{Capítulo 10}

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-hola a todos 😊 hoy les traigo esta actualización, espero les guste. Recuerden votar y comentar, gracias 😊

Sabah se encontraba en una habitación enorme

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Sabah se encontraba en una habitación enorme. Iluminada por la luz del sol. Mira el cielo estrellado con una tonalidad azul. El piso cubierto de nubes blancas, parece flotar. Avanza despacio en busca de alguien, pero parece que está sola en ese lugar.

-¿hola? -su delicada voz hizo eco en el recinto. No hubo respuesta inmediata. La adolescente sigue caminando hasta lo que parece ser una ventana.
-debes tener cuidado -dijo una voz alegre, para Sabah es una persona desconocida -. Te puedes caer al vacío.
-no entiendo de qué hablas -responde la joven. Busca con la mirada al dueño de la peculiar voz.
-parece que tu vida de mortal es buena -habla de nuevo el misterioso hombre. Su tono era pensativo.

La situación tenía muy confundida a Sabah. También se estaba sintiendo incomoda al no poder ver a la otra persona que le hablaba con tanta familiaridad.

-¿puedo saber quién eres? -inquiere la joven un poco asustada. Sintiendo como su corazón late con fuerza.
-eso no es importante ahora -responde la voz. Prosigue -: sé que no estas bien de salud, pero tu misión aun no termina, ni siquiera ha empezado.
»así lo haz decidido. Tienes que ir con ella, ustedes jamás se han separado desde la era del mito -concluye el hombre con solemnidad.

Sabah sigue sin entender lo que sucede. Le han surgido muchas preguntas y antes de que pueda decir algo, el lugar se llena de una espesa niebla. Ella siente frío.

-en su momento sabrás que sucede, pero la cuestión es: ¿a quién decidirás ayudar? Como mortal tus sentimientos te van a dividir.
»no temas, no vas a recordar nada. Sigue con lo tienes planeado.

La niebla se hizo más densa. Ocultando la luz del sol. El frío se sintió cada vez más. Su piel se crispa. Siente la necesidad de abrazarse a sí misma en busca de calor.

Mientras tanto, en aquella habitación de terapia intensiva, el cuerpo de Sabah se cubría de una tenue luz dorada. El aparato que indica su ritmo cardíaco muestra una aceleración. Eso llama la atención de la enfermera que hace guardia. Al llegar hasta donde la chica se encuentra todo es normal. El médico a cargo realiza varios estudios para verificar el estado de salud de la joven Schwarz. Los resultados arrojaron que ella estaba sana y completamente recuperada. Notificó la noticia a los familiares, que la recibieron con alegría y alivio.
Un par de días después fue dada de alta. Hades Schwarz llevo a su hija a casa. Su padre la ha mantenido en cama, temeroso de que su hija le suceda algo.
Un par de días antes de que Sabah ingrese a la escuela, Perséfone y Nuria llevan a la muchacha a comprar su uniforme y útiles escolares. En unos días asistirá a la escuela.
El día pasa ocupado entre varias tiendas, cuando tuvieron todo listo, Perséfone lleva Nuria y Sabah a comer en un lujoso restaurante. Son llevadas a la terraza. La mesera toma las ordenes respectivas. Mientras esperan hay un silencio incomodo entre ellas. Sabah observa distraída la decoración del lugar, conformada por una jardinera llena de rosas blancas. Otras mesas de madera. Grandes sombrillas que las protegen del sol.

-¿te iras pronto? -cuestiona Perséfone a Nuria. Le dedicó una fría mirada. Mientras acomoda su largo cabello rojo -, tengo entendido que tu trabajo es muy importante.
-en unos días -responde la mujer rubia. Acaricia la mano de su hija -, cuando Sabah esté mejor.
-ya estoy bien -interviene Sabah. Se encoje de hombros restando importancia al asunto -. Ya escucharon al doctor, estoy recuperada y muy sana.

