Vacaciones en pareja.
Había logrado Hoseok, luego de meses de rogar conseguir que Hyungwon accediera a unas vacaciones. Ambos habían sacado sus vacaciones del trabajo por 1 mes, mirando varios países cercanos al final decidieron ir a Japón, habían mirado varias guías turísticas (que el menor había pedido de la empresa de sus padres) y el destino que más encajaba con ellos en esta época era Japón, con maletas más vacías que llenas para comprar cosas en el país Nipón, hotel y vuelos reservados partieron de su casa una mañana.Trataron de buscar asentamiento un poco más lejos de los grandes centros, así que optaron a irse de vacaciones a Osaka. La noche anterior durmieron poco por las ansias y al otro día tomaron el corto vuelo. Al llegar miraron la hora y faltaba un poco para la hora del check in del hotel entonces pasaron a desayunar a una cafetería cercana. Llegaron al hotel y era la mejor cosa que habían visto en su corta existencia, no era lujoso pero su imagen acogedora y moderna a la vez, llenaba hasta su última expectativa. El menor salto a la cama y no se quería mover del suave colchón, Hoseok se cambió de ropa y se acostó a su lado.
-¿Que quieres hacer?- Le dió una palmaditas en la espalda a Hyungwon.
-Dormir- Habló sin despegar su cara de la cama.
-¿Vinimos a Japón a dormir, bebé?- Hoseok se rió porque ya conocía su novio.
-Un ratito por favor- Se volteó y se aferró a uno de sus brazos- Solo hasta que salgamos a almorzar...- Hyungwon miró esperando que le respondiera algo pero al ver a Hoseok sonreír se dió cuenta que le había ganado, el mayor levantó sus hombros con un pequeño sonido aprobando la idea de su novio, se acostó a su lado y así ambos durmieron hasta pasadas las 2 de la tarde.
Ya con más energía salieron a caminar por las calles de Osaka, Hyungwon se sentía en el paraíso al ver las señales de comida marina por todas partes, el clima era perfecto al estar entre el límite de verano con otoño, se tomaron un par de fotos, compraron ropa, caminaron por parques con escasas flores y lagos con patos, encontraron un pequeño templo y dejaron un amuleto típico para proteger su relación. Ya caía la noche y fueron juntos a cenar, bebieron un poco de más entonces iban risueños camino al hotel mientras se abrazaban, Hyungwon pasaba su brazo sobre el hombro del mayor, y el mayor agarraba la cintura de Hyungwon. Salieron de los barrios más famosos y volvieron al sitio tranquilo donde estaba su hotel, no era grande, tenía un estilo típico japonés y su mayor atractivo era el Onsen que tenía. Una vez llegaron al cuarto comenzaron a organizarse para bajar.
-Ahg, maldición- Hoseok chasqueó su lengua llamando la atención de Hyungwon.
-¿Qué ocurre?- Hyungwon le miró confundido esperando darse cuenta su pequeña queja.
-No puedo ir al Onsen- Hyungwon le miró confundido- No son permitidos los tatuajes...
-Cariño... Verdad...- Hyungwon se quedó sentado en el borde de la cama mientras pensaba- Los podemos cubrir, traje curitas.
-Podemos intentar- Hyungwon se levantó a buscar en su maleta el pequeño botiquín que llevaban y volvió con él- Pásame tu pie- Hoseok vió como el menor se sentaba en el suelo y comenzaba a cubrir el tatuaje de su pie, cuando acabó con ese levantó el short del mayor y comenzó a cubrir la frase de su muslo, una vez terminó se mimetizaba bastante bien con la piel del mayor y el menor le dejo un pequeño golpe en la pierna de su novio- ¡Ya está!.
-Gracias Hyungwonie- Hoseok levantó su novio del suelo y le dió un beso.
Ambos bajaron vestidos con ropa ligera al Onsen que se encontraba en el jardín del hotel, era particularmente silencioso, se quitaron su ropa y la guardaron en las taquillas predispuestas para eso. Ellos no estaban acostumbrados a andar desnudos así que iban un poco avergonzados y al estar en un hotel más lejos de la zona turística para evitar los ruidos usuales en zonas concurridas y poder vivir una experiencia más japonesa, el hotel se ocupaba por su mayoría de hombres de negocios de mediana edad, al cruzar la puerta de bambú la mirada de los hombres se dirigió a ambos, y la vergüenza aumentó al darse cuenta que la mayoría en vez de fijarse en sus caras se fijaba en sus cuerpos, especialmente en sus entrepiernas...Ok eso era incómodo. Caminaron lo más rápido posible, sin comenzar a correr solo para mantener un poco de su orgullo, se metieron al agua y así lograron escapar de los ojos curiosos.
Las miradas se disiparon al poco rato de sus cuerpos estar escondidos bajo el agua caliente y por fin se pudieron relajar.
