I can't fight this feeling [Harringrove]

Capítulo 3

Las semanas pasaban y Billy casi todos los días iba a visitar a Steve al trabajo con la excusa de solo ir por un helado o dejar a Max junto a sus amigos.

Pero por ahora todo iba más relajado, Billy ya no era el típico imbécil que siempre buscaba pelea o hacía comentarios fuera de lugar, de hecho, les comentó que estaba tomando terapias porque quería dejar de ser un idiota con todo el mundo y ya era tiempo de madurar

—¿Crees que deberíamos sacarle información a Max?– preguntó Steve.

—Lo haría ahora mismo, pero espero que no sea como Erica.

Los dos rieron.

—Helado de por v-i-d-a.

Steve soltó una carcajada al ver la horrible imitación que hizo Robin.

Y de la nada, llega Billy con cara de confusión y le sonríe.

—¿Qué es tan gracioso, Harrington?

—Oh, solo Robin me contó un chiste, eso es todo.

Billy rió al ver el nerviosismo que le producía a Steve cada que vez que se le acercaba.

—Bueno, esta vez vine aquí solo para una cosa.

—¿De qué hablas, Billy?

—Quiero invitarte a salir.

Robin y Steve se miraron confundidos el uno al otro por lo que acababa de decir Billy, aunque Robin los miraba emocionada y se fue a la bodega para que Steve pudiera tener un poco de "privacidad".

Gracias.

—Eehh, bueno, yo... – fue interrumpido por Billy

—Me refiero a salir, como... una cita.

—¿Billy Hargrove invitándome a una cita?– alzó las cejas.

—¿Aceptas o no?– preguntó Billy directamente, ya que no quería ser rechazado por Steve.

—A las 7 en mi casa.

—Hecho.

—¿Estás seguro de invitar a una cita a Steve Harrington?– Billy se giró para saber quien había hablado y se llevó con la sorpresa de...

—Nancy... – dijo Steve alegremente y no dudó en ir a abrazarla.

Nancy y él se habían convertido en mejores amigos, ella le contaba todo y así mutuamente.

Desde que Nancy se mudó a New York junto a Jonathan no había vuelto a Hawkins pero aún así mantenía contacto con Steve. Por eso ya estaba al tanto de lo que ocurría con Billy Hargrove.

—No me dijiste que vendrías a Hawkins.

—Fue una pequeña sorpresa– dice Nancy aún abrazándolo.

—Y supongo que no los estoy interrumpiendo, ¿O sí?

—Para nada— Billy respondió con el ceño fruncido, le daba celos que Steve fuera tan cariñoso con Nancy después de todo lo que le hizo por culpa de Byers.

—De hecho, yo ya me iba...

—¿Entonces a las 7?– exclamó Steve cuando Billy estaba casi saliendo de la heladería.

Billy giró para mirarlo y asintió.

Robin salió de la bodega y fue a ver que pasaba.

—Nancy, tiempo sin verte.

—¿Robin?, tanto tiempo.

—Yep... y Steve ¿Qué pasó con Hargrove, qué te dijo?

—Tengo una cita en 3 horas– contestó mientras miraba su reloj

—Jamás pensé que esto iría tan en serio– rió Nancy al escuchar a Steve.

—Ni yo– exclamó Robin con una sonrisa.


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Unos minutos después, llegó Max y Eleven a comprar helados.

Según ellas, estaban haciendo una "salida de chicas" y aprovechando que estaba Nancy se sentaron a conversar. Pero Nancy obviamente sacó el tema de Billy.

—Sí, Billy es más amable ahora– comentó Max.

—A lo mejor está conociendo alguna chica ¿no crees?– exclamó Nancy, intentando sacarle información a Max.

—No lo sé, no me ha dicho nada de ninguna chica— Max tomaba su helado tranquilamente y en ese momento, recordó algo— Aunque hoy me preguntó que es lo que se hacía en las citas. Bueno, no sabe de que cosas hay que hablar y eso, creo.

—Billy debe estar enamorado– Suspiró Eleven emocionada mientras Robin y Steve estaban pendientes a su conversación

—Billy puede ser un idiota, imbécil, estúpido, hijo de...– fue interrumpida por Nancy.

—Calma– exclamó Nancy con su mano mientras reía

—Pero en el fondo... Bien en el fondo, tiene buen corazón.

—¿Y qué le dijiste tú a Hargrove cuando te preguntó sobre las citas?– respondió Robin yéndose a sentar junto a las chicas y dejando solo a Steve detrás del mostrandor.

—Pues, le dije que debía ser él mismo nada más.

Steve reía al imaginarse a Billy no sabiendo que hacer en la cita y pensando en lo nervioso que estaría.

—Yo nunca he ido a una cita– exclamó Eleven.

—¿Mike nunca te llevó a una?– protestó Nancy un poco sorprendida.

—No.

—Podrías tomar la iniciativa e invitarlo tú misma– dijo Robin mientras le intentaba robar helado a Max.

—¿A qué hora es tu cita?– preguntó Nancy a Steve y las chicas lo quedaron mirando

Steve miró inmediatamente su reloj.

—Aproximadamente en una hora, ya debería irme– respondió sonrojado al ver la mirada de Max y Eleven un poco confundidas.

—¿Billy invitó a Steve a una cita?– preguntó Max boquiabierta y sorprendida.