Al llegar al centro comercial Yoongi encontró un buen lugar en el aparcamiento del lugar, y sin perder el tiempo, se adentraron al edificio de aquella planta. Habían muchas tiendas de distintas cosas que Jimin nunca había visto ya que él y su madre no se podían permitir ir juntos porque ella siempre estaba ocupada trabajando, y él, entendiendo la situación en la que se encontraban, nunca le pedió nada. Era un buen chico, sin embargo dentro de él siempre estaba esa esperanza de ir aunque sea una vez, sin importar el dinero ni el trabajo.
Empezaron entrando a la primera tienda de la derecha, donde en el escaparate se podía apreciar ropa de temporada. Habían muchas personas, en especial adolescentes, pero Jimin, a comparación de ellos parecía una bebé aprendiendo a caminar ya que su timidez ante una ola de gente de su misma edad lo ponía muy nervioso, y es que saludar por la calle era un acosa y caminar aprisionado entre ellos era diferente, pero entonces, sintió una mano cálida y directamente se giró a ver a esa persona.
—Papi, me asustaste... —dijo en voz baja.
—No te detengas por ahí, será malo si te pierdes. Ven por aquí y lo que te guste solo dímelo. —soltó su mano. —Las personas no te van a morder, no tengas miedo. —le dio un suave golpecito en la espalda como muestra de "estoy aquí".
Después de decir quello, Jimin sonrió desde atrás, mirando la majestuosa espaldar de su padre quien lucia un estilo tan impresionante que no pudo evitar volver a enlazar sus manos otra vez, después de todo, tener sus manos conectadas le hacía sentir tranquilidad.
Contigo a mi lado jamás tendría miedo de nada, papi. —Jimin.
Luego de varias tiendas visitadas entraron a una del hogar donde yoongi mandó a decorar la habitación de Jimin, quien se puso muy indeciso a la hora de escoger colores, y aún más nervioso al estar rodeado de dos chicas que no dejaban de hacerle miles de preguntas para saber sus preferencias. Amables, pero pesadas.
—¿Cómo entrarán en casa? —preguntó el menor al salir de la tienda.
—Llegarán mañana. —respondió. Le parecía que Jimin no se fiaba de ellos y eso le causó gracia, porque no sabia que si llegaban a robar lo más mínimo, las cámaras instaladas les harían pagar su propia vida, pero decidió no comentarle nada de eso, después de todo no venía al caso.
—Entonces, ¿hoy también podré dormir contigo? —preguntó emocionado el pequeño.
—No pienso dormir en le sofá. —siguió caminando y sin que Jimin lo viera, sonrió, después de todo, dormir con el menor fue extrañamente cómodo y cálido.
Siguieron caminando por los amplios pasillos del centro comercial hasta encontrar una tienda llena de juegos de todo tipo, no sin antes haber comido en uno de los restaurantes que incluían el centro comercial.
—Jimin, ¿quieres entrar ahí? —señaló la tienda.
—No papi, ya me has comprado muchas. —dijo mirando todas las bolsas llenas de ropa. —No lo necesito.
—¿Seguro? ¿No hay nada que quieras? —insistió, realmente tenía muchas ganas de que dijera que sí, pero entendía perfectamente que Jimin se sentiría incómodo, ese niño no tenía ni pizca de avaricia.
—Sí papi, estar contigo me divierte más que cualquier otra cosa. —sonrió haciendo desaparecer sus ojitos. Tierno...
—Está bien, entones sigamos. —ocupó su rostro mirando hacia otro lado, no era vergüenza, solo no estaba acostumbrado a ese tipo de comentarios o eso es lo que pensó.
Luego de un largo paseo, Yoongi llevó a Jimin a un lujoso restaurante occidental que quedaba a 15 minutos del lugar de donde estaban. De vez en cuando no estaba de más darse esos pequeños lujos, después de todo nunca tenía la oportunidad y la vida era demasiada corta como para desperdiciar lo que obtuvo a base de un gran esfuerzo para entrar en la empresa.
Todo era nuevo para el peligro, desde tener unas asombrosas vistas hacia las calles de la ciudad donde todo resplandecía con las hermosas luces que bañaban cada edificio al alcance de su vista, hasta estar con su padre en un magnifico restaurante donde los camareros era muy atentos en todo, disfrutando cada mirada, cada palabra, cada risa...
—Papi. —dijo con la voz un poco débil.
—¿Te sientes bien? ¿Cansado? —pregunto mientras veía como el menor se tapaba la boca al bostezar.
—Un poquito. —sonrió.
—¿Por qué sonríes? —dijo contagiándose de su hermosa sonrisa.
—Por que estar aquí contigo me hace muy feliz. —podría haber llorado, pero su sonrisa lo reemplazó en recuerdo a su madre quien esperaba que cuando tuviera un poco de tiempo libre, pudiera ver todo lo que a él se le podía permitir. Algún día, cuando fuera grande lo haría, llevaría a ella y a su Yoongi a disfrutar de la cálida compañía de todos.
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Espero que os haya gustado este capitulo, no olvidéis darle a la ★, os lo agradezco mucho!♥︎
🥀
keix_xni
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MY DADY* ≈ 【✦YoonMin✦】[MEJORADA]
Fanfiction-Te quiero papi. "Oh mierda, cállate. No digas eso o sino yo también te querré, de hecho te odio porque te amo." -Sí sí, pero no es papi, es Dady*, que te quede bien claro en la cabecita. ------------------ Min YoonGi es un ejecutivo de una famosa e...