20 - La guerra de los paliacates

1K 113 144
                                    

La tensión se podía percibir en todo el lugar, todos se miraban con molestia y de manera retadora, de todas las personas ahí solo habían dos a los que no les importaba: Paula y Ray.
Ni siquiera Norman que se suponía era el más prudente estaba tranquilo.

- ¡Bien! Para la primera actividad necesito que formen parejas, ¡Rápido no tenemos todo el día! - indicó la mujer chasqueando sus dedos mientras los jóvenes atendían la indicación.

- Eh, Emma ¿Crees que pueda...? - sus palabras se interrumpieron por el habla de una fémina.
- Emma ya está apartada - se le escuchó hablar molesta.
- Sí Norman, lo siento ¿Por qué no vas con Ray? - el albino desvió su mirada tomando su propio brazo.
- No quiero ahora... - se alejó sin permitirle hablar a la azafranada.

El albino caminó en busca de alguna pareja, entonces las opciones comenzaron a ser escasas, de reojo logró ver que el azabache se estaba dirigiendo a los asientos para descansar, rápidamente corrió tanto como pudo hacía él tomando su mano.

- R- Ray, ¿Quisieras trabajar conmigo en esta clase? - el azabache negó con la cabeza pues entendía que el ojiazul realmente no quería estar con él, desconocía la razón pero respetaría su elección, soltó su mano del sutil agarre y se fue a sentar en los lugares previamente mencionados encontrándose ahí a una chica con una bandana verde militar, hubo un largo silencio.
- ¿También te dejaron fuera? - finalmente preguntó la mayor.
- Sí, ¿Qué hay de ti Paula? -
- También...- nuevamente hubo un silencio - ¿Sabes? Realmente... A veces he ido a la casa de Gillian, ella y Emma dicen que tú gustas de Norman - el azabache desvió su mirada ya bastante harto de que estuvieran propagando su secreto - tranquilo, esto no lo esparcen así de la nada, yo soy bastante callada - suspiró - Pero, sé que pensarás que lo que te diré no tiene nada que ver con una clase de deportes...-

El azabache se colocaba confundido ante lo que dijo la chica - Deberías de aprovechar e intentarlo ahora que Norman no gusta de nadie... - agachó su mirada - Pequeños detalles son lo que conquista los corazones de la mayoría... Debes ser rápido, estratega, y anotador, porque así es el amor, no puedes sentarte y esperar que llegué o alguien te ganará, todo debe ser con esfuerzo... Tú deberías empezar a intentar, por qué un día será demasiado tarde - la azabache miró con dolor a una pareja en la lejanía, se trataba de un chico rubio de ojos azules con un pequeño brote en la cabeza y una chica rubia de ojos verdes y un gorro rosa con parches y botones - Yo... Era como tú, creí que estaría bien esperar y actuar como siempre, siendo detallista pero de manera sutil esperando que lo notara... Anhelando que lo hiciera... Pero, él solo llegó, siendo un insensible, comenzó a coquetearle, regalarle cosas, ella comenzó a prestarle más atención a él, todo era "Nigel, Nigel" para ella, él me arrebato en dos meses los que yo logré en dos años, el mismo día que me declararía, ¡Aceptar que me gustaba una chica, fue terrible para mí y todo por mis padres!... Y él como si nada la alejó de mí. Ahora son novios, llevan casi un año ya... No puedo hacer nada - las saladas gotas caían de los grisáceos ojos de la joven que aún veía a ambos con un dolor peculiar en su pecho. - Sé que dirás, "¿Esto a mí qué?" Pero como dije, no quiero que mi historia se repita, sé que hay muchos sucesos como estos y no puedo resolver todos, pero si puedo apoyar en uno que estoy viendo delante de mis ojos... No debes callar tus sentimientos, así sientas que es pronto, dilo, dícelo, sigue tus instintos y no los planes de otros... ¿Preferirías decirlo pronto o no decirlo nunca? - dichas palabras parecieron significar mucho para el ojioscuro, este solamente asintió.

- Gracias Paula... - agradeció con sus ojos brillando levemente, Norman contemplaba la escena con celos, sí, él fue quien en un principio no quería trabajar con Ray porque no quería molestarlo, creyó que sería una carga considerando las diferencias de velocidad... Era algo absurdo y ahora lo veía pero, no podía evitar sentir celos de ver que alguien más hacía brillar sus bellos ojos noche... No, no entendía el porque de sus celos sí no le gusta... Todo era tan confuso.

Unión - Ray x Norman [HIATUS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora