuello y boca a excepción de mi ojos, con las pierna izquierda recta hacia adelante y la derecha hacia atrás ligeramente flexionada tomando distancia entre ambas.
Me centré en la postura de la castaña ya que era igual a la mía y cuando lanzo el primer golpe que iba dirigido directo a mi abdomen, baje los brazos para esquivarlo, pero no fui suficientemente rápida para evitar el golpe que llegó a estrellarse en mi barbilla. El mundo me dio vueltas en ese instante, retrocedí unos cuantos pasos y sacudí la cabeza tratando de salir de mi aturdimiento. No podía ponerme voluble.
— ¡Vamos, Logan! ¡No te dejes vencer! ¡Yo te apoyo! —exclamó eufórico un Rust desde las gradas, quise sonreír a cuestas pero no tarde mucho en desviar la vista a mi contrincante.
La chica se avalanzo sobre mi, pude moverme rápidamente cuando nuevamente amenazo con golpearme en el rostro, detuve su otra mano dispuesta a hacer la que la otra no hizo y le atine a darle uno en su mejilla. Isis parpadeó, sacudió la cabeza y gruño, tome eso como una señal de que me iba a partirme a golpes.
El segundo golpe llego justamente en mi estomago que revolvió todas mis entrañas y me saco el aire, me queje por lo bajo y tomando una profunda respiración procedí a devolverle el golpe con más fuerza. Lancé uno que esquivo con facilidad, otro que lo detuvo pero el tercero no lo vio venir cuando mis nudillos hicieron contacto con su boca. Isis retrocedió, llevo el dorso de su mano a su boca y limpio el hilo de sangre que salía de ella.
— Eres una maldita perra —espectó mirándome de mala forma.
No estaba para insultos y ella tampoco cuando una oleada de golpes llegaron, esquive tantos como pude pero a pesar de mi esfuerzo más de uno llegó a tocarme. Mi cuerpo estaba caliente, sudado y lleno de adrenalina. Jamás en mi vida había peleado con una persona y a pesar de que era mi primera vez estaba haciéndolo bien.
Un puñetazo dio en mi estomago nuevamente, vaya que le gustaba darme ahí, seguido uno en mi rostro y otro el doble de fuerte que el anterior en mi boca, sentí el sabor metálico de la sangre en ella, mi ya mallugado cuerpo se balanceó hacia atrás torpemente pero antes de llegar a desplomarme en el suelo y verme como una perdedora, con la poca fuerza que me quedaba pude sostenerme de las cuerdas del ring. Escupí sangre y alce la vista para ver a Isis venir por mí con todo. Me agaché a tiempo esquivando el que iba hacer el golpe que me dejara inconsciente y tome como una perfecta oportunidad su desconcierto para estampar mi puño en su nariz que estoy un cien por ciento segura que se la rompí y con mi izquierda le lance uno en la barbilla, otro en el estómago y a pesar de que no sabía que esto iba contra las reglas me agaché velozmente y gire sobre mi eje dando con mi pierna las suyas provocando que perdiera el equilibrio y cayera de bruces al suelo.
Escuche la campanilla sonar dando por terminada la pelea, mire a la chica en el suelo maldiciendo y tomando entre sus dedos su nariz, sentí a alguien tomar mi mano y levantarla en alto para luego escuchar una oleada de gritos exclamando mi nombre. No soy capaz de ver bien ya que mi vista en borrosa, siento una capa de sudor de mi frente hacia mi cuello y mi respiración es un total desastre que respiro entre jadeos, mi cuerpo está adolorido en su mayoría y mis nudillo duelen horriblemente.
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Restart | #1 Niall Horan
FanfictionUn mundo sin vida humana es una soledad relajante para la tierra.