Me desperté, me vestí y fui a la parada de autobús. Decidí no pensar mucho en el beso, yo se que Chris es sexy cuanto mujeriego, es el típico fuck-boy del cuál se enamoran todas y luego el les rompe el corazón y las trata como juguetes.
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Cuando bajé de l'autobus, en la puerta de entrada del colegio me estaba esperando Chris, ¿Ahora que hago? No podía escapar ya me había visto, entonces decidí seguir mi camino hasta la entrada.
-Hola, hermosa- me saludo y me sonrío, era muy lindo no lo podía negar.
-Hola- dije y decidí irme a clase pero el me detuvo
-¿Por qué me evitas? No respondes a mis mensajes y no aceptaste la invitación a la fiesta del sábado- me preguntó algo molesto
-Primero no te estoy evitando, segundo no pude responder a tus mensajes porque estoy un poco ocupada y tercero no pude ir a la fiesta del sábado porqué había llegado tarde a casa- respondí normal, tranquila como siempre
-¿Entonces si te pidiera salir conmigo, aceptarías?- preguntó con cara de cachorro, se veía tan lindo.
-No puedo, lo siento- respondí tratando de no ser grosera, no quiero ser más el juguete de nadie y no quiero sufrir más. -Es solo una cita- dijo Chris -entre amigos- añadió enfatizando su la última palabra. Por suerte llegó Eva, decidí no hablar más y el solo se fue con una sonrisa pícara y retadora.
Mandag
09:30 pm De poco había llegado a casa, decidí hacerme una ducha y ponerme mi cómodo y amado pijama. De pronto toca alguien a la puerta:
-¿Quien es?
-Hola Hermosa, me gustas... ¿lo sabes? Ahhh y soy Chris
Decidí abrir y me encontré con un Chris borracho, con una sonrisa pícara.
-¿Qué haces aquí Chris, y sobretodo porqué tomaste?
-¡Porqué tu no me quieres! Es por eso, ¡¿Feliz?!-
Estaba enfadado conmigo, pero como siempre no supe que hacer... hasta que el comenzó a acercarse y de pronto se apoyó a mi. Ohhh no se había quedado dormido.
