«¿Estará mi corazón jugándome una broma?»
He aquí la historia del hombre que se enamoró perdidamente de una joven que solo lo ve como un padre.
¿Es ese el castigo por todos los errores que ha cometido? o ¿un camino que le enseñará su nueva vida?
|Pr...
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—¡Ya llegué! —gritó una mujer y de inmediato se escuchó un portazo.
Grace quien leía una revista en su dormitorio, la cerró y bajó las escaleras del segundo piso de su casa para dirigirse a su cocina.
—¡Sarah! —le sonrió. Grace no llamaba "mamá" a su madre, simplemente porque no la siente como tal. Biológicamente es su madre pero, no estuvo presente en la mayor parte de su corta vida. Grace, aunque fue criada bajo la manta de su abuela materna, respeta y quiere a su madre, pero no lo suficiente.
—¿Qué pasó ahora? —le preguntó la señora de cuarenta años mientras sacaba las verduras de una bolsa de papel.
—¿Puedo preguntarte algo?
—Sí, adelante.
—Sé que en tus años dorados fuiste una groupie...
—Oh no, ya vas a empezar —la interrumpió.
—No, no, no, esta vez no diré nada malo, lo juro.
La madre de la muchacha la miró con gesto de incredulidad y continuó sacando las compras de la bolsa.
—A ver, te escucho.
—¿Alguna vez te cruzaste con Eric Clapton?
Sarah, volvió a ver con incredulidad a su hija, dejó las verduras y se acercó a ella.
—¿De cuándo acá te importa los músicos que me gustan?
—Lo hago por Ed —mintió—. Cuando me habla de sus viejitos —apartó la mirada y ayudó a su madre a acomodar las compras—, no le entiendo, así que para darle una alegría ahora que está lejos, decidí sorprenderlo al saber más de Eric.
Su madre se detuvo y la miró.
—¿Te gusta?
—Que quiera hacer algo por mi mejor amigo, no significa que me guste —la miró enojada.
—Bien —rodó los ojos—. ¿Qué quieres saber?
—Todo, pero primero quiero saber si en tu juventud tuviste algo con él o no sé, haberlo visto, o algo así.
—Con Clapton las cosas eran distintas —rio—. Alcohólico, drogadicto, aunque declaró que ya lo dejó, su vida estaba malograda, no sé cómo sigue vivo —rodó los ojos—. Recuerdo que en un tiempo no se bañaba y apestaba a mierda. Pero bueno, la razón de eso tenía que ver con Pattie, ella no le correspondía.
—¿Pattie?
—La ex de Harrison —miró a su hija—. El ex Beatle.
—Oh, el mejor amigo.
—Sí. Pero aun jurándole amor eterno, se iba con otras —se encogió de hombros—. Cada vez que me reunía con Pamela o Bebe, ellas tomaban su rumbo con otros y yo me iba con ellas porque Clapton no era tan gentil con las otras groupies. Muchas querían intentar algo con él, pero nunca le era fiel a una, siempre iba por más, pero a la vez siempre pensaba en Pattie.
