Por fin, después de esperar dos horas más, el director entro, nos dio nuestros teléfonos a Grey y a mí y dijo que podíamos marcharnos.
Mientras salía de la escuela iba revisando mi teléfono, Grey iba detrás de mí. Tenía diez llamadas perdidas de Alex, cinco de Daniel y dos de mis hermanos junto a unos mensajes. Los primeros eran de Alex.
*Ana, recuerda que pasare por ti a las dos. * 11:35 AM
*Ana, estoy afuera* 1:55 PM
*Ana, estas enojada conmigo, por alguna razón desconocida? * 2:30 PM
*Ana, ya se lo que ocurrió. Christian hiso que te castigaran lo lamento. Hablaremos mañana* 3:30 PM
Gracias al idiota de Christian, no pude hablar con Christian.
Después estaban los de mi hermano, Eric.
*Hermanita, lo siento, pero no podremos ir a buscar a Valeria. Bss Eric*
Dios, no puedo creerlo. ¿Que estarán haciendo mis hermanos? ya casi ni los veo.
-Te llevo. -dio Grey subiéndose a su auto.
-Ni lo sueñes, no iré a ningún lugar contigo. -dije mientras empezaba a caminar.
-Por favor, Anastasia no seas testaruda. Vas tarde a buscar a tu hermana, venga, sube.
A regañadientes, acepté y subí al auto junto a Grey sentándome en el asiento del copiloto.
-Grey, que están haciendo tú y mis hermanos? -pregunte.
Grey, a mi lado se tensó.
-De que estas hablando? Estoy aquí contigo. -explico.
-Dios, ¿porque tienes que ser tan borde? Hablo enserio, siempre están en fiestas y llegan tarde a casa.
-Creo que les corresponde a tus hermanos decírtelo. -dijo imitando las palabras que dije ayer.
Suspire con fastidio y espere a llegar a la guardería de Valeria.
En un silencio incomodo por fin llegamos, me baje del auto y entre a la guardaría.
-Valeria, llegaron por ti. -dijo una señora ya un poco mayor.
-Por fin. -dijo Valeria y corrió hasta a mi abrasándose a mi cintura.
-¿Por qué no llegaron antes? - pregunto con su vocecita infantil.
Sonreí y me agaché frente a ella. -Lo siento, peque. Te prometo que en casa te lo cuento, ¿vale? -le prometí mientras peinaba su cabello.
-Valeee. -alargo la palabra mientras sonreía.
Salimos de la guardería, y Christian estaba recostado en su auto, viendo su teléfono.
Se veía muy guapo así.
-Una foto te duraría mas. -dijo Grey encarnando una ceja hacia mí.
Me sonrojo. - ¿De qué hablas? -respondí desafiante.
-Ya sé que soy muy guapo. -dijo con una sonrisa arrogante. -Pero, ¿cómo está la princesita? -dijo mientras le daba un beso en la mejilla a Valeria.
-Bien, ¿por tu culpa Ana tardo en venir a buscarme? -pregunto Valeria.
-Sí, fue por mi culpa, pero no se lo digas a nadie, es un secreto. -dijo sonriendo.
-Bueno, vámonos ya. -dije subiendo a Valeria en la parte de atrás del auto y yo en el asiento del copiloto.
Cuando llegamos a casa, Valeria y yo nos despedimos de Christian y él se fue. Valeria y yo entramos a casa y como de costumbre no había nadie.
Mandé a Valeria a su habitación, para que se diera un baño y se pusiera su pijama y yo fui a hacer exactamente lo mismo. Cuando salí de la ducha y me cambie ya eran las seis de la tarde así que baje a hacer la cena.
-Anaaa. -grito Valeria mientras bajaba las escaleras corriendo. -Tu prometiste que me contarías porque tardaste. -dijo sentándose en la mesa.
-Bien, fue culpa de tu querido amigo Christian. -dije.
-Le gustas. -dijo emocionada dando brinquitos y aplaudiendo encantada de la vida.
-Por supuesto que no. -le respondí.
-Claro, que si tú eres muy guapa. -dijo sonriendo.
Yo sonreí enternecida. -Tu también eres muy, muy guapa. -dije mientras le hacía cosquillas.
Cuando Valeria y yo terminamos de comer, nos lavamos los dientes juntas y la acompañe es habitación hasta que se quedó dormida.
Luego yo también mefui a mi habitación, quedándome dormida apenas toqué la almohada.
Lunática
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Del Odio a El Amor (Grey Steele)
Fiksi PenggemarEsta es la historia de Anastasia y Christian de diferente manera son unos adolescentes de 15 años se conocen desde siempre, pero se odian. Esta historia les hará saber que del odio al amor solo hay un paso...