Hyungwon recostó su cabeza en el borde y cerró sus ojos dejando su cuerpo ser ablandado por la caliente agua y sintió un pequeño beso en la mejilla que le hizo volver en sí sonriendo y un poco acalorado, dispuesto a golpear a Hoseok, lo hizo y el mayor actuó como si le hubiera dolido mucho, se agarraba su brazo mientras le decía que era malo, Hyungwon no podía bajar su sonrisa y notó la mirada de reojo de Hoseok donde le guiño el ojo así que se acercó y le devolvió el beso.
-¡Ya no me duele!- Aplaudió como bobo haciendo avergonzar a Hyungwon, y la vergüenza pasó a ser compartida al ver como los otros hombres estaban de nuevo mirando su escena, ya de por si haber tenido que aguantar la mirada desvergonzada a sus partes, ahora tendrían que soportar su cara de asombro al verlos compartiendo un momento de jugueteo. Hoseok llamó la atención de Hyungwon y lo tomó entre sus brazos, le dijo que dejara de mirar los otros hombres y no se preocupara, que al final ellos tenían una vida matrimonial más muerta que viva y que era solo envidia, le atrajo en un abrazo y lo hizo flotar aún agarrado de sus brazos, Hyungwon se relajaba hasta que escuchaba los otros señores murmurar y mirarle raro específicamente a él y más que raro le veían con cara de depredadores, él sabía que era bonito y las chicas u otros jóvenes le habían coqueteado previamente, pero maldita sea llamarle la atención a hombres mayores, eso sí era nuevo, bajo el agua sintió un agarrón fuerte en la cintura y miró como Hoseok miraba feo a los otros hombres.
-¿Qué ocurre?- Hyungwon interrogó y le tocó su mano.
-Acabo de escuchar algo de tu trasero...O del mío, no se bien- Habló mientras su mirada seguía dirigida a los señores- Son unos idiotas- El mayor bufó y agarró a Hyungwon con más fuerza.
-¿Que dijeron?- Hyungwon preguntó confundido.
-No entendí mucho, solo entendí algo de "el culo del extranjero"- Frunció el ceño- y si...Lo dijeron así.
-Mejor volvamos al cuarto que no quiero que te enfades más y golpees a alguien, mi celoso- Hyungwon peinó con su mano húmeda el cabello de Hoseok para atrás y le hizo que le mirara, de verdad no quería que peleará con nadie.
-Esta bien, pero sal adelante de mi, yo te voy a cubrir tu bonito "culo", que es solo mío y no tienen derecho a mirarlo esos ancianos pervertidos- Hoseok se enderezó e hizo que el menor caminará al frente, y el cubría sus espaldas con su cuerpo entero y volvió a escuchar murmuros inentendibles.
Ya por fin con las toallas atadas en sus cuerpo y un poco más seguros volvieron a su habitación a darse de nuevo un baño para quitarse los restos del agua termal, se metieron juntos a la ducha y está vez estaban relajados ambos, sin nadie que hablara del trasero de su novio, ni de sus hombrías, a veces odiaba que llamarán tanto la atención ambos.
-Igual, nunca me vendería a un anciano de esos, están muy feos, arrugados y... Pequeños, que feo- Hyungwon le miró a la cara y luego bajó su mano por el cuerpo de Hoseok- Mira esto; firme, tersio, joven, marcado y...- Llevó su mano al miembro de su novio- Y grande, perfecto a mis expectativas.
-Wonie....- Hoseok le detuvo la mano pero Hyungwon negó y volvió a retomar su movimiento- Probemos que tan suave es la cama, cariño- Hoseok beso con fiereza a Hyungwon y agarró entre sus manos su pequeño pero redondo trasero y lo apretó a su antojo en medio del beso.
Salieron rápidamente, secaron sus cuerpos y de nuevo se subieron a la cama.
-Estoy celoso...- Hoseok habló contra los labios de Hyungwon- La próxima vez voy a alquilar una habitación con Onsen privado.
-Yo también quiero uno así, imagina que podríamos hacer en uno los dos solos...- Hyungwon pasó sus manos por los hombros del mayor- A ti también te miraron mucho.
-Igual, somos los únicos que tenemos acceso a... Esto- Hoseok movió sus caderas contra las del menor e hizo que este soltará un gemido que eso era la chispa que le iniciaba.
