BAILANDO Y AMANDO

PERDIDO

MAGNUS:

Me encontraba en mi escuela dando los últimos toques al orden y limpieza del lugar y seleccionando la pista musical que se iba a bailar hoy y entonces alguien entró de golpe sin tocar, eso realmente me disgustó..pero me sentí un poco más relajado cuando ví que era Robert el que se había tomado tal atrevimiento..y casi que había olvidado la reunión que iba a tener hoy con él; entonces lo saludé de la manera mas cortés puesto que verlo después de tanto tiempo me alegraba en parte pues no hacía más que recordarme a mi padre y lo mucho que me apoyó cuando él murió...le debía mucho a Robert...sobre todo que fue él quien me ayudó con todo el trámite que tuve que hacer luego de su defunción....extendí mi mano para indicarle que ese era el lugar donde yo impartía mis clases y las cosas que utilizaba en ellas; como las mancuernas, los steps, las argollas y los postes.

En eso escuché que alguien más entraba y no pude evitar sentirme observado;  claramente pude advertir un par de ojos recorriéndome en su totalidad.

Nunca en mi corta vida pude sentirme tan escudriñado pero aun así me sentía cómodo puesto que tengo espejos y se lo lindo que siempre se ve mi reflejo....Sí.. ya sé... quizá soy muy vanidoso, pero sé lo que tengo y me siento muy seguro de mi mismo...

De repente, empecé a sentir cada vez más cerca esa vibración...esa mirada tan cálida y fue entonces que de la nada ya estaba frente a mí y me sorprendí tremendamente de su belleza, de su mirada de la forma como ésta conectaba con la mía..de ese color tan intenso, jamás vi unos ojos así..azules como el cielo tan brillantes como la luna, solo logré estar seguro de algo....estaba totalmente perdido...

Sabía que él estaba igual o peor que yo, Robert me contó que Alexander era tímido, introvertido y que nunca había sabido de que hubiera estado en alguna relación; pero el muchacho que estaba frente a mí no lo era...no claro que no ...no era nada tímido me desnudaba su mirada a tal punto que sentía mis mejillas reventar de lo rojas que estaban y noté que él las tenía un par de tonos más rojas que las mías...hasta me dio algo de gracia.

Acercó una mano hacia mí y se presentó...

_Mucho gusto..Soy Alexander Lightwood...para servirte en lo que quieras_

Si supieras que es lo que quiero ahora mismo...pensé
Y entre todos los pensamientos de mierda que llenaban mi cabeza en ese momento solo atiné a responder..

_Bueno, gracias, pero espero ser yo quien te pueda servir... ya sabes con las clases de baile...soy Magnus Bane_

Patético me decía a mi mismo...
Luego nos interrumpió su padre encargándome paciencia  con su hijo a lo que yo contesté..

_No te preocupes Robert, nos llevaremos bien...¿verdad Alexander?_

Y el respondió..

_Oh, pero por supuesto que sí_

Y allí terminó de sepultarme internamente, pues sonreía de una manera tan sofocante que me hacía temblar...Pensé inmediatamente que sería lo primero que le enseñaría y entonces su padre pronunció una frase que realmente logro desesperarme...

_Bueno hijo mío, entonces nos vamos_

Sentí desesperación quería retenerlo como sea; el no podía irse ...aún no...no estaba listo para eso quería conocerlo más ..claro sabía que tenía un mes más para hacerlo...pero yo quería que fuera hoy...y claro como siempre el gran Magnus Bane siempre se salía con la suya..entonces me adelanté a preguntar...

_¿Desde cuándo empezaremos? , Alexander_

Y el respondió..

_Por mí, desde ahora mismo_

Robert dijo entonces que su hijo le había pedido empezar el siguiente lunes y a mí solo se me ocurría que para eso faltaban 3 días...tres  malditos y largos días...pero mi sorpresa fue...

_Pero ¿por qué esperar? acaso no podemos empezar ahora mismo???!!!_

Y eso me sonó como ruego asi que yo contesté de manera apresurada tal vez un...

_Ohh... claro que sí ...Alexander.. depende de tí_

Era maravillosa la expresión con la que me miraba...una mezcla de ternura y malicia...tenía que tratar de guardar la compostura y dejar de hacerme notar claramente ilusionado con mi nuevo alumno o toda mi reputación se vendría literalmente al piso...