Capitulo 10

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Flash

Judy salió de la comisaría y fue al hospital en Plaza Sahara. Antes que nada debía ver cómo seguía Nick. Intentó usar una patrulla, pero al momento de subirse y tener las patas sobre el volante recordó el accidente con bastante detalle: los gritos, el sonido de los vidrios rompiéndose, el dolor… "Creo que no estoy lista" pensó, debería usar el transporte público por ahora. Justo cuando bajó de la patrulla su celular sonó, asustándola un poco, pero igual contestó.

—¡Judy!—era su padre—¡Hija, qué alegría! ¿Estás bien?

—¡Supimos las noticias!—continuó su madre, que se veía bastante preocupada—¿Qué pasó? ¿Cómo están tú y Nick? ¿Por qué no nos habías llamado?

Judy intentó procesar todo lo que sus padres le preguntaban, respiró hondo y se calmó, sentía que comenzaba a hiperventilar y eso no le gustaba.

—Yo… estoy bien, de verdad. Lamento no haberles llamado, han sido días de locos…

—¡Nos enteramos hoy en la mañana por el noticiero! ¡Judy Hopps! ¿Es cierto que estás saliendo con Nick?

¿Es enserio? El universo no podía odiarla más.

—Enserio, estoy ocupada y muy cansada.

—¿Sigues en el hospital?

—No, pero debo cuidarme.

—¡Hija, estamos bastante preocupados por ti!

—Papá, mamá, no me siento muy bien—les dijo con voz cansada—¿Puedo hablarles más tarde? Han sido días muy pesados.

—Supongo que tienes razón…

—Judy ¿Estás bien?

—Sí mamá. Pero debo descansar. Les marco en la noche ¿sí?

—Está bien hija, cuídate ¡Te amamos!

Judy colgó y respiró hondo. Sabía que debía darles explicaciones a sus padres, pero al menos ellos ya estaban tranquilos con saber que su hija seguía con vida. Tenía toda la tarde para pensar en qué decirles y cómo, pero por ahora había algo mucho más importante: ver a Nick.

Guardó el celular en su bolsillo y regresó a la comisaría, en su locker tenía un cambio de ropa. Consideró más oportuno llevar ropa de civil, pero se echó la placa al bolsillo, nunca estaba de más cargarla. Usó el transporte público hasta llegar al hospital, las enfermeras la saludaron amablemente mientras subía por el elevador hasta el piso tres. Conforme más se acercaba a la habitación 302 sentía que su corazón iba a salirse de su pecho. En toda su vida jamás se imaginó viviendo ese tipo de situaciones y le estaba costando mucho aceptarlo.

Entró despacio a la habitación, y se sorprendió de lo que encontró. En el sillón que estaba bajo la ventana una delgada figurita roja estaba echa un ovillo, todavía dormida. Era Rei, que se había quedado con su hermano toda la noche. Judy no tuvo corazón para despertarla, en vez de eso se acercó a Nick, le sujetó la pata y le susurró en su oreja.

—Tu hermana está aquí ¿Ves como si te quiere?

No hubo respuesta, lo cual causó un ligero dolor en el pecho de Judy. Por lo demás todo se veía en orden, Nick estaba igual de tranquilo que el día anterior, tanto, que daba la ilusión de que sólo dormía. Pero el ver su respirador y la intravenosa le hacían recordar que así no eran las cosas.

Someone To Leane OnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora