Su nombre es ashley una pelirroja, de ojos azules, delgada, ya con 20 años un dragón se situó en su pueblo y dejando un huevo esta decide cuidar de el por su cuenta y esto dará un giro para que pueda salir a una gran aventura
-Me presento señoritas, soy Irene Belserion, Gran maga del Consejo mágico del reino de Venore y la Reina de los Dragones.- Se presentaba amablemente la maga hacia Ashley y Dianna.
-Que... Que hace la belleza escarlata aquí?!- pregunta Edward, pero luego de eso al darse cuenta de su comentario se tapo la boca con miedo.
La mirada de Irene hacia él lo fulmino, Belleza escarlata era un apodo que nunca le gusto mucho pero no le dio importación al caballero y se enfoco en la aprendiz de maga por unos segundos.
-Elioth no esta en estos momentos, y yo solo vine de visita a colonia, a ver como se encontraba la cosa.- Dice seriamente al caballero, dejándolo mas nervioso de lo que ya estaba.
Para ser un hombre bastante fuerte y grande dentro de una armadura, Edward le temía demasiado a Irene por alguna razón aparente, al ver esto Ashley solo ríe por debajo inocentemente.
-De que te ríes niña?!- Irene dice mirando fijamente ha Ashley con un rostro de odio, por lo cual hace que AakDiin tiemble producto del miedo que emana la mujer.
-uuy, perdoname pequeñín, pero tenemos que poner de vez en cuando en su lugar a los humanos. diciendo esto Ashley y Dianna se quedan con algunas preguntas.
-Veo que eres un Dovah (Dragón) Fodiiz (Escarcha) y tu un Dovah de Yol (Fuego)- dice con total naturalidad, dejando a los tres amigos con muchas mas preguntas.
-Es una Brii (Belleza)- dice BahBruniik por reflejo.
El caballero y el dragón se quedaron mirando esperando su muerte por la estupidez que hacia dicho el dragón, esperando lo peor.
-No tienes que ser tan coqueto- dice esta con sensualidad al dragón y guiñándole un ojo, dejando estupefacto al dragón y con la boca abierta al jinete, mientras las dos amigas veían la escena.
La maga era muy amistosa con los dragones, pero era demasiado hostil con los humano, por otro lado podía hablar su lengua, algo que ningún humano había podido hacer en años y los que podían hacerlo terminaban de la peor manera que era... O se transformaban en un Dragonicus que era una especie de humanoide con alas y cola de dragón, en algunos casos incluso cuernos
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Y el peor de los casos se terminaban transformando en mismísimos dragones, con escamas y el tamaño colosal que algunos.
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