- Eso pregunto yo, Sasha no ha querido salir de la habitación, dice que no se siente bien, pero la conozco me miente, dime que paso por favor.- su voz se notaba angustiada, repase rápidamente lo sucedido anoche.
- Esther, por aquí no, voy para allá.
De un salto llegue a la ducha, tome las llaves y me dirigí a casa de ellas, al llegar la puerta estaba abierta Esther sentada en el sofá con las manos en la cara, puse mi mano en su espalda, miro rápidamente y luego me abrazo.
- ¿Todo bien? – Pregunte, negó y se levantó de golpe
- Salió, dijo que iba al parque, pero la vi un nervioso, su voz temblaba, ¿crees que haya recordado algo?
- No lo sé, la verdad lo dudo, soy lo último en sus recuerdos.
- ¿Qué paso anoche? – pregunto curiosa pero sin dejar de estar angustiada.
- Luego que todos se fueron ella me pregunto si tenia a alguien en mi vida, y le respondí que la había perdido, luego por impulso la bese, sé que fue lo más estúpido que pude haber hecho , pero lo siento no podía resistirme
- Oh, oh entiendo.- Las expresiones de Esther eran realmente auténticas, muy sorprendida y muy confundida, quizás ella sabía nuestro pero quizás no se acostumbraba al hecho , una vez vi que ella estaba en sintonía conmigo, pude preguntar.
- ¿a qué parque ha ido, al de aquí atrás?
- Supongo, era su favorito ¿no? , al parecer sabes más tú de ella que yo.
- No te preocupes linda, sabes que eso no es verdad. Regreso en un momento.
- Alex– dijo Esther antes de dar marcha a mi búsqueda.
- Solo tráela con bien.
Afirme y marcha rápidamente al parque, al llegar estaba desierto solo unas 3 parejas caminaban por él, recordé que alguna vez había hablado de un puente al que casi nadie iba y le gustaba la vista de ahí, sin dudarlo allí me dirigí, estaba sentada en el borde con la mirada perdida, me cerque con cuidado y me senté a su lado mirado contrario a donde ella estaba.
- Tu hermana me ha llamado, valla susto que le has dado.
Dije sonreído pero ella me ignoro por completo, me preguntaba si había notado mi presencia junto a ella, mire al piso luego de algunos segundos fallidos, suspire derrotado, su mano estaba sobre la mía.
- No fue mi intensión, solo quise salir un rato- sonreía como siempre, pero parecía única aquella sonrisa, igual correspondí.
- Sobre lo de anoche – dije bajando nuevamente la mirada
- No importa, fue un impulso- dijo mirando nuevamente al frente.
- No, no lo fue, sé que no debo decirte, y lo mejor es que me recuerdes, pero por favor soy yo Alex, dime que soy aunque oscuro y vago un recuerdo en tu mente, dímelo por favor.
Las lágrimas se acumulaban en mis ojos, mientras mis manos estaban apoyadas en sus hombros, ella negaba mientras derramaba una lágrima que termino muriendo en su chaqueta.
- Lo siento, pero sí puedo decirte que anoche que me besaste, sentí algo, no sabría decir que fue con exactitud, pero sentí algo aquí.
Llevo su mano a su corazón, desde mi vista vi que Esther se acercaba con un chico el cual no era conocida por mi zafe su mano de la mía y gire mi cuerpo a ellos, ella giro y sonrió.
- Oh jamás hubiera imaginado verte aquí – dijo ella.
- Escuche que habías tenido un accidente, jamás me hubiera perdonado si no te visitaba.
Ambos se dieron un abrazo luego de separarse un poco sus miradas se encontraron con un magnetismo mágico que me hacía mantenerse en esa posición, Esther se acercó a mí.
- Olvide decirte cuando llegaste.
- ¿Qué? – pregunte con una ira recién adquirida de aquello.
- Él es el antiguo novio de Sashi.
Esther se separó un poco y se unió a una conversación recién iniciada por ellos dejándome en un limbo de palabras no asimiladas, y haciendo que mi cabeza intentara explotar en busca de algún recuerdo de él, alguna mención, algún hecho que lo incluyera pero todo resulto imposible.
Sasha tomo su mano y ambos caminaron hacia la salida del parque ignorando por completo nuestra presencia, gire hacia Esther quien estaba con la mirada baja.
- ¿algo más que hallas olvidado decirme? – dije entre dientes, Esther negó.
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All Of Me
Roman pour AdolescentsElla tenía todo de mí El tenía Todo de mí... Y la vida tenía nuestras vidas en sus manos Sin embargo no basto para que el ángel de la muerte se enamorara de alguno de los dos....