Sabah sonríe. Se siente bien a pesar de haber estado casi muerta. No tiene ningún malestar ni secuela. Su recuperación fue completa, el médico la catálogo como milagrosa. Lo que sin duda tiene más tranquilos a los padres de Sabah. Aunque a Perséfone la idea le sigue pareciendo una mala idea que ella esté en su casa.
La mesera trae los platillos y se dispusieron a comer en silencio. Una vez que acabaron de comer, partieron a casa.
Alone pasa la tarde con Sabah. Thanatos observa a la distancia a los jóvenes mientras platican.
Días después, Sabah se presenta en la Academia acompañada de Hades, Nuria y Perséfone. Conversaron con la directora. Después de entregar el reglamento y poner el expediente de la chica en orden, Sabah es llevada al aula que le corresponde para que tome sus clases.
El aula 3B se encuentra ubicada en el segundo edificio, en la segunda planta. La puerta gris se encontraba cerrada. La mujer de cabello castaño, que vestía un traje elegante toca la puerta. El profesor abre; es un hombre de cincuenta y tantos, de cabello negro, con algunas canas. Cedió el paso al interior del aula donde imparte su clase. La directora presenta al grupo a la nueva compañera. Para Sabah fue una sorpresa, la mayoría de sus compañeros eran hombres. A excepción de dos mujeres y una de ellas es conocida de la recién llegada. La directora se retira y la clase continua.
A la hora del almuerzo Sasha se acerca a la banca de Sabah para platicar con ella, la acompaña su amiga rubia.

-hola -sonríe Sasha. Se sienta en la banca libre de a lado -, me alegra que te encuentres bien.
-hola -responde Sabah. Acomoda sus útiles sobre la mesa -. Gracias.
-te presento a mi amiga Yuzuriha -la chica de cabello rubio se acerca. Se posiciona a un lado de Sasha.
-mucho gusto -saluda Yuzuriha. Su semblante es inexpresivo y el tono de voz es frío.
-un placer -sonríe tímida Sabah. Observa con cuidado a la chica rubia.
-te mostramos la escuela, tenemos tiempo -dijo Sasha sonriente. Las tres adolescentes caminaron hacia la puerta.

Yuzuriha y Sasha le mostraron a Sabah las instalaciones que conforman el instinto. Pasaron por la plaza principal hasta llegar a la cafetería. Adentro se encontraban mesas de madera, rectangulares y sillas del mismo material. Las tres se formaron para comprar su almuerzo y después se fueron a una de las mesas del centro que se encuentra vacía. En la mesa del fondo junto a la ventana están los compañerosde ellas. La mayoría de alumnas que están en el lugar pasan el tiempo viéndolos. La situación pica la curiosidad de Sabah.

-¿te esta gustando el instituto? -inquiere Yuzuriha, observando a Sabah, quien desguta de su emparedado.
-sí -responde ella con una gran sonrisa -. Me gusta más que la antigua escuela a la que iba.
-pensé que era una buena escuela -interviene Sasha con cierta incredulidad -, tengo entendido que en Londres hay muy buenas escuelas.
-es verdad, pero aquí tengo amigas -admite Sabah con un poco de vergüenza -, allá ninguna de las chicas me hablaba.
-me alegra que te quedes con nosotras por un tiempo -dijo Yuzuriha más animosa.
-me da curiosidad saber porque en nuestra clase la mayoría de los compañeros son hombres -cuestiona Sabah con asombro, lo que ella sabía es que ese instinto era sólo para mujeres.
-fue idea mía -comenta Sasha -, los conozco y ellos no tenían la posibilidad de asistir a ninguna escuela, así que le dije a mi padre y el decidió apoyar la idea de darles una beca y así puedan estudiar.

Aquella declaración conmueve a Sabah; ella también quisiera ayudarles de alguna manera. Las tres chicas terminan su comida y se dirigen al patio. Siguen conversando mientras esperan el toque de la campana.

Saint Seiya-tlc: SabahDonde viven las historias. Descúbrelo ahora