weird things ♡MYG+KTH♡

Parte 10

TaeHyung se sentía un poco extraño aquel día.

La noche anterior había dormido en la cama de YoonGi junto a él. No había temor a ser descubiertos y se quedaron hasta tarde comiendo golosinas y viendo anime en el sofá de la sala. Cuando el peliazúl se quiso dar cuenta, YoonGi se había quedado dormido, apesar de que minutos antes se había entusiasmado con el maratón nocturno de InuYasha que se iba a emitir. TaeHyung lo cargó con cuidado hacia su cuarto y, cuando lo dejó sobre su cama, YoonGi se aferró a él como una garrapata y no tuvo más remedio que quedarse junto al niño. Sin embargo, TaeHyung no estaba molesto, hace mucho que no dormía tan comodamente y la sensación reconfortante de dormir junto a YoonGi era apremiante y reparadora.

Ahora lo llevaba a la escuela de la mano, como su madre solía hacer, y la sensación extraña de confort lo invadía nuevamente. TaeHyung no sabe qué es esta sensación, pero quiere que perdure. El estado de bendición que lo hace pensar que está soñando, la felicidad que está sintiendo por dentro y cómo las cosas más pequeñas hacen la vida más grandiosa. Quiere pensar que algo absurdamente maternal lo que está sintiendo, pero sabe que no lo es, porque si lo fuera, no estaría pensando en reencontrarse con YoonGi en el futuro y continuar atesorando más de estos mismos momentos en su compañía.

Por su parte, YoonGi siente que encontró en TaeHyung un lugar seguro en donde no hay ninguna lágrima. Y eso lo llena de una inexplicable felicidad también.

-Oye, vendré por ti a la salida ¿de acuerdo? -Se arrodilló para decirle al niño antes de marcharse.

YoonGi parpadeó varias veces, viendose adorablemente confundido para TaeHyung.

-¿Pero qué pasará con Meung? 

TaeHyung negó con una suave sonrisa.

-Buscaré otra manera de volver al futuro.

YoonGi sonrió aliviado, ya no tendría que hacer el rídiculo. El timbre sonó y salió corriendo a formarse.

TaeHyung vió a Meung saludar a YoonGi amistosamente en la entrada del colegio y dió media vuelta evitando verlos. No quería seguir desarrollando celos por esa niña; viajar al pasado, pasar por vagabundo y ahora ser una niñera ya era demasiado extraño.

Sin embargo, cuando volteó, un pequeño niño por poco choca contra él.

-Cuidado, amiguito -Le advirtió TaeHyung de forma juguetona.

El niño paró en seco y dirigió su vista hacia arriba. Y al ver el extravagante color azúl en la cabellera del joven, sus ojos se abrieron inmensamente.

-¡Tiene el cabello azúl, señor!

-¿Señor? -Preguntó fingiendo estar ofendido, pero entonces rió.

El niño pidió ver su cabello más de cerca y TaeHyung se arrodilló para estar a su alcance. Al peliazúl le encantaban los niños, y curiosamente este niño se parecía mucho a su hermanito menor, al cual extrañaba horrores, es por eso que piensa que se permitió tener contacto con él.

Sabe que no debería porque es imprudente para un viajero en el tiempo, pero sólo sería por esta vez, no creía que algo malo pasara. Hasta que los padres del niño llamaron a su pequeño para que los espere, y TaeHyung casi se cae de espaladas al encontrarse con sus jovenes padres.

-Ahí vienen papá y mamá -Indicó el niño al peliazúl que ahora se veía sumamente aterrado estudiando sus rasgos faciales.

Esa sonrisa de cajita, esos ojos amplios, esas grandes orejas... ¡Ese niño tenía que ser él en el pasado!

-L-lo siento, debo irme. -Dijo y se puso de pie alejandose a toda prisa de sí mismo.

TaeHyung comenzó a temblar. Está seguro de haber escuchado alguna vez que si se encontraba con su otro yo y tenía contacto con él mismo, podría explotar él o toda la galaxia. Se abrazó a sí mismo y agradeció a todos los cielos que no ocurriera nada, pero de todos modos iba a evitar volver a exponerse así de nuevo. No sabe cómo podría afectar en el futuro el haber tenido contacto con él mismo de pequeño.