-Volteáte-Hoseok se separó y dejó que el menor diera la vuelta y se acostará con su estómago pegado a la cama, Hoseok le levantó de las caderas y lo apoyó en 4, dejó un par de golpes haciendo la piel tornarse color rojo donde había recibido el impacto, dejó un beso para calmar el picor del golpe, juntó los muslos de Hyungwon y comenzó a frotar su miembro entre sus piernas simulando una penetración, desde ahí sentía el pene de Hyungwon chocar contra el suyo con cada embestida, pasó su mano por debajo y lo tomó entre sus manos para masturbarle al ritmo de las arremetidas, el menor movía sus caderas buscando más contacto y Hoseok disfrutaba, pero obviamente quería más, se dobló y dejó una lamida desde sus testículos hasta su perineo para comenzar a juguetear con la entrada de este, le estaba dilatando poco a poco con su lengua y las manos de Hyungwon apretaban las sábanas con fuerza ante la gran cantidad de placer, el mayor volvió a dar unos golpes en el trasero de su novio cuando pensó que ya estaba listo, se estiró y buscó el lubricante que cargaba en su neceser, tomó el bote y vertió una generosa cantidad de este entre los glúteos de Hyungwon, tomó su miembro y comenzó a esparcirlo con este, pasaba su erección de arriba a abajo entre sus nalgas haciendo exasperar su novio el cuál comenzaba a empujarse a sí mismo para atrás. Decidió que ya había sido suficiente juego así que dejó su miembro ser consumido por la ansiosa entrada, llegó al fondo y comenzó a mover sus caderas, la cama temblaba y chocaba al ritmo de las embestidas, aunque en esa posición los movimientos rápidos y certeros eran más fáciles. A Hyungwon no le gustaba estar todo el tiempo dándole la espalda a su novio, pidió como pudo que se detuviera y cambiaron de posiciones, ahora Hyungwon estaba sobre él, Hoseok se sentó apoyando su espalda en el cabezal de la cama, volvió a empalarse con la longitud del mayor mientras le miraba a la cara, ambos se perdían en las expresiones de placer del otro, las piernas de Hyungwon en cunclillas subían y bajaban dejando caer su peso para que la penetración se sintiera al fondo de sus entrañas.
-Ugh... Hyungwonie- Hoseok puso una de sus manos en la cadera incesante de Hyungwon al sentir como le comenzaba a apretar.
-M-me...me vengo- Hyungwon se quedó empalado hasta el fondo y comenzó a mover sus caderas en círculos, cerró sus ojos y volvió un arco su espalda mientras masturbaba su pene rápidamente hasta llenar el estómago, pecho y cuello de Hoseok de su semen. Hoseok no se había venido y el pobre de su novio estaba temblando aún siendo penetrado por su extensión, dejó calmar el menor y salió de su interior, Hyungwon recuperó sus fuerzas y se arrodilló en la cama e hizo parar en esta a Hoseok. Tomó el pene de él y lo estimulaba con su mano, tomo un pañuelo y quitó los restos de lubricante para poder comenzar a engullirlo con ansias, con sus gruesos labios cubriendo sus dientes se dedicó a subir y bajar su cabeza con un ritmo constante, le dolía su mandíbula pero le encantaba que el mayor tomara control de su oral, dejó que sus manos fueran las guías del camino y sus caderas arremetieran suavemente el fondo de su garganta, sacó el gran pene de su boca y recuperó el aire mientras seguía estimulando con su mano, dió lamidas fugaces en la hendidura del pene que poco a poco soltaba más líquido preseminal con un sabor afrutado pero salado que le gustaba particularmente a Hyungwon. Esta vez no pudo avisar y su esencia baño la linda cara de su novio, algunos hilos llegaron a su mejilla y otros atinaron a caer en su boca ya que la mantenía abierta expectante a la corrida de Hoseok, Hyungwon limpió cualquier rastro de semen del pene del mayor y luego limpio su cara llevando a su boca los restos. Hoseok cayó también de rodillas y abrazó a Hyungwon por la cintura mientras le susurraba algo, le atrajo en un hambriento beso, las lenguas chocaban al igual que sus respiraciones, la saliva era fluido compartido, y poco a poco se acostaron sin romper el ambiente dulce pero caliente después de una sesión de buen sexo. Ambos terminaron dormidos, abrazados, sucios, cubiertos de fluidos y lubricante pero no les importaba, a la mañana siguiente el mayor abrió los ojos a las 7, se baño, lavo sus dientes y salió a ir a hacer un poco de ejercicio, antes de ir al gimnasio encargó un desayuno para ambos que fuera llevado a su habitación. Hyungwon siguió una hora más dormido hasta que tocaron la puerta, se despertó solo y de la mala gana, abrió la puerta y le entregaron el servicio al cuarto, un poco confundido lo recibió y volvió adentró, miró lo que era y su estómago le habló ante el delicioso olor, se apuro a irse a duchar y lavarse los dientes en lo que su novio volvía, cuando salió Hoseok estaba en la cama quitándose sus zapatillas deportivas y le saludó con una sonrisa, fue rápido donde él y le dió el beso de buenos días que se debían, desayunaron juntos mientras entre risas y mimos planeaban el itinerario de su día.
-¿Y si vamos al arcade?- Hyungwon tomó el pequeño libro y señaló una página.
-¿Si ganó que me darás?- Hoseok habló jocoso.
-Crees que me ganarás...Cariño- Hyungwon se arrastró un poco más cerca para mirarle desde arriba.
-Insisto...- Hoseok agarró su cintura haciendo contraparte a su hablar activo- Que me darás....
-Ummm... Lo que tú quieras- Hyungwon puso un dedo sobre el pecho del mayor y lo movió en círculos.
-Suficente para mi- Tomó la mano que estaba jugueteando sobre su pecho y dejó un beso en el dorso de esta- Ahora apúrate a vestirte que no te voy a llevar desnudo nunca más a ningún lado, bebé.